INTIMUS HOME

1.9K 68 10
                                    

Capítulo XIII



INICIO MÁS ÍNTIMO



- No entiendo tu pregunta - le dije.

- Potter - respondió - ¿Él te vio con esta laceria? - gruño su pregunta.

- No, no lo hizo - respondí porque era verdad, Potter y yo solo fuimos novios de manita sudada diría mi tío Aberforth.

- Buena niña - me felicito él, que seguía jugando con mis pechos, comencé a quitarme la camisa de mis hombros quedando solo con el sostén en la parte superior de mi cuerpo.

Draco dirigió sus manos detrás de mi espalda desabrochando el sostén que traía puesto, sus ojos no abandonaron mi mirada, estaba puesta en mí, buscando algún destello de negativa, pero no lo quería, no quería que él parara. Tan pronto como quedaron libres él bajo la mirada a ellos, permitiéndose deleitar con la vista, sus manos viajaron al frente para poder acariciarlos.

Su boca rápidamente fue en dirección a mi seno izquierdo, el cual había sido levantado un poco por su mano derecha que reposaba debajo de mi seno, dándole así más acceso para que comenzara a succionarlo, mis gemidos no se dejaron esperar, comenzaron a producirse al compás de las sensaciones que se producían en mí, nunca pensé que esa zona fuera tan placentera, pues algunas veces yo había tocado mis pechos y la sensación no se compara, creo que tiene que ver mucho quien es el que acaricia.

En este mismo instante ponerme a pensar los pros y contras de las acciones o actos que estas a punto de hacer, es simplemente un conflicto que cree en mi mente, por lo general diría que quien gano esto fue la "razón", pero eso es estar sumida en un completo error, las sensaciones que experimentas sobre pasan la razón. Me siento como una presa, a la cual su depredador está en su asecho, sus simples beso me volvían loca, siendo esta mi primera experiencia, en este acto que me mantenía en dudas, Draco, con una simple mirada empezó a disiparlas.

Sus labios, dios no podía ponerle un punto de comparación, puesto que yo en este acto era inexperta, solo me podía detener a disfrutar, aunque los nervios por saber, lo que sería me carcomían entera, no quería que Draco se burlase e mi por no saber cómo proseguir eso sería una completa humillación. Sus labios bajaron a mi cuello, devorándolo a su paso, pensé que Draco quería que esto fuere un acto un poco más fiero, peor por lo que me ha demostrado es lo contrario.

Su mirada volvió a encontrarse con la mía, sus pupilas se encontraban dilatadas, era sexy, aunque un poco cómico, podría apostar a que esto último me lo parecía porque estaba bastante nerviosa, aunque sé que Draco no me obligaba a nada. Con sus manos en mis caderas, las subió para contornear mi rostro, donde unió s mirada a la mía, tratando de controlar su respiración que se encontraba agitada.

- Cariño, sabes que no te tienes que sentir obligada a nada, ¿verdad? - me dijo él calmándome un poco los nervios.

- Draco, sabes, que soy inexperta, solo quiero que no me dejes por esta situación - fue lo único que pude responder al dejar que mis pensamientos circularán por si solos externándolos.

Terminado de decir lo anterior, solo volteo a verme, su mirada era más intensa, me sonrió y ataco mis labios, yo trate de seguirle el beso, pero no lo conseguí, así que solo me dedique a dejarlo hacer lo que quisiere.

Me tomo de las caderas, me empotro en la pared, después de haber pasado por la puerta, sus labios nunca abandonaron los míos, nos dirigimos a mi cama aun conmigo aferrada a su cadera, sin siquiera dejar sus labios. Cuando nos logramos recostar en la cama, Draco se puso sobre de mí, sus labios bajaron a mi cuello, sus manos delineaban mi cintura, dejaba pequeñas caricias por dentro de mi camisa, sus manos adentradas por dentro de mi camisa tomaron mis pechos.

¿CUMPLIREMOS LA PROFESIA? - DRACO MALFOYWhere stories live. Discover now