"Rosa" - [Mikayuu] #AwardsNoSeraph

"Ala oeste"

Capitulo 10

Sentía que una voz le llamaba, una voz que provenía de la fosa de la bestia.

Yuchiro se despertó repentinamente.

-Demonios! Por fin me habia quedado dormido- exclamó Yuu en voz alta.

-Silencio!- se escuchó una gruesa voz proveniente del exterior.

Kimizuki dormía fuera de su puerta. Mikaela lo había enviado ahí para que vigilara al azabache.

Pero Kimizuki, era Kimizuki. Se limitó a bloquear la puerta con su cuerpo y echarse a dormir.

Yuichiro intentó abrir la puerta, pero  algo muy pesado no se lo permitía.
Para cuando lo logró, se encontró con un lobo recostado en el suelo.

-Qué haces fuera de tu habitación?- contestó el lobo, sin hacer el mínimo esfuerzo en ponerse de pie.

-Tú debes ser Kimizuki- Yuu lo miró con asombro. Todavía no se acostumbraba a la dinámica de animales parlantes.

-Y tú tienes la costumbre de ignorar preguntas cierto?

-Lo siento, mi nombre es Yuu- respondió el azabache con una sonrisa.

-Lo sé- exclamó Kimizuki de mala gana.

Cuando el pelirosa estaba por repetir su pregunta. Sintió una mano en su cabeza que lo hizo saltar de sorpresa.

-Qué mierda!? No soy un perro!- le gritó el lobo enojado. Debido al movimiento brusco sus lentes se cayeron.

-Lo siento, eres adorable- mencionó Yuichiro mientras reía.

Kimizuki se sentía humillado, le mostró sus filosos colmillos a Yuu mientras se acercaba con intenciones de atacar.

-Oye tranquilo amigo, quieres croquetas?- dijo el azabache con burla.
Sin duda una de sus cualidades era sacar de quicio a la gente. Y Kimizuki era el candidato perfecto para hacerlo.

Cuando el pelirosa se lanzó hacia su dirección, Yuu cerró la puerta. Dando como resultado que el lobo se golpeara en la nariz.

Yuichiro escuchó un gruñido al otro lado de la puerta.

-YA VERÁS CUANDO SALGAS!- gritó Kimizuki.

-Hermano?- una suave voz irrumpió en el ambiente.
Parecía ser una niña.

-Vuelve a domir, Mirai.

-No volveré hasta que mi hermano venga!- Mirai habló con pucheros. Al parecer era una niña pequeña.

-Ya voy, ya voy- respondió Kimizuki adaptando un tono amable. Y dirigiéndose hacia el cachorrito.

Cuando Yuu se aseguró de que el pasillo estaba vacío. Se decidió a salir.

-Explorare un poco, sirve que así tendré una idea de como escapar- pensó Yuichiro.

El azabache salió de la habitación con sigilo. Miraba a sus alrededores con paranoia, no queria que un león se apareciera o algo asi.
O peor aún, ¡Un fantasma! Después de todo Yuu creía en cosas sobrenaturales.