(♢)²PERSISTENT ┊ChenMin;; ⇢Omegaverse.

☾13

—No tienes por que hacer esto Dae, no es necesario. —Espetó Minseok en voz baja, habían salido del hospital y el doctor le había recomendado a Minseok descansar lo más que pudiera.

—Debo asegurarme de que estés bien. —Rumió abriendo las puertas del apartamento, Minseok suspiró tratando de calmar el latir de su corazón.

En un suspiro cargado de sentimiento Minseok entró junto a Jongdae al apartamento, todo impecable, la tensión era tan palpable que Minseok no creía que Jongdae no soportaría más tiempo junto a él.

Pero era una tensión...diferente.

No quiso pensarlo demasiado, tal vez solamente era él quien percibía el aroma de Jongdae más fuerte y picante de lo normal como también su propio aroma completamente dulce. Miró la espalda del alfa completamente tensa y tuvo que apretar los puños y mirar al suelo.

—Siéntete cómodo, ¿Puedo ofrecerte algo de tomar? —Expresó casi en un susurro, su estómago sintiéndose extraño, sus piernas temblorosas, ¿Podría ser...?

—Y–Yo lo tomaré.—Avisó antes de irse rápidamente a la cocina.

Minseok lo observó irse con pasos rápidos a la cocina sin siquiera mirar hacia algún otro lado que no fuera el frente. Revisó su celular encontrándose con un mensaje de Baekhyun informándole que la pequeña Yun estaba perfectamente bien y adjuntando una foto de ella junto a Chanyeol y él, Minseok sonrió.

Se sentía mareado, el aroma a canela y girasoles inundaba el apartamento sin piedad, el calor se apoderó de cu cuerpo en un golpe, el dolor penetrando su cuerpo y el líquido segregándose, su celo.

—M-Mierda...—Se balanceó hacia su habitación siendo imposible, su cuerpo y joder, él mismo deseaba ir hacia Jongdae, sus gruñidos se escuchaban y sus pasos fuertes en rompiendo sus tímpanos lo hicieron detenerse.

Jongdae llegó hacia él como una fiera, deteniéndose abruptamente en el umbral del pasillo, sus miradas encontrándose como hace diez meses, desesperadas, completamente pidiendo algo que no podía pasar, pero joder que lo deseaban. Pero Minseok no podía hacerle eso a Jongdae.

No otra vez.

—L–Lo lamento. —Susurró con esfuerzo tes de irse corriendo a su habitación y encerrarse.

Jongdae trató de relajarse haciéndosele completamente imposible con el dulzor del aroma de Minseok aún filtrándose, su cuerpo tenso haciendo un esfuerzo inhumano en no ir tras Minseok.

—¿P-Podrías buscar los s–supresores en el gabinete de la cocina? —Pidió Minseok al otro lado de la puerta, Jongdae tomó una profunda respiración y se alejó de la puerta, yendo con pasos pesados a la cocina.

Abrió el gabinete y se encontró con una gigantesca reserva de supresores vacíos, su corazón latió con preocupación, ¿Cuantos tomaba al día?

—N–No hay más. —Gritó con uno de los frascos en la mano, sólo que no eran supresores, eran antidepresivos.

Jongdae lanzó el frasco al suelo y corrió a la habitación donde Minseok se mantenía callando su llamados, abrió la puerta con brusquedad, Minseok estaba en la cama retorciéndose en dolor.

Sus miradas chocaron rogantes.

—Mierda Minseok...—

•••

Las leo, que piensan?
Comenten, sus comentarios me dan vida
Disculpen la tardanza
Amo a Jongdae mas que mi vida

Nos leemos
Dani.