Adolescentes... con mala suerte.

¡No te queda!

Por primera vez, el salón de clases estaba en silencio y en uno muy incómodo mientras intercambiaban miradas, sobre todo a cierta azabache que fingia leer un libro para que no la involucren.

Kim se aclaró la garganta y dio golpecitos con su bolígrafo, en la mesa haciendo que todos le den atención ya que era un código que desarrollaron para pasar respuestas en los exámenes (Adrien no fue incluido por ser malo guardando secretos si hacía algo malo)

Los golpecitos decían.

"Que alguien haga algo con alguien."

Todos se confundieron, excepto Alix que suspiro con fastidio y usó la segunda fase de clave morse, flatulencias.

"El idiota quiso decir que alguien haga algo con Adrien.
¡Por favor Kim..."

Suspiró profundo y continuó.

"Estudia más nuestros lenguajes secretos."

Finalizó mientras Nino abría la puerta y los demás las ventanas para suspirar aire fresco.

Alya le dio un leve codazo a su amiga la cual fingió no sentirlo.

-¡Deja de fingir que sé que ése libro es un cuaderno en blanco! Debemos hacer algo con Adrien.

Le susurro mientras la peliazul levantaba la mirada por sobre su cuaderno para ver como Adrien se peinaba.

-¡¿Por qué debo ser yo?! Nino es su mejor amigo... su único amigo de hecho.

Susurró mientras miraba a su amiga.

-¡Sabes que Nino es muy blando con ésas cosas y no le podrá decir nada cuando Adrien ponga ojitos de cachorro!

Nino que oyó éso, bajo la mirada por la triste y rara verdad.

-¡No me importa, yo no se lo diré!

-Entonces prepárate por que para que Adrien no se sienta herido, nos comunicaremos en clave morse de gases y eructo...

-¡Adrien!

El rubio se volteó asustado por el grito que dio su amiga la cual salió de su asiento y se paró delante de él para señalarlo con el dedo.

-¡Ése bigote no te queda! Así que ya deja de peinarlo que parece una ardilla elegante.

Y así, oficialmente el pobre y débil corazón de Adrien se hizo pedazos mientras empezaba a lagrimear.

-P...pero Nino y mi padre me dijeron que se me ve bie...

-¡Por favor hermano, yo te lo dije para que no me hagas una escenita y tu padre ni te miró, sólo dijo si mientras inventaba nombres raros de villanos en su cuaderno!

Grito el moreno antes de ir a los brazos de Alya y ocultar su rostro en el hombro de su novia para no tener que ver a su amigo llorando.

Adrien asintió, se puso de pie y miró a todos sus compañeros.

-Okay, me voy a afeitar, ustedes ganan.

Y se fue mientras todos celebraban su victoria contra el bigote de Adrien...

En el siguiente examen todos fueron castigados por que cierta persona que perdió su bigote, quiso vengarse y le contó a la maestra del código de trampa que usaban.
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¡Hola!

Me estoy empezando a quedar sin ideas para está historia ¿Alguien tiene una?

Espero que les haya gustado el capítulo.

Gracias por su tiempo.

Volveré...

Pd: No inventen códigos secretos para pasarse respuestas en los exámenes, éso no es de niños buenos.