unknown 彡 zach herron.

18. ¿Celosa?

Caminé hacia el largo campo de fútbol con un montón de determinación. Estaba decidida a lo que haría. Caminé por detrás de las gigantes gradas del lugar. Buscaba la silueta de Zach en alguna de ellas, pero no lograba encontrarla.

Unos leves acordes de una guitarra me sorprendieron por la espalda, giré mi cuerpo entero para encontrarme con el castaño en la última fila de aquellas gradas. Llevaba su guitarra con él y se veía concentrado. Corrí hacia el primer escondite que encontré, solo quería escucharlo un poco.

—I just need a little time.— El leve sonido grave de su voz hacía que me sintiera diez veces más atraída. Quería mucho más. Cerré lo ojos por impulso y escuché su voz, ni siquiera me tomé el tiempo de entender la letra, solo me dejaba llevar. —To prove to you that I'm—

—¡Zach!— Esperen, ¿qué?

—Hola, Chloe.— La morena lo abrazó y ambos sonrieron. No podía creer como en un instante arruinó la perfección del momento. Sin duda estaba furiosa.

No entendía como Chloe se tomaba la molestia de aparecer por los pasillos del colegio en cualquier descanso solo con tal de ver a Zach, la chica ni siquiera estudiaba ahí.

Alguien tocó mi hombro por detrás, solté un pequeño brinco y llevé mis manos a mi boca intentando no gritar, pues Zach y Chloe podrían verme escondida. —Qué tal.—

—Hola.— Respondí de mala gana y abrí los ojos tan grandes como pude al darme cuenta de quien había sido. —Buenos días, entrenador.—

—Alyssa, estos no son los vestidores, ahora deje el lugar, vaya por su uniforme y a la cancha.— Gritó haciendo que los otros dos voltearan y yo solo me escondía detrás del entrenador.

—¡Shhh!— Grité casi en un susurro y salí corriendo del lugar. Unos metros más lejos bufé y recordé como debía presentarme a la practicas de fútbol, lo había olvidado.

Caminé hasta los vestidores, tomé mi uniforme tan rápido como pude y me cambié. Salí al campo para entrenar junto a las demás chicas, aún podía ver a Zach y Chloe en las gradas, el chico estaba concentrado en su guitarra, parecía estar cantando. La chica solo lo veía completamente enamorada, agitaba sus pestañas y de vez en cuando soltaba un suspiro. Sin duda no podía quitarles la mirada de encima, una parte de mi sentía que era yo la que debía estar con Zach, una parte de mi sentía celos de Chloe. Solté un suspiro, otra parte de mi sabía que era imposible que yo estuviera con Zach.

Digo, Zach es mi amigo, definitivamente no quiero que lo lastimen y solo quiero lo mejor para él, eso debe ser.

Como era de esperarse, aquella distracción hacía que no me diera cuenta de lo que hacía en la práctica. Solo corría de un lado a otro. Mi cuerpo chocó contra otro haciendo que un gemido de dolor saliera por parte de ambas, caí al suelo de lado y comencé a dar vueltas. La otra chica ni siquiera había estado a punto de caer. Fui solo yo la que había hecho el ridículo.

—¡Alyssa Marie Williams!— El entrenador apareció frente a mi. Oh no. Zach me estaba mirando. Estoy en el suelo, llena de raspones y tierra. —No te he traído a este equipo para ser una desgracia, corre a limpiarte esas heridas antes de que empeoren y vuelve a la práctica. Te quiero prestando atención o quedas fuera del equipo.— Gritó. Esto no podía ser posible, no era capaz de hacerlo.

Me levanté del suelo mientras bufaba, los horrendos gritos del entrenador sin duda me hacían mil veces más furiosa. Zach con Chloe y el entrenador. Nada bien.

Salí del lugar tan rápido como pude, alguien llamaba mi nombre pero ya no me importaba. No tenía tiempo para nadie ahora.

Salí de los vestidores y caminé por los pasillos de la preparatoria. La enfermería del lugar no me serviría de nada, siempre preferí traer mis propios métodos para curarme, por si algo pasaba.