•Capitulo 3•

1K 115 12
                                    

Lalisa
La noche había llegado y me encontraba junto a la puerta en espera de una oportunidad para poder escapar. Taehyung estaba dándose una ducha por lo que decidí hacer todo tipo de cosas para escapar.

-Por más que intentes escapar no lo lograrás -

Al girarme lo veo de pie a mis espaldas, su cabello estaba completamente humedo y la única parte cubierta era su parte inferior.

-N-no pierdo nada con intentarlo - agregué nerviosa.

Taehyung se acerca colocando mi cabello detras de mi oreja.

-Me molesta que quieras escapar, me molesta tu forma de comportarte - se queja - no soy un asesino deberías agradecerme por brindarte todas las comodidades que muchas personas no tienen -

-¿Comodidades? - reí - me quiere simplemente para que haga las cosas que no eres capaz de hacer -

-¿Y eso es tan malo para ti? Te quedarás en mi maldita casa y cumplirás con las obligaciones que yo te de  - continúa - le estás viendo todo lo malo a la situación y al parecer yo tendré que ponerme aún más duro contigo -

-¿Qué debería pensar de un hombre que va a un lugar para comprar a las personas como si fueran simples objetos? -

-Esta conversación me cansó, será mejor que te enseñe la habitación en la que dormirás - continúa - en una hora vendrán unas mujeres a complacerme y no quiero que te vean -

Mis ojos se abren de par en par al escuchar sus palabras.

-¿Complacer? - niego - no dejaré que lo hagas, no viviré con un hombre que contrata mujeres solo para tener sexo -

-¿Entonces quieres reemplazarlas tú? - pregunta.

-Eres un idiota, me das asco - dije subiendo las escaleras.

A medida que avanzaba sentía los pasos que me seguían, al llegar a una de las habitaciones abro la puerta pero Tae-Hyung me toma del brazo.

-En ningún momento te dije la habitación que te pertenecía, niña esta es mi habitación - me mira y suelta mi brazo.

-P-pensé que era esta - agregué nerviosa.

Niega.

-Esta casa tiene cuatro dormitorios y de esos cuatro solo dos son los que mantengo en perfecto estado - hace una pausa y continúa - quiero que me despiertes todos los días antes de que el sol salga y no quiero ver sombras negras en tus ojos ya que me pondría de mal humor por lo que te daré el segundo mejor dormitorio -

-¿Debería entonces estar agradecida? -

Asiente.

Taehyung me guía a la habitación que me había asignado, al abrir la puerta pude ver una enorme cama, un armario y un televisor bastante amplio frente a la cama.

-No tiene muchas cosas pero los colores blanco y negro se ven bien - agregué.

-Dormirás aquí a menos de que hagas algo que me haga enojar mucho y te haga dormir en el peor lugar que tiene esta casa -

-¿Podré algún día ser libre? - pregunté con mi voz un poco quebrada.

Taehyung me mira.

-Falta poco para que las chicas lleguen, será mejor que te enfoques en quedarte aquí y en completo silencio - agrega ignorando mi pregunta.

-¿Puede simplemente responderme? -

Da un paso adelante pero el timbre interrumpe su avance.

-No dañes mi noche, te lo advierto - dice alejándose.

Este iba a ser el comienzo de una vida infeliz para mí, convivir con un chico que al parecer le daba igual mi vida y que le gustaba contratar chicas para realizar actos sexuales era algo completamente desagradable.

-¿Por qué a veces ser tan bueno puede terminar tan mal? - susurré con un nudo en mi garganta.

Después de haber estado un largo rato preguntándome por qué mis padres me habían hecho todo esto; recordé que no tenía ropa para ponerme ya que la mía se había quedado en casa. Me levanto y abro lentamente la puerta, unos fuertes gemidos se hicieron presentes pero intenté ignorarlos.

-¡KIM TAE-HYUNG! - grité.

El me había advertido que no lo hiciera pero mi ropa era más importante que su pasatiempo y de alguna forma tenía que hacer que se cansara de mí.

Después de varios minutos aparece Tae-hyung frente a mi habitación; se veía furioso por lo que no me sorprendió.

-Señor Tae, no tengo más ropa por lo que no puedo cambiarmela - dije fijando mi mirada en la suya.

Se acerca rodeando mi cuello con una de sus manos.

-¿Para eso me llamaste? - se queja - ¡TE ADVERTÍ QUE NO LO HICIERAS! -

-P-pero necesito ropa - respondí con una lágrima que había comenzado a deslizarse por una de mis mejillas.

Sabía que se iba a enojar pero no me imaginaba que su reacción iba a ser tan violenta.

-Escuchame mujer, en estas pocas horas me has hecho perder la paciencia y por lo que veo planeas seguir haciendolo - niega - te estás equivocando, yo no soy tu estupida familia que te abandonó por aburrirse de tí - ríe - pretendo tenerte durante mucho tiempo y si planeas convertirte en un demonio prometo ser el diablo quién los controla de alguna u otra forma -

Intento soltarme pero rodea mi cintura con su otra mano.

-Sueltame, te lo advierto - agregué.

-Hiciste que las chicas que me estaban complaciendo se fueran ¿Acaso quieres tú ocupar sus lugares? -

Taehyung intenta besarme pero logro soltarme, seguidamente levanto mi mano haciendo que esta chocara contra su mejilla dejando una gran marca roja en ella.

-Te enseñaré a respetar a las mujeres - dije sobando mi mano.

Disculpen la demora♡
Espero lo disfruten y no se pierdan el próximo capitulo...

Preciosa Insignificancia #1Where stories live. Discover now