Mega Man ZX: Dobles Temporales

Capítulo 5 (Aile)

Decidimos viajar por el Transerver. Entré por mí misma primero, y me sorprendí por lo que ví: Estaba en una nave, en el aire. Ahí estaba Giro, Prairie y un guardia.
-¿Este es el cuartel general de los guardianes?- Dije, observando todo lo que había en la sala -Definitivamente, no me esperaba una nave.-
Así, también entró Vent, y tuvo una impresión similar a la mía.
-Los guardianes tenemos que explorar el mundo, así que necesitamos una forma conveniente de hacerlo.- Se acercó a Vent y a mí, y acercó a Giro con gestos de la mano -Estoy muy agradecida de que estén bien.-
-Hey, Prairie- Dijo Vent, sacando cosas de sus bolsillos -Encontré estos chips de computadora mientras estaba afuera.- Los sacó todos, y estaba dispuesto a dárselos a Prairie, pero Giro lo detuvo.
-¡Vent! ¡No puedes llegar y llamarla sólo por su nombre! Dios, los niños de hoy...- Le dijo Giro a Vent.
-No importa, Giro.- Dijo Prairie, sonriendo.
-También tenemos la evidencia- Dije -Esta cosa de aquí... el peluche.-
-Sí. Ese es un regalo de mi hermana de hace mucho tiempo. Bueno. Ahora quisiera disculparme por todos los líos en los que les metí. Juntémonos en el centro de mando y explicaré todo ahí.-
Así fue. Durante el camino, decidí conocer un poco el lugar, y me encontré con varios personajes interesantes, como Anguille, un mecánico, o Silure, que también lo es.

Al entrar, vi a todos reunidos dentro.
Estaba sentada en una gran silla, con millones de botones y cosas al frente, nadie más ni menos que Prairie, quién se dio vuelta, con su peluche, y se presentó.
-Denme mi oportunidad de darles la bienvenida. Y...- Se levantó, dejó el peluche en la silla -Soy Prairie. Comandante de los guardianes.-
-¿Qu...Qu-QUÉEEEEE?- Gritó Vent, con una cara de sorpresa muy graciosa -¿En serio...?-
-Ella es alguien muy importante. Un cliente muy valioso. Por eso quería que le llamaras por su título, y no su primer nombre.-
-Pero... ella tiene la misma edad de nosotros- Dije -¿Por qué ella es la comandante, a esa edad?-
En ese momento. La cara de todos, menos Vent y yo, se oscureció. El ambiente se puso un poco tenso.
-Las máquinas conocidas como Mavericks, siguen atacando a la gente, y no se detienen. Esta situación ni siquiera debería existir.
Hace cientos de años, hombres y reploides pusieron de lado sus diferencias y llegaron a un acuerdo. Los guardianes han continuado buscando las raíces de los ataques de Mavericks que nos asedian constantemente. Un día, nos encontramos un laboratorio de investigaciones perteneciente a 'cierta científica'.-
-¿Cierta... científica?- Dije pensativa.
-Sí.- Dijo, para luego cerrar los ojos -La primera comandante. La que desapareció. Ella... era mi hermana.-
-Oh... ya veo...-
-Y estábamos llevando el Biometal que encontraste a ese mismo laboratorio.- Añadió Giro.
-Hace mucho tiempo, el mundo de humanos y máquinas fue salvado por un grupo de leyendas. Los biometales son fragmentos de la conciencia de esas leyendas. Debería haber una pista respecto a los ataques Maverick guardada en ese laboratorio.- Dijo Prairie. Dicho esto, el ambiente se calmó, y Prairie con él. Levantó la mirada, lanzó una sonrisa.
-El laboratorio de investigación de Prairie está justo al lado. Deberías llevarlo para que podamos analizarlo. Por si me necesitas, estaré aquí con los chips que trajo Vent.-
Giro decidió irse, y fui con él al laboratorio. Me encontré con Fleuve, quién me miró con una chispa de felicidad gigante. Pero no creo que haya sido por verme.
-Oh, bien, bien. Ahora, ¿Donde está el fragmento del Biometal?- Dijo Fleuve. Sabía que no era por mí. Le cedí el Biometal, lo colocó en una especie de hueco, y comenzó a tocar el teclado como si no hubiera un mañana.
-Ah... excelente...- Decía, mientras pasaba los datos. -Listo, datos transferidos. Muchas gracias. Ahora, ¡Toma de vuelta!-
En ese momento, llegaba Vent, corrió por la puerta.
-¿Llegué muy tarde? Quería ver como procesaban la información del Biometal.- Dijo Vent.
-Es una pena Vent, llegaste muy tarde.- Dije, y luego de eso, se rompió el ambiente, otra vez.
-Se registran ataques al área D. Los objetivos se marcarán en la llegada. Repito, Mavericks atacando el área D.- Dijo la voz. Comenzaron a parpadear las clásicas luces rojas, de alerta. Con Vent nos miramos, Giro, se encogió de hombros y fue con nosotros al centro de mando.

