Capítulo IX: Mi héroe

829 29 4
                                    

Regresé con mi madre a mi casa. El funeral de mi padre sería hasta las 10:00am en la Catedral de New York. Ambas nos recostamos juntas en la cama, ambas no queríamos dormir, no queríamos nada. Cerré mis ojos con la esperanza de abrirlos y despertar, despertar de esta pesadilla denominada realidad. Despertar y dejar de saber que mi padre había muerto en manos de un monstro. Pero al abrirlos nada de eso pasaba, seguía en esta miserable realidad sufriendo, sufriendo por no poder tenerlo más, junto a mí. Nunca más.

*****

Desperté. Mi madre no estaba y se escuchaba mucho ruido de fondo, mi vista estaba nublada y poco a poco se volvía nítida. Me senté con un poco de esfuerzo en el borde de mi cama, aún tenía la ropa que tenía ayer en la tarde cuando almorzaba. ¡Je! Quien diría que mi vida no sería la misma después de eso. Primero el secuestro, luego el monstro de Norman, luego Peter siendo Spider-Man, su captura... ¡su captura!, lo había olvidado por completo. Peter estaba capturado en SHIELD, pero ¿por qué? Tal vez por los tratados de los súper héroes. ¿Volvería algún día?, no lo sabía. Vaya mierda, había perdido a mi padre y ahora tampoco sabía si mi Peter volvería.

De pronto mientras pensaba mi madre entró a mi habitación, tenía sus ojos rojos e hinchados por tantas lágrimas.

-Helen Stacy: ¿Hija?

-Gwen Stacy: ¿Es real mamá?

Mi madre bajó la mirada y se secó las pocas lágrimas que surgieron con su manga.

-Helen Stacy: Si

Al instante me solté en llanto y ella se acercó a abrazarme una vez más. Una vez más, después de tantas. Tantas veces que había llorado, ella era mi madre, la mejor madre.

-Helen Stacy: ¿Qui... quieres algo para comer?

Dijo mi madre con débiles tonos. Le negué con la cabeza, no tenía apetito.

-Helen Stacy: Vino la familia hija. En un par de horas debemos ir a despedirnos de tu padre

Comencé a llorar muchos más y abracé aún más fuerte a mi madre. Yo no quería hacer eso.

-Gwen Stacy: ¡No quiero mamá!

-Helen Stacy: Tenemos que hacerlo hija

Preferí no decir nada y simplemente lamentarme, mi madre y yo estuvimos así. Abrazadas. Durante un minuto más, tal vez dos. Después de eso mi madre dijo que tenía que bajar para atender y charlar con la familia que había venido, acepté con la cabeza y me quedé ahí, echada en mi cama esperando que todo esto terminara, que ya terminara.

De repente escuché que alguien tocaba a mi puerta, no dije nada e ignoré. Una vez más tocaron.

-Peter Parker: ¿Gwen, amor?

No podía creerlo. ¡Era Peter!, ¡había vuelto! Me quedé sorprendida por un par de segundos y de inmediato abrí la puerta. No sé qué cara tenía yo, pero estaba segura de que no era la mejor. Y ahí estaba él, igual de lindo que cuando lo conocí aquella vez con esa estúpida máscara de Iron Man, quien diría que al final de cuentas si llevaría una máscara. Sin pensarlo dos veces lo abracé. Lo abracé lo más fuerte que pude y comencé a llorar sobre su pecho, solo eso, solo llorar. Él no dijo nada, solo me abrazó, solo eso, solo abrazos.

-Gwen Stacy: Peter, él... él se fue. ¡Yo no quería!

Él me miró con ternura y misericordia, le torturaba verme así.

-Peter Parker: Gwen, entiendo tu dolor, pero te amo y no te voy a dejar sufrirlo sola, estoy contigo mi vida

Una vez más comencé a llorar y me clavé en su pecho, me conmovía escuchar eso de él, realmente lo hacía.

-Peter Parker: ¿Sabes Gwen?, él está en un lugar mejor ahora

-Gwen Stacy: Lo sé Peter, pero no puedo soportarlo, ¡no quería que se fuera!

