I AM A BOY

¿Qué es de mi vida? II

Me gustaría decir que todo se ha arreglado, que todo está bien. Que sigo siendo el chico estúpido que pasaba horas hablando con Kami, que mi relación con Owlie es igual, que puedo llamar a Kiy todos los días y que soy feliz con mi vida.

Nada es lo mismo que antes.

Este año ha sido una mentira, un año en el que he desperdiciado todo. El dolor de haber perdido quien creí la persona que me protegía de mí mismo y me enseñaba a quererme me cegó.

Ese dolor me cegó y en vez de tratar de superarlo y resolver todos mis problemas lo ignoré, me escondí en mi mismo y busqué actividades que me distrajeran de todo. Me comencé a vestir como mis padres querían, comencé a perder mi tiempo en maquillaje y cosas que no son yo. Y cada vez que un pensamiento acerca del asco que me daba, de lo horrible que me sentía con mi cuerpo se iba a la mierda y escondía.

Mi día a día se basó en dibujar, ignorar a la gente que me cuidaba y cagarla. Alejarme de mis metas, conseguir que cada día fuera más y más complicado llegar a vivir como Luca.

Y ahora me doy cuenta, un año y casi y un mes después de que nada de eso me puede hacer feliz. Qué solo he estropeado todo más. Y lo peor es que ni siquiera he conseguido arreglarme por dentro, no he logrado recuperarme de todos esos problemas ni todo eso que me daña.

No es novedad que no duerma, cada día es más complicado mantenerme en pie y cada vez recurro más a la medicina para conseguirlo. Mis sonrisas escuecen por dentro y saber que vivo en el centro de una mentira simplemente me duele.

Me duele porque sé quién soy, sé que quiero ser, sé quiénes son las personas que importan (o al menos eso creía) y odio vivir así. Porque por mucho que yo sea la misma persona la percepción de los demás varía.

Así que sí, he venido aquí a contaros que estoy más destrozado que nunca, que he perdido el rumbo por tanto tiempo que me siento perdido. Qué he vuelto al principio o incluso más atrás y que me odio por ello.

Pero al menos sé que seguís estando ahí. Kami está siendo la persona que mejor me comprende y más me apoya. Kiy es mi niño precioso, está pasando por algo similar a mi situación y lleva a mi lado durante tres años en los que ha sido el sinónimo de mi felicidad. Y joder sé que soy un imbécil pero siempre querré a todo el mundo que me apoya y está a mi lado, aunque a veces me comporte como un idiota.

Os quiere,
Luca.

P.D. he empezado la universidad y me he roto el tobillo pero os quiero (NO SAQUÉIS CONCLUSIONES, AUN NO ME HE TIRADO POR UN PUENE aunque tampoco faltaría mucho)