-Parece que el enemigo comenzó a moverse.- Dijo Prairie.
-¿"Enemigo"? ¿Eso significa que NO eran ataques Mavericks aleatorios?- Replicó Giro.
-Al revisar los chips que trajeron, descubrí un programa controlando a los Mavericks. Hay alguien detrás de los ataques, pero hace parecer que fueran sólo ataques aleatorios. Deben estar intentando robar el Biometal que llevas.-
-Las fuerzas de seguridad de Slither inc... ¿Dónde están ahora?- Dije. Creció un miedo y furia en mí. Había algo, que no necesito explicar, que me estaba consumiendo. -¿¡Por qué no han llegado aún!?-
-Toma tiempo llevarlos, desde la oficina central hasta sus patrullas en la ciudad. Fuerzas de guardianes intentan ganar tiempo interceptando a los Mavericks del área D.- Acto seguido, sonó una alarma.
-Aquí fuerzas terrestres. Se ha detectado un movimiento hacia el distrito residencial. Tropas intercambiando fuegos en el área D.-
Desde ese entonces no pude aguantarme. Escuchar el caos a mis pies...
-Y... ¿¡Qué ha de la gente en la ciudad!?- Grité, y corrí a la salida.
-¡Te voy a acompañar!- Gritó Vent.
-¡No van a ir a ninguna parte!- Dijo Giro, interceptándonos en la carrera. -Vent. El Biometal.-
-¡Je-jefe...!-
-Vent.-
-¡No podemos quedarnos de brazos cruzados! La gente... mamá... Jefe, por favor.-
-Te explicaré cuando podamos acercarnos. Ahora haz caso, por favor.- Cedió el biometal, con sus manos tensas. Me miró a los ojos, com los suyos en lágrima y llameantes.
-¡Yo no voy a sentar ningún centímetro!- Dije.
-¿¡Y qué vas a hacer!?- Dijo Fleuve.-
-Con el Biometal, puedo unirme y dar fuerza.-
-¡Piensa Aile!- dijo Giro, frío, y con una mirada dura -¡Si vas ahí, sola con el Biometal, caerás directo a sus manos! ¡No sabes pelear! Es demasiado peligroso dejarte sola.-
-Y sólo por eso vas a quedarte sentado... ¿¡Y ver como los Mavericks hacen esto!? ¡Van a herir a todo el mundo, Giro! Gente como mi mamá... ¿¡tú vas a DEJAR. QUE SUCEDA. OTRA VEZ!? ¡No soy como tú! ¡No puedo quedarme y mirar! Voy a acabar con todos y cada uno de ellos.- La rabia me consumió, y me fui sin escuchar.
-¡Aile!- Fueron los gritos de Vent y Prairie, asustados, con la mirada fría hacia mí.-
-Dios.. ¿Por qué ella nunca me escucha?- Dijo Giro, con un tono casi irónico.

Me dispuse a irme, y de repente... Vent apareció, al frente mío.
-¡No te dejaré ir!-
-¡No me toques!- Le grité. El insistió, usó fuerza física para impedirme seguir.
-Vas a ponerte a un grave peligro, Aile. No debes.-
-¡Tú deberías entenderme! Pero NO. El sumiso perro de su jefe, no puede pasarse de listo y hacerle frente.-
-¡Tiene razón! Tienes que escucharme...-
-¿¡Escuchar qué!? ¡Yo sé lo suficiente! Vas a dejar que gente como mamá...-
-¡Basta de lo de mamá! Sé lo que le pasó a mamá, ¿y qué? Quieres...¿¡Acaso terminar como ella!? Tienes que ocupar. TÚ. CEREBRO.-
-Vent, tú no entiendes.-
-No, ¡TÚ no entiendes!-
-...- Lloré.
-...- Se relajó. Se colocó triste.
-...Vent... yo...-
-Por favor... no quiero que te suceda algo... como a mamá...-
-Vent...-
-No lo hagas... no tienes por qué hacerlo.-
-Disculpa Vent. Sí que tengo que hacerlo. Tú mismo dijiste. Sí no lo hago, pasaré mi vida arrepintiéndome.- Dije. Vent me miró, con sus ojos llorosos y una mirada dura. Yo no dije nada, y me fui.