Work Hard [Joshler/Tysh]

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- Espera - Le advirtió. Este se acomodó un poco mejor en las largas piernas del castaño y luego sacó más del liquido resbaladizo. Para así poner un pizca sobre su su entrada mientras se moría de la vergüenza, concluyendo en ese segundo que aquella emoción nunca se iba a ir de su mente por el resto de la hora.

- ¿Y ahora?

- Muy listo - Sonrió el tintado, para así abrazar la espalda de Tyler y alinear el miembro del chico en su umbral. Después de un largo suspiro, este comenzó a introducir la punta en ese lugar, sintiendo así un pequeño dolor que empezaba a emanar por esa zona. - Ah, d-duele...

- Tranquilo - Tyler correspondió el abrazo, apretando fuertemente su espalda y posteriormente acariciando sus hermosos y característicos cabellos rosas.

El dolor era moderado, pero admitía provocaba en él una sensación majestuosa a medida que bajaba por el órgano viril. A partir de esa sensación, a Tyler ya le originaba placer las paredes apretadas del chico, por lo que no se aguantó en decir el nombre de su acompañante en un gemido que hizo que el nombrado indicase que le está gustando.

- ¡Oh Josh... sigue bajando...!

- ¡Mierda!... Tyler esto es... - Cerró sus ojos con fuerza y suspiró pesado al sentir por completo el miembro del chico dentro de él.

Aún seguía a horcajadas del castaño, por lo que ambos están en una muy buena posición en donde pueden ver cada expresión sentimental del contrario. 

- Dios Josh, esto se siente realmente bien - Habló en un gemido, comenzando a mover lentamente sus caderas para que Josh hiciera lo mismo con las suyas.

El cuerpo del menor tentaba con atacar el cuerpo del chico con sus embestidas placenteras, sin embargo, este no puso hacer micho gracias a la posición en que se encuentran. Por lo tanto, el control del ritmo de las penetraciones lo tenía Josh. Favorablemente, el mayor empezó a dar pequeños altos que engendraban un placer que recorría toda su espina dorsal. 

Placer y amor, ambas combinaciones con una gran cantidad de raíces infinitas que se ataban una al lado de otra hasta forman un hilo que es la razón de porqué Josh y Tyler creaban ese enlace.

El mayor no pudo esperar más e hizo que sus movimientos fueran más rápido. Debido a esto, Tyler ya no podía controlar sus respiraciones y tuvo gemir grave constantemente, endulzando los odios del chico en cada balbuceo que este hacía. Pero el castaño no era el único que disfrutaba de la excitación, si no que Joshua también emitía fuertes jadeos roncos que de vez en cuando pasaba a carraspear su garganta. Ambos tienen ese intercambio de voces que los hacía excitarse , por lo que el entusiasmo placentero se hacía notar en cada estocada y en cada beso controlado por el amor.

Se besaban incontrolablemente, para así utilizar por primera vez sus lenguas en una acción desesperada y deseosa de probar al fin sus labios como si fuese el primer contacto que aquellos experimentaban luego de pasar por infinitos obstáculos que provocaban el separamiento de sus corazones.

Josh está absolutamente fascinado de poder sentir y admirar el cuerpo de su novio al separarse por unos segundos del peligroso contacto de bocas. El pelirosa se mordía el labio inferior al apegar completamente su torso con el del contrario, para así no dejar nunca aquel cuello que de seguro dejaría alguna marca de tanto plantarle besos como muestra de afecto.

Tyler jadeó hasta raspar su garganta por la repentina sensación eléctrica que nuevamente se hizo sentir en su abdomen bajo. Una infinidad de placer se provocaban mutuamente, para luego sentir como la cadera del castaño iniciaba otra vez un ritmo más rápido que iba un poco más lento que los movimientos de Josh. Fue en ese entonces en que Joshua soltó un gran suspiro al saber que había experimentado el placer de sentir el tacto en su punto .