Capítulo 7 (Vent)

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El misterioso destello que había emanado de mi abatida compañera había eliminado a los enemigos a su alrededor. ¿Cuánto espacio? ¿15 metros? Sé que no debería estar aquí, pero no pude aguantar la presión por la situación. Praire me miró, y dijo que si quería podía ir, aunque no tuviera ningún biometal. La verdad es que sí conseguí uno, similar al Z, pero un poco más poderoso. Es muy poderoso, pero me fatiga. Es como si cargara con peso muerto. A pesar de eso, decidí ir a ayudar, aunque, como era de esperarse, las cosas ya estaban en lo peor de lo peor, pero de camino a la mejora. Aile intentó interceptar las naves de Serpent, y usé un disparo para evitar el ataque inminente de parte de la extraña nave. Lo único que hice, fue saltar, y mover el sable, y por alguna razón dí una voltereta en el aire y despegó un proyectil hacia varias direcciones. No puedo quejarme de eso, la verdad.

Aile me miró, me sonrió, de una forma extraña. Debo decir que la calidez y gratitud se apreciaban, pero parecía una sonrisa forzada. Claramente se sentía apenada. Una vez me acerqué, me desprendí del Biometal, siguiente a ella. Estabamos frente a frente, a unos pocos metros de distancia. Me miró unos segundos, y luego, corrió hacia mí, y apenas comenzó a correr, lágrimas caían de sus ojos.

-¡Vent!- Me abrazó, y pude sentir como temblaba, y cómo latía su adolorido corazón. Como si de una tragedia se tratase, comenzó a llover. Escuchaba su llanto, y devolví el abrazo con fuerza.
-Aile.- Susurré. -Tranquila.-
Aile apretó las manos en mis brazos, mientras apretaba su cara en mi pecho.
-Iremos al cuartel general, y conversaremos sobre lo que debemos hacer. Por mientras, disfruta el paisaje un poco.-
Aile me miró, se limpió las lágrimas, y luego de comenzar a andar por ella mísma, volvió a generar la chispa que la caracterizó.
-Creo que la rabia me volvió súper héroe- Dijo ella riéndose -y luego llegaste tú. Hubieras estado ahí, hubieramos muerto. Llegaste justo cuando te necesitabamos.-
-Supongo que eso es... ¿bueno?-
-Sí, sí. Hubieras llegado muy pronto, y estaríamos delirando y dando los últimos alientos con la mitad de los biometales. Si hubieras llegado muy tarde, me estarías viendo con depresión.- Dijo Aile.
-Bueno, la cosa es que no pasa nada por ahora, ¿no?- Le dije, apoyando mi brazo en su hombro -Vamos a darnos un merecido descanso, y a despedir al jef... al jefe.-

No me había dado cuenta. No fue hasta ese preciso momento, cuando su muerte en realidad me afectó. Giro, el jefe, mi familia, otra vez se fue. ¿Qué hice? Nada. ¿Qué podía hacer? ¿Por qué nunca puedo hacer nada? ¿Por qué soy tan inútil? ¿Cómo dejaré de serlo? Pareciera que mi clon de entrepierna cambiada me leyó la mente, chasqueó los dedos y movió la mano, con la palma hacia mí.
-Hey, no hay que bajar los ánimos Vent. Hay mucho por qué pelear. El jefe no está con nosotros, pero estoy contigo, y tenemos los biometales, ¿no?-

La lluvia cesó. Sus ojos brillaban, y mi mirada se reflejaba en ella. Pude distinguir dentro de esa figura, un propósito similar. Bueno, pensé, después de todo, somos la mísma persona, ¿no?

La cosa, es que, en realidad no es así. Ella es más flexible que yo, pero yo soy mano dura, y eso se refleja en nuestras personalidades.

No puedo esperar a ver qué nos trae el destino. Estoy seguro de que somos capaces de lograr todo. Con mi mal temperamento y su sensibilidad, lograremos conseguir la mejor de las historias de moda de hace 300 años.

Mega Man ZX: Dobles TemporalesWhere stories live. Discover now