Memorias De Idhún. Erik y Eva

Profecía

Después de un rato, cuando ya todos los invitados se fueron la Triada subió a hablar aparte mientras que los jóvenes se quedaron en la sala hablando, después de un rato, Eddy tomó confianza y volvió a ser el chico de antes, incluso logró hablar con Eva tranquilamente, lo cual alegró mucho a su padre que los observaba en silencio desde las escaleras, después de un rato de escucharlos volvió con su mujer y con Christian, ambos hablaban en la habitación de ella, al verlo entrar se detuvieron.

—¿Está todo bien?—preguntó Victoria al verlo entrar tan preocupado.

El hombre asintió en silencio.

—No podemos dejarlos aquí.

—Creí que habíamos llegado a un acuerdo—comentó el shek mirándolo.

Jack le devolvió la mirada sin vacilar.

—Lo sé, pero ya cometimos ese error una vez ¿o acaso ya lo olvidaste?—le espetó Jack con una mirada penetrante—¿olvidas cuando Lunnaris perdió su cuerno por nuestra terquedad de querer protegerla?

—Recuérdame de quien fue la idea—siseó Christian entrecerrando los ojos.

Jack iba a replicar, pero Victoria se apresuró a intervenir.

—¡Ya basta!

Ambos se dirigieron una mirada asesina, pero ninguno añadió más.

—¿A dónde quieres llegar Jack?

—Cuando nos enfrentamos a Ashral en el plenilunio, quisimos ir sin tí y terminó siendo un gran error, hubiéramos muerto esa noche de no ser por tí y aunque sé que es muy arriesgado la profecía no habla sólo de nosotros, también habla de los niños y no podremos cumplirla si los dejamos atrás.

—¿Quieres arriesgar la vida de tus hijos por la profecía? —preguntó Christian con una mirada escalofriante.

Jack abrió la boca para decir algo, pero se lo pensó mejor y la volvió a cerrar.

—Es lo mejor.

Ambos hombres se volvieron hacia ella sorprendidos.

—Había sido tu idea dejarlos aquí—observó Christian en voz baja.

—Ya lo sé, pero Jack tiene razón, cuando ustedes me dejaron aquí yo no pude sentirme de otra forma que no fuera traicionada, en este momento no tenemos toda su confianza y menos la de Erik, si los dejamos aquí sólo empeoraremos las cosas, de todos formas ellos terminarán arriesgando sus vidas.

Christian no parecía estar de acuerdo, pero no dijo nada.

—Deben ser ellos quienes lo decidan—terminó diciendo el shek.

Ambos asistieron, Christian tenía razón, era una decisión que no les correspondía a ellos tomar, está vez era decisión de sus hijos.

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Amelia hablaba con Eddy mientras que Eva hablaba con su hermano por medio de la mente para evitar que los escucharan.

"¿Si sabes que aquí algo anda mal? ¿verdad?"

"Lo sé, pero aún no sé que es."

"Te entiendo y me encantaría que Eddy nos dijera, pero luce mucho más tranquilo y no quiero volver a preocuparlo."

Eva iba a añadir algo más cuando aparecieron sus padres haciéndolos callar, al ver la expresión de sus rostros Amelia supo que tenían que decirles algo importante así que se apresuró a levantarse y antes de que alguien pudiera evitarlo se fue, Erik quiso detenerla, pero Eva negó con la cabeza.