Antisocial □ 쯔 극. □ BANGTWICE🌙

diez.

TaeYong, Lee TaeYong.

Es él famoso chico rudo, rompe reglas, rebelde, y entre todas las definiciones negativas, bueno casi; él tiene un bello rostro que oculta tras su largo cabello. Es decir, es todo un friqui.

Vuelta a  las jodidas clases.

Sana, Tzuyu y Momo caminaban por los pasillos tranquilamente hablando de cuánto odian el Instituto, sí, segundo semestre, esté sería el más agotador. Pasaron por sus casilleros para luego ir a una pequeña formación que hacían vuelta a clases, donde el director o directora de cualquier Instituto hablaba deseandonos un muy buen inicio del segundo semestre. Aish.

----¿Qué cosa?-. Momo sonrió

---Produces miedo a la gente, eres un monstruo terrible-. Sana le empujó leve escuchándola reír.

---Es lógico, llegaste como una bomba a su vida y en menos de seis días le dijiste a Hoseok que lo amabas-. Esta vez pronunció Tzuyu

---¿Y...? Cariño, mil perdones pero no soy tú, que apenas conociste a ese tal Jungkook y en menos de lo que canté un gallo ya quieres averiguar todo sobre él. Eres toda una psicópata amiga-. Momo dijo riendo un poco

---Si no fueras mi amiga, créeme que te odiaría-. Tzuyu le dijo mirándola de reojo

---Sabes perfectamente que me amas, guapa-. Tzuyu rodó los ojos

narrador omnisciente.

Él joven cada vez que salía de su hogar observaba detenidamente a sus alrededores para no encontrarse a sus agresores, no importaba cuanto se esforzara por escabullirse, siempre lo encontraban, y esta mañana, no era diferente.

---Tanto tiempo Jungkook-. Pronunció uno de aquellos---, Te extrañe estás vacaciones y mis puños también.

Jungkook se alarmó y cerró sus puños con fuerza.

---Por f-favor.... No m-me hagas d-daño-. Jungkook tartamudeó, sus ojos se estaban llenando de lágrimas.

----¿Qué razón tendría para no pegarte, imbécil?-. Una sonrisa recorrió los labios de su agresor.

---¡Jeon Jungkook!-. Jungkook dirigió rápidamente su mirada a quien le había llamado.

---Hoy tienes suerte-. Su agresor se fue. Y, Jungkook sintió como su corazón se desaceleraba.

---Creí que no iba alcanzar, pero corrí lo más rápido-. Jungkook le miró

---¿Yugyeom... No es h-haci?-. El joven dijo y el muchacho le asintió sonriente.

---Aun no recuerdo con total claridad por que camino debo de ir para llegar al Instituto, y gracias a Dios te encontré... ¿Oye, quien era el chico con quien hablabas?-. Yugyeom le miró expectante.

---Uhm... s-sólo era un a-amigo-.rasco su nuca viéndole.

---Ah, ya veo. ¿Puedo acompañarte al Instituto?-. Yugyeom dijo y Jungkook asintió, ambos se echaron a caminar.

Llegando al Instituto, Jeon le hizo el recorrido completo por el Instituto.

---Y pues esté, esté es la sala de música-. Los ojos de Jungkook brillaron---, Y ahora vamos al salón. Que no querrás tener problemas con el profesor de matemáticas.

---Claro que no.- Yugyeom sonrió y ambos corrieron en busca del salón.

***

Tzuyu ahora vive sola en un apartamento lejos de la casa en donde vivía feliz con su familia que se terminó haciendo añicos, y para pagar su alojamiento en su nuevo "hogar" decidió ponerse a trabajar, sí, trabajar, su trabajo no es de los mejores y relajados, si no que agotador, trabaja en una cafetería cerca de su Instituto; Allí debía llevar pedidos a las mesas, pero en patines, sólo imagínense como deberán de quedar sus pies, horrorosos.

---Lleva este café y los panesillos a la mesa diez, ¡Corre Tzuyu!-.  La señora Taeyeon grito como si su vida dependiera de ello. Recuerdo perfectamente que le había reclamado que no me gusta que gritaran mi nombre de esa manera, pero al parecer mi petición salieron de su oído en tan sólo en una fracción de segundos.

Bufé y me acerqué deslizandome por el suelo con los incómodos patines a la cocina para coger el pedido y llevarlo a la mesa asignada. Era un café de machiatto de caramelo para ser más especificó, y en especial unos panesillos con dulce de mora.

Lo mire con delicia y deseo de comérselo. No había comido nada en todo el día, y aquel café le estaba tentando en todos los sentidos de la palabra. Quería beberlo, claro que lo quería, pero, ello daría consecuencias, por ejemplo el despido de inmediato.

Trataba de sujetar firme la bandeja ya que la vez anterior tropezó y todo fue un gran escándalo acompañado de regaños y con un gran porcentaje de descuento, que le hizo volar la cabeza. Claro que era un desastre en el trabajo, pero trataba de hacer el intento de mejorar.

Al llegar a la mesa, acomodo la bandeja sobre la ya nombrada que estaba frente al ventanal.

---Aquí esta su delicioso café y sus panesillos joven-. Dijo Tzuyu inclinandose un poco y acomodando la bebida, se reincorporó y sacó una pequeña libreta acompañada de un bolígrafo---, Muy bien, serían 2 mil wones joven-. se le quedó viendo atentamente y su pequeña sonrisa se esfumó, Allí frente a ella, se encontraba su ex novio.

---Aquí tienes. Te amo, y espero que me perdones Tzuyu-. Se levantó en seguida y se retiró del recinto, Tzuyu se ,e quedó viendo y prosiguió con su trabajo enfermizo.

《¿Y este que?, ¿Tendrá Mierda en la cabeza?, ¡ni loca le perdonare, ni en mis más grandes sueños!

Patinó por la cafetería,  este sería su último reparto, pero no en el recinto en el que trabajaba, si no que también llevaba pedidos a domicilio.

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Hola, ¿Que tal? u.u
No me siento inspirada, ni tampoco tengo ánimos que digamos, pero bueno
Adios♡