~El chico de la ventana~(Rubius&Tu)*TERMINADA*

Capítulo 3.

Capítulo 3.

Me quedé helada. No podía moverme y empecé a temblar. El timbre seguía sonando, no sabía si abrir o quedarme quieta, pero empecé a sollozar cuando escuché que Marco abría la puerta con las llaves. Hasta que finalmente, abrió la puerta y estaba ahí parado, mirándome de una manera extraña.

– ¿Qué pasa? –Dijo.

Me tranquilicé. Al parecer, Marco no estaba de mal humor, y solo esperaba a que no se enojase.

–N…nada –Respondí.

Marco cerró la puerta y se volvió hacia mí.

– ¿Y la cena? –Preguntó.

Sentí como mi corazón se aceleraba. Me quedé helada de nuevo y no sabía que decir.

–Te estoy hablando, dime, ¿dónde está la cena? –Repitió enojado.

Empecé a temblar y miré hacia el suelo. 

– ¡(tn)___! –Me gritó. –Mírame cuando te hablo. ¿Dónde está la cena?

–No la hice. –Respondí llorando.

– ¿Qué no qué? –Dijo muy enojado.

Tragué saliva y respondí.

–No… no hice la cena.

–Ven aquí.

Empecé a llorar.

–No… Marco yo…

– ¡Ven aquí! –Gritó.

Me acerqué llorando, y Marco puso su mano sobre mi nuca.

– ¿Qué te dije?

–Es que yo…

– ¡Qué te dije!

–Que tenga lista la cena para cuando vuelvas. –Respondí llorando.

–Lo dije o no lo dije. –Dijo apretando mi nuca.

–Si…

– ¡Lo dije o no lo dije! –Gritó. – ¿Por qué no me obedeces? ¿Por qué no lo hiciste?

–Porque estaba ocupada. Empacando. –Respondí sollozando.

– ¿Te digo algo? Hacer la cena no te quita ni 10 minutos. Para la próxima, quiero la maldita cena en la mesa.

Me dijo lanzándome al suelo. 

Empecé a llorar, me apretó demasiado fuerte la nuca y me dolía. Marco no hizo nada más que subir las gradas, ir a su habitación y tomar licor.

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