Frecuencia Mortal [Terminada]

Capítulo 2 « Fantasmas en el Hospital »

« La noche es perfecta para una nueva historia mis queridos oyentes. Les saluda Caronte desde los controles. ¿Quiénes serán los protagonistas de esta noche? »

Así daba inicio Caronte a su programa de media noche y lejos de ahí un grupo de estudiantes de enfermería y otros de laboratorio se encontraban reunidos en un viejo Hospital. Siendo las 11: 59 pm uno de los jóvenes llamado César se siente aburrido pues se encontraban ahí ya que estaban realizando su turno, pero a esa hora ya no había mucho movimiento en el área donde se encontraban.
Al paso de los minutos el reloj de la habitación donde se encontraban marco las 12:00 md y Karina una de las estudiantes de laboratorio sugirió que al menos podrían escuchar la Radio, pues en un escritorio de madera se encontraba una radio. Al escuchar esta petición Samuel otro de los jóvenes se negó pues alguien podría pensar que estaban perdiendo el tiempo, pero Elisabeth quien era la responsable del grupo, no encontró en ello ningún problema, así que César se acercó a la Radio que estaba desconectada y limpiando un poco el polvo, la encendió, al buscar una frecuencia sólo escuchaba estática, decepcionado le dio un golpe a la radio y se dispuso a apagarla, pero cuando estaba por tocar el botón de apagado, la radio sintonizó una emisora, el locutor dijo.

« Bienvenidos sean todos a este su programa de media noche, yo soy Caronte y estaré aquí hasta las 3:00 am. »

Al escuchar la voz del locutor y el horario del programa, Elisabeth se sorprendió, pues justo a esa hora terminaba el turno de su grupo.

« Ahora voy a abrir las líneas telefónicas para que mis queridos oyentes puedan contar ¿Cuál es su mayor temor? »

Caronte dio un número telefónico y Elisabeth hizo la llamada, motivada por sus colegas.

— Hola, ¿Con quien tengo el placer? — pregunto Caronte.

— Eh si Hola soy Elisabeth y bueno estamos haciendo turno en el hospital. — Dijo ella con algo de nerviosismo.

— ¿Y cuantos son allá?.

— Aquí somos, cuatro; César, Karina, Samuel y yo.

— ¿Y a que le temes, que cosa te podría matar de un susto?

Elisabeth lo pensó un momento y dijo.

— Fantasmas, creo que no podría sobrevivir en un lugar así.

— Oh bueno, entonces deja que te cuente una historia...

La llamada se cerró y Caronte seguía hablado.

« En un hospital, en un antiguo Hospital unos jóvenes esperen que su turno termine y sea tan normal como siempre, sólo que está vez tienen a un quinto invitado»

Los jóvenes al escuchar las palabras de Caronte se sentían intrigados por la manera como se narraba la historia, pero Caronte continuó.

« Todo parecía normal, nada les podía robar la paz, ni siquiera un relámpago en medio de la oscuridad»

Al decir eso, un relámpago se escuchó y los jóvenes sólo vieron la habitación muy iluminada, pero Karina observó una silueta masculina del otro lado de la puerta, en la pared del pasillo, al principio pensó que debía ser la sombra de alguno de sus compañeros, pero Caronte dijo.

« Vamos Karina no te guardes para ti sola la noticia, lo as visto»

Sus compañeros voltearon a ver a Karina, pero ella misma no sabía que ocurría y porque el señor de la Radio se dirigía a ella como si supiera que sucedía.

« Bueno lo dirás después. Ahora deben saber que no están sólos, y les recomiendo ser cautelosos en lo que digan y hagan, pero por ningún motivo salgan de la habitación...»