No me quise quedar y solo estire mis alas y me fui siguiendo a Midna y a Luna, cuando me di cuenta, Virgo me estaba siguiendo, se acercaba rápido y se notaba que no venía con buenas intenciones.

— Veamos qué tan bueno eres para esto —

Comenzó a dispara rayos de luz con el objetivo de derribar me, no íbamos rápido, pero si seguía a esa velocidad no iba a seguir en el aire mucho tiempo, así que comencé a acelerar, Virgo me seguía, sus movimientos eran impredecibles, al menos sin mi umbra, así que solo lo abrí y comenzó la verdadera diversión, poseía control sobre otros elementos pero no había entrenado lo suficiente para controlarlos, así que solo ataqué con las sombras, era muy difícil apuntarle a un blanco en movimiento, pero debía tener una respuesta al ataque, solo se me ocurrió una cosa, usar las estrellas de mis alas, era una idea estúpida teniendo en cuenta lo que pasó la ultima vez, pero situaciones desesperadas siempre requerirán medidas desesperadas, no tenía opción.

— Eres malo para esto hermanito —

— Solo observa —

Me teletransporte antes de que uno de sus rayos me golpeara.

— Cambiamos de papeles —

Las alas empezaron a doler me de nuevo, volviendo a soltar ese humo dorado, Virgo intentó defenderse usando una especie de sol pequeño.

— Toma esto —
« Explosión nova »

Lanzó esa cosa hacia mi como si de una pelota se tratara, solo la esquivé arqueando mis alas hacia abajo y cuando las extendi de nuevo, lo hice con una fuerza que lanzó las estrellas hacia Virgo, sabia que ella era mala con ataques múltiples.

— ¿ Flechas Artemis ?, ¡ Imposible ! —

Las estrellas dieron en el blanco, pero la cosa no paró ahí, un aura oscura salía de Virgo, los ojos le cambiaron a azules, se comenzó a poner molesta y decidí sujetar la, pero estaba cayendo, arriesgarme a un vuelo en picada era lo único disponible, el como logré llegar a ella no fue sencillo, no paraba de atacar, la sometí usando las cadenas del destino, al revisarla vi que tenía un sello de posesión, alguien la estaba controlando como si fuera una marioneta, con algo de tiempo logré dar con el nombre del sello, era el sello « lumme » de posesión, era sumamente raro verlo, pero era fácil de remover, el único problema era que se debía usar fuego para removerlo, y teniendo en cuenta que era Virgo quien lo tenía no lo hacía trabajo fácil, pero había que intentar.

Usé una técnica de Pyrus, un removedor de impurezas conocido como fuego azúl, comenzó a gritar como una bestia cuando le puse los dedos encima, se notaba que le dolía.

No fue hasta que la llama cubrió su cuerpo entero que dejó de gritar como si la estuvieran asesinando, y ya que seguíamos en el aire, solo la tomé, la abracé y abrí mis alas, el impacto del aire sobre ellas me dolió, pero de mantener a mi hermana a salvo, valía la pena el dolor, despertó estando en el aire, llevábamos media hora de vuelo después de eso, al ver como estaba siendo abrazada, me empujó haciendo que la soltara, como ella también podía volar no me preocupé tanto, a decir verdad, me dio algo de risa.

— ¡¿ Qué carajo crees que haces ?! —

— Salvar tu vida, oxigenada mal agradecida —

— ¡ No me vengas con eso !, ¡ Ya eres de Midna, no tendrías que estar tocando me ! —

— ¿ No recuerdas nada ? —

— Recuerdo que estábamos peleando, luego lanzas te esas estrellas, y luego no recuerdo nada —

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