CAPÍTULO 17

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EN EL LIMBO

No era la primera vez que se tropezaba en el escenario. Apenas se detuvo en la silla alta que colocaban en el centro iluminado para que el público pudiera verlo cantar los éxitos que se iban acumulando en el repertorio del grupo en el último año. Tommy se acercó a él muy disgustado y le dio un codazo en las costillas haciéndole reír de manera graciosa. Le señaló como si fuera una broma de compañeros y siguió moviéndose cantando aquella melancólica canción.

¡Vuelve-e...
Mi cam-a es fría sin ti...

Alargó un brazo con el micrófono señalando al público que cantarán el resto de la estrofa.

- ¡Maldición Dallas estás jodiendo el concierto!

La voz de Jerry tras él lo hizo tropezar e irse hacía atrás. Apenas fue sostenido por su amigo. Volvió a reír y se llevó el micrófono a los labios.

-¡Vuelve...- gritó ronco cerrando los ojos mientras en la oscuridad se aparecía un rostro hermoso de rasgados ojos verdes de gata y los labios gruesos pintados de rojo - ¡Mi maldita cama es fría sin ti...

La audiencia estalló en gritos festejando su inadecuada interpretación. Dallas levantó ambas manos y siguió cantando hasta que volvió a tropezar y cayó al piso del escenario.

La música dejó de oírse por unos segundos antes de que el batería empezara el acorde para la siguiente canción. Charlie era demasiado inteligente para salvar el concierto que estaba convertido en una mierda total.

Dallas miró las luces del escenario, reconoció cada uno de los acordes y llevó el micrófono a sus labios.

- La oscuridad de la habitación nos cubre🎶
Mientras mis manos dibujan tu cuerpo de seda🎶
Caricias que poco a poco descubren🎶
El deseo que nos invade y se queda🎶
En el silencio de la noche de magia...

Los gritos de las mujeres llenaron el lugar. Sus labios se llenaron de una amplia sonrisa. Cerró los ojos y las noches de pasión que se sabía de memoria llenaron su cabeza de imágenes y se imaginó cantando al oído de aquella mujer sintiendo el cosquilleo de su cabello rubio enredado en sus manos...

- Nada puede detener estás caricias🎶
Que envuelven en fantasía mi memoria🎶
Entre tu cuerpo lleno de delicias 🎶
Que llevan mi deseo a la gloria🎶
En el silencio de la noche de magia 🎶

Nuevamente más gritos. La música se adentraba en sus nervios a flor de piel. Sus ojos se llenaron de lágrimas, pero no quería rendirse ante esos sentimientos que estaban ahogándole.

- En el silencio de la noche de magia 🎶
En la espesura del deseo que carcome 🎶
Todo a su alrededor volviendo a la calma 🎶
Mientras nuestro amor nos colme🎶
Por completo nuestro cuerpo y alma...🎶
En el silencio de la noche de magia 🎶

Se fue levantando del piso. Los gritos anunciaban que la audiencia estaba feliz de estar ahí cantando sus canciones.

- En el silencio de la noche de magia 🎶
Tú cuerpo sobre el mío...🎶
Tu alma encadenada a la mía🎶
Solo tú y yo...🎶
En el silencio de la noche de magia 🎶

Miro entre bambalinas a Roger que no se veía muy contento. Se mantenía de pie y con los brazos cruzados. ¡Mierda! Gruñó y respiró profundamente un par de veces moviendo su cuerpo al ritmo de la música.

- Nada puede detener, nada puede detener estás caricias🎶
Que envuelven en fantasía mi memoria🎶
Entre tu cuerpo lleno de delicias 🎶
Que llevan mi deseo a la gloria...🎶
En el silencio de la noche de magia 🎶

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