Mascotas【KacchanxDekuxTodoroki】

Capítulo uno.

Midoriya suspiró. La última clase siempre se sentía más lenta que las anteriores, sumando que, era la clase de deportes y él era pésimo para ellos. Aizawa-sensei les había obligado a dar treinta vueltas a toda la escuela, las cuales el grupo entero sólo hicieron quince debido a las gotas de agua que comenzaban a caer sobre ellos.

— ¿Pasa algo malo Kirishima-kun? —Deku había notado que desde que comenzó a llover, el pelirrojo llevaba prisa, este negó con su cabeza.

—Realmente no se podría decir que fuese malo del todo, simplemente Denki se enojó conmigo por una tontería y salió de casa...

Era sabido que Kirishima tenía de mascota un híbrido, porque éste suele frecuentar Yuuei a la hora de salida para acompañar a su amo a casa. Por lo que les había dicho el híbrido, Eijirou lo había salvado de su anterior amo mientras lo golpeaba. Denki al sentirse amenazado usaba su quirk involuntariamente, lo malo fue que ambos estaban mojados por la lluvia.

El problema era que el agua junto su quirk de electricidad lograba lastimarlo. Kirishima golpeó al sujeto y ayudó al rubio —no sin antes Kaminari lo haya electrocutado unas cuatro veces—. Aunque el pelirrojo no quería un híbrido como mascota, Denki no se separaba de él, debido a que nunca tuvo alguien que lo protegiera, cuidara y mimara. Así fue como Kaminari se autoproclamó compañero y mascota de Eijirou.

—A pesar de haberse escapado no pareces preocupado —Uraraka intervino en la conversación mientras llegaba con el presidente de la clase.

—No me preocupa eso, siempre regresa cuando tiene hambre y nos arreglamos. El problema es que cerré la casa con llave —los cuatro se dirigieron enfrente de la salida con paraguas en mano—. Su quirk es de electricidad y eso no es de mucha ayuda —dijo mientras alzaba su mano rascándose la nuca con nerviosismo—. Cuando regrese me dará descargas eléctricas hasta que se compadezca de mí, hasta que me perdone... o muera, lo que pase primero... bueno, nos vemos.

El chico salió corriendo con paraguas en mano directo a su hogar, mientras que los otros caminaban con tranquilamente.

—Deku ¿quieres ir al centro conmigo y Iida-kun? Deberíamos de aprovechar el hecho de salir temprano de la escuela.

El peliverde lo pensó un momento. No sería tan mala idea, sí no fuera porque conocía los sentimientos del de lentes hacía su amiga castaña, sin embargo, la chica parecía no notarlos.

—No gracias, mi madre dijo que iba a visitarme a casa, iré a limpiarla antes de que llegue. Adiós y cuídense chicos —los otros dos se despidieron de igual manera.

Los tres eran buenos amigos, siempre estaban juntos desde que entraron a Yuuei. Por esa misma razón mintió sobre lo de su madre, era tiempo de que ellos dos tuvieran más tiempo a solas, quizá algo bueno terminaba de eso.

Mientras más caminaba la lluvia parecía incrementar, igual eso no impedía su tranquila y lenta caminata, las calles estaban semi vacías, las personas corrían en busca de un refugio por la falta de protección de la lluvia.

Escuchó un estruendo y dos gruñidos diferentes, provenían de un callejón pequeño y cerrado. Dudó en entrar allí, pero al ver una caja grande moviéndose en tenue oscuridad, se acercó a paso lento a averiguar que sucedía. Temeroso cerró los ojos y alzó la gran caja esperando alguna especie de ataque hacía su persona. Al no pasar nada, decidió abrir los ojos, todo estaba tranquilo, hasta que escuchó de nuevo los gruñidos. Bajó la mirada en busca de los causantes de los sonidos.

Suspiró aliviado al sólo ver un gato y un perro en posición de ataque, ambos jóvenes, sin llegar a ser cachorros y aparentemente callejeros. Comenzaron a pelear, en ese momento fue cuando Izuku se preocupó por ambos animales; se estaban mojando, por lo que supuso que quizá ambos se estaban protegiendo de la lluvia en la caja y no estaban de acuerdo en compartir su refugio.