Final Feliz

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Wonwoo estuvo presente con los brazos cruzados desde el inicio hasta el fin, siguiendo a través de las habitaciones al padre que no prestaba mucha atención a su actividad, argumentando que a veces solo era necesario creer un poco y haciendo hincapié en que no había ningún objeto religioso (fuera de las cruces del sótano) en la casa. Era culpa de Wonwoo quizás, quien no era del todo devoto.

Entonces el recorrido por la casa pareció lento y corto, como si fuera solo una pequeña cabaña en lugar de cas una mansión. Las habitaciones vacías y la luz entrando por la ventana hacían una bella imagen ante los ojos del padre quien no dejaba de alagar, lanzando agua bendecida por cada rincón. Una cruz fue colgada en la puerta al igual que fue dejada una biblia.

La casa por primera vez se sintió limpia, la pesada atmosfera se desvaneció cuando el siguiente día llegó y el sótano parecía menos incomodo, al igual que el ático. Tanto fue el contento que Wonwoo aceptó sin rechistar las peticiones de Woozi para volver. De la noche a la mañana fue un cambio magnificente. Un largo momento en el que Wonwoo por fin pudo recostarse sin tener pesadillas, en los que Woozi recuperó por completo su celular y Dk dejó de gritar por cualquier cosa.

El pequeño gran defecto ocurría con Dino, quien ahora lloraba todas las noches sin falta, se negaba a caminar o a dormir. Seungkwan también estaba siendo un problema, hablando de como extrañaba a Bononie o a Hannie. Las cosas empeoraron un poco más cuando jóvenes de entre doce y diecisiete años comenzaron a aparecerse en su jardín, con sus celulares en mano y quedándose en silencio, ni siquiera tomando fotos o haciendo escándalos.

Otra nueva noticia era el nuevo huésped; Hoshi, que si bien no alegraba del todo a Wonwoo era una de las peticiones de Woozi para regresar con su Kwannie. Y con el voto de Dk a favor y el de Wonwoo en contra solo quedó Jun, que se dejó sobornar por Seokmin, quien le prometió intentar llevarse mejor con Minghao. Dos votos en a favor terminó en mayoría. Asi que Hoshi y Woozi terminaron durmiendo en la misma habitación, con una puerta rota que Wonwoo se negó a arreglar, y eso no estuvo a votación.

Con el tiempo las cosas fueron mejorando, sin que se dieran cuenta pasaron ¿Cuánto? ¿Cinco meses? Celebraron un par de cumpleaños en paz, un par de festividades, se divirtieron, vivieron en paz.

El pequeño Seungkwan dejó de preguntar por Bononie aceptando que ya no volvería, también Dino dejó de llorar y empezó a caminar de nuevo, incluso a correr por toda la casa como un buen niño. No hubo más recuerdos del lugar, no más lamentos ni penas, ni miedo, todo era normal y feliz, por fin habían liberado la casa de todo lo malo que una vez se encontró, ellos fueron la familia indicada y perfecta, aun con sus errores, seguían siendo unidos y felices...

—¿Fin?— Preguntó Seungkwan, con sus brazos alrededor de la almohada.

Una sonrisa apareció en aquel rostro que acababa de conocer esa misma noche, el que le ofreció contarle una buena historia para que pudiera dormir. Una buen historia de ellos mismos y de lo que pasaría.

—¿quieres que la historia termine?— Seungkwan asintió lento. Una risa, delgada y tranquila lo hizo detenerse. —Pero aún no he llegado a mi parte favorita...

—Tengo que dormir ahora, Wonwoo se va a molestar...— Seungkwan tartamudeó en la mayor parte de la frase. Se escondió entre las sabanas, dejando sus ojos afuera, observando directo a quien acariciaba su cabello con cariño.

—¿quieres que me apresure con el final?

—Me gusta el final de ahora...

—Pero ese no es...

—Por favor— Se apuró a decir Seungkwan. —Mañana tengo clases...

La persona sonrió dejando un beso en la frente de Seungkwan, levantándose en silencio y caminando hasta la puerta, pasos tranquilos y firmes. El chirrido se escuchó, el niño sin apartar su atenta mirada.

—Mentí.— Seungkwan alzó la mirada. —No son la familia perfecta, las cosas malas siguen debajo de ellos, escondidas... y eso es lo que los hace vulnerable ¿no?

—Quiero ver a Bononie...— Murmuró cuando los ojos de la persona se toparon con los suyos, con la poca luz del pasillo entrando a la habitación. —Y a Hannie... Quiero verlos.

—Lo lamento, lindo, pero un monstruo los tomó y los encerró, alguien nefasto que te lastimaría sin dudarlo... ¿sabes como se llama ese monstruo? — Kwannie niega. —Lo vas a recordar ya que todo se está disipando, pronto podrá ser libre, pronto podría lastimarlos... él es...

Choi Seungcheol

...

umm... vayan dejando el agua bendita en su lugar, desde ahora les aviso que eso no les va a servir en esta historia~ 

 vayan dejando el agua bendita en su lugar, desde ahora les aviso que eso no les va a servir en esta historia~ 

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Un Joshua terriblemente guapo. ¿saben que me encanta leer? cuando se sorprenden de que él sea asi en la historia :') me fascina <3 

Ellos [Seventeen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora