-creí que no lo haría.- murmura Celeste.-felicidades, amiga...

-gracias.- respondo con alegría.

-hacen la mejor pareja de todas.

Continuamos viendo el partido, Dylan es realmente bueno en esto.

(...)

Siento que Jason está muy serio. Tal vez sea porque ayer le dije que no eramos amigos...

-¿cuántos temas faltan?- pregunto viendo mi celular.

-¿para hoy? Solo dos.- dice en el mismo tono en el que me ha hablado todo la tarde.

-bien.

Mamá: recuerda que debes llegar temprano.

-¿has acabado de enviar mensajes?

-ya lo he hecho.- contesto apagando el celular.-¿qué tienes hoy contra mí?

-no es solo hoy.

-se que me odias desde que me conoces. Creí que esto nos habia hecho tolerarnos.

-no puedo dejar de odiarte, ¿lo entiendes? Eres tan superficial, que... agh.

-¿agh? Termina tus insultos, por favor. Quiero ver si tienes la capacidad mental para hacerlo...

-¿ahora hablas de capacidad mental? ¿en que cabeza cabe tener a Dylan Porter como novio? Y yo no estoy reprobando biología...

-mejor me voy. Gracias por tu ayuda, guardaré tu secreto no te preocupes.


Empiezo a hechar mis libros a la mochila. Salgo de la mansión, me siento en la banqueta para llamar a mamá, hasta que un lujoso auto se detiene frente a mí.

-¿qué hace Alaska Kozlov en una banqueta?- pregunta un rubio muy conocido.- sube te llevo con Kriss.

Oliver Queen es amigo de la familia, por asi decirlo. Entro al auto junto a él, comienza a manejar hacia mi casa.

-¿has peleado con Jason?- pregunta sin despegar la vista del camino.

-si.

-todas las parejas tienen sus altos y bajos...

-no somos pareja.- interrumpo riendo.

-eso ya lo sabia.- dice disimulando.-deberíamos cambiar el tema. Como que hará de cenar Kriss.

-¿por qué llama a mamá "Kriss"? Solo sus amigos le dicen así.

Las demas personas le dicen Kristen.

-se podría decir que somos amigos.- dice Oliver.- nos conocimos en Starling, ambos somos de esa ciudad...

-¿desde cuando?- pregunto sorprendida.

-hace como diecisiete años.-responde sonriendo.- acá entre nos, eramos novios.

-¿enserio?

-¿es dificil de creer?- pregunta viendo hacia el camino.

-solo un poco.... bueno, jamas lo imaginé.- comento.- en las cenas ni siquiera se dirigen la palabra...

-tenemos nuestras diferencias todavia, Sky.- dice algo triste.

-¿por qué?

-queríamos cosas distintas, o talvez... eramos tan parecidos que terminamos por apartarnos.

-eso es triste.-murmuro.-¿qué hace en Gotham, Señor Queen?

-viaje de negocios.

-¿con papá?- pregunto, odio llamarlo así, pero es todo por mi madre.

-otro socio.

-¿tiene muchos negocios?- pregunto.- maldición, siento hacer muchas preguntas.

-no hay problema, Sky.- dice sonriendo.-tengo muchos, pero ahora los más importantes estan en Gotham.

Oliver estaciona el auto frente a mi casa. Ambos bajamos y caminamos hasta el pórtico. Toco el timbre, esperando que alguien se digne a abrir.

-creí que vendrías más tarde, Alaska.- dice Ronald.-buenas tardes, Señor Queen. Gracias por traerla.

-fue un placer pasar quince minutos con esta niña.- dice en su típico tono de alegría.- nos vemos luego, Ronald. Adios, Sky.

Se despide y camina de regreso a su auto. Entro a la casa y Ronald lo hace luego de mí, cierra la puerta muy fuerte haciéndome voltear.

-¿por qué te trajo?- pregunta molesto.

-me encontró cuando iba saliendo de la casa de mi tutor.- contesto con el mismo tono. -ahora ire a descansar...

Vuelvo a darme la vuelta, pero Ronald me reprende del brazo.

-¿ahora qué?

-deja de responder en ese tono...

-cuando tu dejes de hacerlo.- reprendo.-¿puedo irme? ¿o tambien me golpearas?

Parece que lo pedí. Da un golpe en mi mejilla, siento dolor, pero levanto la cara y me sacó de su agarre.

Él se va hacia la cocina, yo subo a mi habitación. A llorar una vez más. Aunque, hoy no debo llorar fue un dia muy bueno para mí.

Seco mis lagrimas, y checo que su golpe no deje marca. El que le dió a mamá, fue aún más fuerte; jamas le había pegado pero para todo hay una primera vez. Parecía una pelea como las que suelen tener; hasta llame a Jason para distraerme por lo menos unos minutos, pero de repente se escucho un golpe muy fuerte y colgué la llamada, fuí a ver que pasaba: era mamá con un vidrio encajado junto a su mejilla. Ronald la habia lanzado a la ventana trasera...

-maldito seas Ronald.- murmuro. Sin hacer ruido, voy a su oficina. Mis prioridades son acabar con él a como de lugar.

Dentro no hay nadie, debe seguir en la cocina. Busco en sus cajones, un hombre que golpea a su esposa debe ocultar algo.

-sólo cuentas...

Los pasos en el pasillo se escuchan. Santa mierda. Corro hasta el balcón y me escondo detras del macetero.

-ya te dije.- habla Ronald por el telefono.-la entrega será en el muelle, a las doce. ¿Recuerdas el código? Perfecto.

Perfecto. Un posible delito que demandar.

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1➤ Issues; Jason ToddNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