Caught in a Lie [Jimin X TU +18]

DIECISÉIS

Kang.

¿& Ahora qué haría? Busan, estaba en Busan & ella era de Daegu. Estaba sola, por calles que no conocía.

& Aunque su único Salvador en este momento podría ser Park Jimin, ella prefería morirse congelada en la calle antes de regresar con él.

Sí, eso se intentaba plasmar en la cabeza. Es malo, no te quiere, te utilizó, te mintió. Se repetía una & otra vez en su cabeza para intentar esconder el hecho de que todo lo que había pasado le estaba doliendo en lo más profundo.

– Fui la mayor estúpida. - golpeó tres veces sin fuerza la parte trasera de su cabeza contra el  muro de la tienda de flores en donde se encontraban.

Afuera de esa floristería, cruzada de brazos cubriéndose del frío, se repetía en su cabeza que había sido una estúpida.

Pero no sabía porqué, ¿En qué había sido una estúpida?, ¿Por creer sus mentiras?, ¿O por largarse de ahí sin dejar que él se explicara?

Como sea, ya era tarde.

– ¿Estás bien, jovencita? - giró en el momento en que escuchó una delicada voz a su lado - ¿Te perdiste?

Una señora que ya las canas cubrían su cabeza, estaba saliendo de la floristería, de hecho, la estaba cerrando.

_____ la miró por un segundo, torció una sonrisa & al final asintió levemente con la cabeza.

– Oh, ¿Tus padres dónde están?, ¿Te escapaste de casa?

Algo así.

Negó. - Quería visitar Busan, pero perdí el tren de regreso a mi casa, & hace un par de horas unos tipos me robaron mis cosas.

Tal vez pasar mucho tiempo con Jimin le había dejado grandes lecciones.

– Pobre pequeña - la mujer se compadeció de ella - Adentro hay un teléfono, si quieres puedes hacer una llamada.

Más que suficiente, tal vez.

– Gracias. - hizo una reverencia.

Ahora, ¿A quién llamar?

Fue muy triste volver a tener sus recuerdos, pues era como sufrir dos veces todo su pasado. Ni su madre, ni su padre podrían ayudarla ahora.

– ¿DokHae? - el único número que recordaba, la única persona que podía llamar. No era de confianza, no era un ser querido. Era un simple bastardo al que tenía que tenía que utilizar para llegar a Daegu nuevamente.

– ¿____? - se hizo un pequeño silencio - Miren nada más, la pequeña zorra me llama de nuevo, ¿Ya te aburriste de estar en un cabaret?

– DokHae, te necesito.

– Pues te jodes, maldita puta.

– No me hagas esto... - tienes que hacerlo. - Yo te amo. Por favor, fue un error dejarte. Solo quería salir de mi rutina & conocer un nuevo lugar, pero todo me salió mal, estoy perdida, sin dinero sin mis cosas. Me equivoqué - tenía que rogar para conseguirlo - Yo quiero estar contigo, llévame contigo. - pero sobre todo tenía que mentir.

– ______, ¿Es enserio lo que me dices?

– Claro que sí, DokHae. No me importa los tropiezos que hayamos tenido, yo quiero estar a tu lado.

– Mi querida _____, no sabes cuánto he esperado para tu regreso. ¿Dónde estás? Mi princesa no puede estar en la calle sola. Iré por ti.

– Eres genial, DokHae.