Nuestra Lucha - Chriserick (Segunda Parte)

Capítulo 25

- Mi ropa apesta, no me la quiero poner.

- No empieces con tus cosas y apúrate.

Tuve que apresurarme, esto era problema seguro. Su celular comenzó a sonar, al parecer estaba en el sofá.

Abrió la puerta y fue por él, se metió al baño a contestar, escuché que dijo que lo espere porque según se estaba bañando, que respuesta más poco original.

- ¿Preparo la cara o los puños? - ya estaba asimilando que habría pelea.

- Quédate aquí, no quiero que salgas.

- ¿Por qué? Qué nos encuentre juntos.

- No y sin problemas Erick - salió cerrando la puerta.

Me volví a recostar en la cama, saldría solo si era necesario. No escuchaba nada y eso me estresaba.

Escuché un portazo bastante fuerte, me acerqué a la ventana viendo que su novio se iba enojado.

Sentí que algo se quebró en la sala - ¿Terminarían?

La puerta se abrió dejando ver a un Christopher enojado. Comenzó a buscar algo entre las sábanas, bajo la almohada e incluso en el pequeño mueble que estaba al lado de la cama.

- ¿Qué buscas? - se acercó a mi revisando mis bolsillos, sacó mi celular y comenzó a revisarlo. Puse mis manos en la boca, ya sabía que era lo que buscaba.

- Explícame esto - me mostró la foto.

- ¿Se enojó?

- ¿Me preguntas si se enojó? ¿Es enserio?

- No me dices nada por eso te pregunto.

Caminó por la habitación - no puedo creerlo.

- Igual en mi defensa yo no te obligué a nada.

- DEJA DE HACERTE EL IMBÉCIL POR UNA VEZ EN TU MALDITA VIDA - me quedé en silencio, jamás lo había visto tan enojado - te dije que quedara entre nosotros.

- Lo siento.

- ¿Lo sientes? Me volviste a fallar Erick, otra vez.

- No Christopher - me intenté acercar.

- ¿Contigo las cosas siempre van a ser así? Era un día importante para mí, te di la oportunidad de que estés conmigo y me sales con esto.

- Déjame explicarte.

- ¿EXPLICARME QUÉ? ¡CONTIGO AVANZO UN PASO Y RETROCEDO DIEZ! - sus ojos estaban de apoco llenándose de agua - estuve contigo a pesar de sentirme culpable.

- Lo sé, lo sé, lo sé...

- No, no lo sabes - ya su voz era temblorosa - ¿Por qué me haces daño? ¿Qué te hice?

- Cálmate un poco Christopher - lo único que recibí fue un empujón.

- ¿Querías que termine conmigo? Lo lograste ¿Querías alejarlo de mi? LO LOGRASTE TAMBIÉN.

- Puedo hablar con él.

- ¿Para que? ¿Para que me termine odiando?

- ¡NO! - me estaba sintiendo la peor persona del mundo.

- Siempre es lo mismo contigo - comenzaron a caer lágrimas.

- No no no llores - lo abracé un momento pero terminó apartándose.

- No puedo más, te juro que ya no puedo.

- Tengo que decirte algo - tomé su mano - quizás podamos...

- ¡NO ME TOQUES!

- ¡ESCÚCHAME! - pedí.

- Se acabó - dejó ver la cadena que teníamos ambos.

- Christopher...

- Ahora si que se acabó, te quiero fuera de mi vida - dijo para cortar la cadena y tirarla al suelo.

En ese mismo momento sentí algo horrible en el pecho, sentí que me estaba ahogando al nivel que puse mi mano en él, lo miré intentando que me disculpe.

- Cuando regrese no te quiero ver aquí - secó sus lágrimas y salió.