Entre Sábanas de Seda (AQS #1)

45|| ¿Afortunado?

—¿Estás lista para irnos?—susurro en su mejilla.

—¿Ir dónde? Ésta es nuestra casa—me recuerda.

—Entonces, ¿Estás lista para correrlos a todos a la mierda así pueda disfrutar de mi esposa?—se ríe—O podríamos subir a la habitación y coger sin más.

—Quiero disfrutar más de la fiesta si no te importa—se voltea para mirarme a los ojos. Está tan feliz que podría casarme con ella todos los días para ver esa sonrisa en sus labios—A fin de cuentas, tenemos el resto de la vida para pasarlo juntos ¿No es así?

Le tomo el rostro con ambas manos y me acerco a besarla. Si bien la he besado muchas veces, siento que algo ha cambiado hoy, como si estuviera experimentando nuestros primeros besos de nuevo.

—Toda la vida—susurro.

Pegado a su cuerpo y abrazándolas a ambas, le quito la bebé dejándola en mi pecho para bailar un poco con ella mientras a nuestro alrededor brillan los flashes de las cámaras. Creo que le arruinamos la presentación del primer baile a Kate pues me mira con cara de pocos amigos con el micrófono en la mano.

—Como les gusta arruinar las sorpresas, les presento el primer baile de los señores McMurray—comenta sin gracia haciéndome reír.

Si bien le quitamos el primer baile, apenas terminamos nos hace tomar asiento a todos en nuestros lugares mientras ella está con el micrófono en mano.

—Bueno, se supone que el brindis iba primero pero ellos hacen todo al revés, ya está claro—los invitados se ríen—Y al ser su madrina de honor debo decir unas palabras. Podría hacer un discurso largísimo acerca de todo lo que Lia significa para mí pero lo resumo en que eres mi hermana y quiero verte feliz. Sé que Hudson se encargará de eso porque sabe que me gusta comprar juegos de cuchillos a diario y tengo algunos que no le presenté. Te mereces el mundo, hermana, incluso eso queda chico. Que siempre seas feliz junto al hombre que amas. Por un largo y sano matrimonio donde reine la felicidad, el amor y sobre todo la fidelidad.

Si bien su discurso no tiene nada de malo no puedo evitar mirar a Brennan quien mantiene las manos apretadas en su regazo mientras su esposa aplaude enérgicamente a la amante de su esposo. Qué loco.

Mi amigo también sube a dar su discurso y no lanza ninguna indirecta a la mujer que ama y se acurruca ahora en los brazos de otro. Entonces me toca a mí así que subo con mi hija en brazos.

—Decir que fue amor a primera vista sería una mentira, decir que te merezco una incluso más grande pero no hay mentira alguna cuando digo lo mucho que te amo—digo mirando solamente a mi esposa quien me mira con las lágrimas brillando en sus ojos—Soy afortunado de tenerte, de ser amado por alguien tan maravilloso como tú y de que me hayas escogido como el padre de tu hija y el hombre que pasará la vida acompañándote. Sé que no fue fácil para ti, pero prometo ser siempre el hombre que te mereces, mi reina. —alzo mi copa hacia ella—Por el ayer, por el hoy por el mañana que promete demasiado teniéndote a mi lado. Te amo, Lia.

Las copas resuenan al brindar y es ella quien me espera a mitad de camino besándome frente a todos. Le sonrío cuando se limpia las lágrimas, últimamente ha estado demasiado sensible pero se ve tan linda de igual manera.

—Quiero que estemos solos—le digo tratando de ignorar la punzada que siente mi polla cada que recuerda que es mi esposa ahora.

—Calma, esto terminará pronto—dice riéndose.

Su atención se centra en sus amigas que pronto llegan a alejarla de mí de nuevo. Ruedo los ojos, estoy a punto de sentarme cuando siento el olor del pañal de Hope así que me muevo hacia la casa.