-Peter Parker: Yo tampoco. Y menos de esa forma. Perdóname por favor

Al terminar de decir eso Peter comenzó a llorar también. No entendía porque, pero supuse que algo tendría que ver con Spider-Man. De inmediato lo miré a los ojos, con un rostro un poco más tranquilo.

-Gwen Stacy: ¿Eres Spider-Man verdad?

-Peter Parker: Si Gwen, soy Spider-Man

Ya lo sabía. Pero aun así quería escucharlo de sus labios. Por todos los cielos, ¡me llenaba de orgullo saber eso!, ¡saber que mi Peter arriesgaba su vida por la de los demás! Él era un chico realmente bondadoso y... esas palabras de aquel día, ese día en que su tío ben murió cobraban sentido, mucho sentido. Con un gran poder viene una gran responsabilidad. Era cierto. Y mi padre era la prueba de ello.

-Gwen Stacy: Te amo

Peter sonrió pero a la vez bajó la mirada.

-Peter Parker: Pero no pude salvara tu padre Gwen, no pude. Tampoco pude...

Un par de lágrimas se deslizaron por sus mejillas. Lo miré con ternura, pobre chico, no merecía responsabilizarse de lo que pasó. Ni siquiera por su gran poder. Con delicadeza limpié su mejilla.

-Gwen Stacy: Peter, me duele perderlo, pero no puedo culparte por ello, él tomó la decisión de arriesgar su vida para ayudarte. Y no importa si no lo salvaste, lo que importa es que su muerte no fue en vano, pues al final derrotaste a Norman y me salvaste a mí y a tu Tía, eso es lo que él quería. Honraste su muerte

-Peter Parker: Pero pude hacer más

-Gwen Stacy: Él hubiera no existe. ¿Sabes que amaba de mi padre?, arriesgaba su vida para ayudar y salvar a otros, sin esperar ningún reconocimiento

Cuando dije eso se me hizo un nudo en la garganta y estaba por llorar más, pero tenía que terminar mi sermón.

-Gwen Stacy: Eso era lo que más admiré de mi padre Peter. Y ahora que me entero que tú lo has hecho todas las noches, todo el tiempo desde hace más de un año Peter, Peter eso me hace amarte aún más, porque eso hace que me dé cuenta de la maravillosa persona que es el chico que amo

Un par de lágrimas brotaron de los ojos de Peter después seguimos abrazados durante un buen rato. Se llevó acabo la procesión, muchas personas asistieron, en verdad, muchas. Mi padre fue el Capitán de la policía de New York, el mejor Capitán. No esperaba menos. Durante la misa Peter dio un discurso en honor a mi padre, un hermoso discurso que a más de alguno nos hizo llorar.

La procesión se llevó a cabo, Peter ayudó a cargar el ataúd. ¡Era hermoso!, centenares de personas caminaron junto a nosotros desde la Catedral hasta el cementerio. Yo lloré, yo sufrí, yo negué. Pero al final, mi padre estaba en un lugar mejor y... aunque me doliera en el fondo sabía que eso era lo mejor.

A la distancia estaba Harry, despidiéndose de Norman. Pero estaba solo. Peter decidió ir con él y yo me quedé por un momento sola frente a la tumba de mi padre. Comencé a recordar todo lo que juntos habíamos vivido.

-Gwen Stacy: ¿Sabes? No estoy segura si desde el cielo puedes oírme papi pero te amo. Gracias por enseñarme todo lo que pudiste, gracias por no fallarle a la ciudad de New York, gracias por estar siempre para mí y mi madre, gracias por ser tan valiente y estar dispuesto a luchar contra monstros con tal de que yo estuviera bien. Gracias por arriesgar tanto por mí, por mi madre, por todos papá. Lamento no haber sido la hija que esperabas, lamento haber cometido ese error con Harry. Curioso ¿no?, ahí está Peter junto al padre de mi hijo. Perdóname por... por no aceptar quedarme con mi niño, a pesar de yo sé que tú lloraste muchas noches por tu nieto. Perdóname papá. Tú eres mi héroe papi

Comencé a llorar una vez más. Peter aun no volvía pero yo quería estar ahí, junto a mi padre.

Cuando Peter volvió todos juntos regresamos a mi casa.

Peter y yoWhere stories live. Discover now