"Familias Enemigas" "Temporada 2" "Damon S., Lucien C. y Tu"

<<Chapter VI>>

    A pesar de rogarle, Marcel no acepto decirme ni una palabra de lo que pasaba hasta que le contara mi historia y tomara un poco de Bourbon con él, y después de estar no sé cuanto tiempo en un ataúd con una daga que lentamente me desecaba, decidí tomar un rato antes de tener que volver a mi sueño que parecía ser eterno.

    Le conté toda mi hitoria a Marcel, desde practicamente mi nacimiento, diciéndole que mi madre me odiaba y era la melliza de Klaus, hasta ahora, y porque tenía que estar en ese ataúd, tuve que luchar contra él rogando porque no matara en ese mismo instante a Lucien, y es que nadie entendía el porqué lo amaba.

    ----Ahora, ¿ya me dirás por qué tú tenías mi ataúd? ----al preguntar eso pude ver que su expresión cambió intantaneamente---- ¿Es muy malo?

    ----Después de que tus hermanos me mataran, y creer que te habían encerrado en un ataúd porque querían, me moleste y yo... los puse en una línea directo hacia la muerte ----mi corazón se paralizó y un gran temor creció en mi interior. ¿Perder a mis hermanos? Aún no estaba preparada para eso, a pesarde que estaba molesta con ellos, no podía simplemente dejarlos morir.

    ----Debo salvarlos, Marcel por favor.

    ----Estoy seguro de que solamente es cuestión de tiempo para que encuentren una solución, conoces a tus hermanos mejor que nadie, sabes que jamás se dejarían matar, y aún menos cuando saben que tienen que encontrar la cura para que no mueras, y en ese caso, tú debes volver ya ----señaló el ataúd.

    ----El problema realmente es que no quiero volver, no tienes idea del dolor que se siente, ni siquiera mis hermanos lo saben, porque la daga que es para mí, es especial, y es lo más doloroso que sentirás, y quiero pasar un tiempo, antes de volver a mi terrible sueño, eso es todo lo que pido ----lo ví a los ojos.

    ----Estoy seguro de que para que tus hermanos puedan sobrevivir a esto, tú deberás estar en ese ataúd, y solo por tí, prometo que no los mataré, a pesar de que puedo hacerlo ----sonreí y lo abracé.

    ----Gracias Marcel, ahora estoy lista, quiero que tú entierres la daga en mi corazón ----me separé y le extendí la daga.

    ----Yo no podré hacer eso ----reí ligeramente.

    ----¿En serio? ¿Aún sabiendo qué si no lo haces moriré? ----desvió la mirada pero después de unos segundos volvió a verme a los ojos.

    ----Debería odiarte por esto ----tomó la daga.

    ----Una cosa más ----hizo una seña indícandome que siguiera----: prométeme que no matarás a Lucien, y no le harás daño ----iba a desviar la vista pero antes de que lo hiciera hablé----, yo amo a Lucien de la misma manera en que tú amas a Rebekah ----pareció confundido cuando dije eso.

    ----¿Cómo sabes que yo amo a Rebekah? ----me encogí de hombros.

    ----Solamente lo sé, ahora, por favor Marcel, prómetelo ----asintió.

    ----Está bien, lo prometo ----suspiré.

    ----Gracias, ahora sí, por favor entiérrame la daga ahora, antes de que empiece a tener alucinaciones y terminé huyendo ----se acercó, y después enterró la daga.

    ----Prometo encontrar como salvarte ----después de esas palabras, solamente ví oscuridad.

   
     Decidí ir esta vez a Mystic Falls. Ví a Damon, Elena y Stefan, los tres en la casa Salvatore, después llegaron Bonnie y Caroline. Damon lucía tan felíz a lado de Elena. Seguramente así era siempre antes de que yo apareciera en sus vidas. Giré viendo a todos y ví que Bonnie me veía fijamente. Dió una excusa para irse y al pasar por mi lado murmuró un "sígueme". Salí de la casa y la seguí hasta el bosque en donde se dió media vuelta y me vió.

    ----¿Moriste? ----me sorprendí al ver que me hablaba.

    ----Bonnie, ¿tú puedes verme? ----sonrió.

    ----No, solamente contesto a las preguntas que me hace el aire ----reí y me acerqué para abrazarla, pero simplemente no podía sentirla.

    ----Yo... no, no estoy muerta, solamente con una daga en mi pecho que me impide morir por una terrible mordida de hombre lobo ----me vió mal.

    ----Me salvaste de convertirme en vampiro, ¿y no se te ocurrió pedirme ayuda sobre esto? ----me encogí de hombros.

    ----Esto es Mystic Falls, siempre tienen problemas y no quería darte más de los que ya tenías, eso es todo ----sentí un gran dolor en mi pecho y caí de rodillas.

    ----¿Qué te pasa? ----Bonnie se incó frente a mí, preocupada.

    ----Es un hechizo, me están llevando a una clase de mundo prisión, pero no es eso ----nuevamente la abracé----, adiós Bonnie ----murmuré al momento que una gran oscuridad me invadia.

    Me levanté con lentitud. Ví todo a mi al rededor. Una casa y un gran bosque. ¿En dónde estaba? Giré y pude ver a todos mis hermanos, menos Klaus. Marcel tenía razón, habían encontrado la manera de salvarse, pero para hacerlo alguien debía sacrificarse, y ese era Klaus. Simplemente me giré al verlos, sabía que Freya creeía que con este hechizo dejaba de sentir el dolor de la daga, pero en realidad no era así.

5 años después. New Orleans.

    Abrí mis ojos con lentitud. Quité la daga de mi pecho y la ví fijamente. La última daga había perdido su efecto. Cuando me levanté pude ver a Freya poniendo algo en las mordidas de Kol y Elijah, y otra cosa en la de Rebekah. Finalmente Freya se acercó a mí, en su mirada pude ver todo sin necesidad de que dijera nada: se había terminado la cura.

    No lo pensé dos veces y huí de aquel lugar. Iba a morir, ya no quedaban dagas y no existía una cura. No había salvación. El Otro Lado estaba destruido, y si moría, ya no habría vuelta atrás. Fui al bosque y me dejé caer de rodillas, ninguna lágrima salió de mí. ¿Qué pasaría con Damon? ¿Qué pasaría con Lucien? Tal vez finalmente lo matarían. Aún así ya no podía hacer nada. Sentí toda la fuerza irse de mí y sentí como me ahogaba lentamente. Después de eso, solamente hubo oscuridad y silencio...