Capítulo 6: Desaparecida

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"Aunque yo muera, viviré en tú corazón, me volverás a encontrar en otra vida y en tiempos de paz estaremos juntos por la eternidad. Lo prometo."

¿Y por qué carajos se le ocurrió decir algo cómo eso? No podía decir algo más "común"? Tal vez decir que eran familia o simplemente decir que eran amigos de la infancia, eso sonaba mejor que decir novio o cariño.
Sin embargo ya no había vuelta atrás ya lo había dicho y de la forma más ridícula ¿ahora que haría? Fingir ser el novio perfecto para una chiquilla? Cómo de qué no? Él era perfecto, hasta su nombre lo dice! Pero no consideraba ser pareja de alguien, no ahora y mucho menos con Kagome; era tan parecida a ella.

Y por otro lado, él no sabía de la crisis en la que se encontraba la joven. Él no sabía que el corazón de aquella dama confundida estaba totalmente roto. ¿Qué pasaría? Más bien ¿cómo se sentiría Kagome?

- ¿Mí novio? Pero...¿Cómo? Yo... hace poco que termine con mi novio. No puede ser posible que tenga tan rápido a otro.

¡Maravilloso! ¡perfecto! ¡lo mejor que le podía haber pasado! ¿debería de seguir mintiendo o ahora si seguir con lo de ser amigos?
En ese preciso momento se le iluminó la cabeza.

- Claro que no lo somos, ¿es qué no me recuerdas? Éramos amigos de infancia y jugábamos a ser novios.

- ¡Oh!

Según para Kagome, ya entendía con claridad el comportamiento del joven, esa forma de actuar tan dramática no quedaba con su porte, con su tan atractivo físico...viéndolo bien; ante sus ojos estaba el chico más guapo que haya visto en su vida, en su corta vida para ser exactos, cabellera negra o casi azabache como los de ella, piel blanca, ojos amielados casi amarillos como el oro o una puesta del sol. De lo demás ni se diga, ¡que hombre! ¿de verdad él le estaba hablando? ¿de verdad eran amigos desde hace tiempo? No estaba del todo segura pero, ¿y si ese enigmático hombre la estaba confundiendo? No pudo evitar sentir tristeza.

- ¿Y usted no me está confundiendo con alguien más?

- ¿Confundirte? ¡de ninguna manera, señorita! ¿Qué te hace pensar que lo hago?

El joven se acercó atrevidamemte a ella, casi encima de ella, Kagome no pudo evitar sonrojarse y mucho menos evitar dar un suspiro enfrente de la cara del pelinegro, él la agarró de los brazos y la arrincono al árbol más cercano.

- ¿A caso creés que confundiria esos bellos ojos café chocolate, con los de otra persona? Porque cada que veía a otra persona, no veía el mismo brillo y color que tu tienes.

Para Kagome, estas palabras la hicieron sentir halagada, la hicieron sentir bien y no pudo evitar que los latidos de su corazón se aceleraran de una manera brusca, por un momento pensó que si él chico no fuera humano los escucharía a la perfección. Lástima para Kagome y sus errores, puesto que el joven pelinegro era un demonio disfrazado de humano. Y así es, él escuchaba sus latidos perfectamente; provocando una sonrisa interna y que este se acercara más atrevidamemte a ella, acortando aún más la distancia puesto que se tenían de frente ahora estaba más cerca que nunca, tan cerca que llegó hasta su oído.

- Si me equivocara de persona, no estaría tan cerca como lo estoy ahora. ¿Es qué a caso creés qué alguien cómo yo seduciria a cualquiera? Claro que no.

¿SEDUCIR? A caso lo dijo? Así es, y vaya que lo hacía como profesional, él estaba demasiado pegado a ella y ella estaba a gusto. Para Kagome el primer comentario la hizo sentir más que halagada por su puesto, un comentario tan lindo sobre sus ojos la hacia sentir especial. Pero aquello de "seducir" la desconcerto en su totalidad ¿Quién era aquel sujeto? No tenía ni la más mínima idea pero lo investigaria, si tanto era un amigo de la infancia ¿por qué rayos no lo recordaba? Claro, su segundo nombre era olvidadiza y algo más ¿por qué carajos se comportaba así? Bueno, no es que le molestara en su totalidad y tampoco es que esperara la personalidad de un niño, pero tampoco la de un "seductor" ¿es qué acaso era un stripper o algo parecido? Y lo peor es que al desgraciado lo hacía muy bien!

Mi novio es un demonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora