—¡A mi no me venga con tonterías, esa bolsa estaba en descuento!—gritó molesta.

—hey, tranquizate, deja la bolsa, l-luego la compramos—dijo avergonzada Laurel, ya que todo el mundo nos estaba viendo y murmurando cosas.

—Tu déjame—dijo empujadola.— ¡Exijo hablar con el gerente!—hablo con autoridad.

Odio que traten así a Laurel...

Me acerqué para empujar a Karolina, por haber tratado a Laurel así, pero Laurel me detiene y niega con la cabeza, me relajo al ver su cara de pánico y solo espero...

Karolina comenzó hablar con el gerente, parecía molesta, de un momento a otro Karolina golpeó al gerente, causando que Amara se pegara en la frente, Laurel se tapara la boca con asombro y yo... yo me froté los ojos, con estrés.

Oh no, esto no será bueno...

—¡Corran!—gritó Karolina para salir corriendo con la bolsa.

Pero qué demonios...

Todas comenzaron a correr, y ya que no tenían opción, comencé a hacer lo mismo que ellas...

*Fin del flashback*

Y ahora estamos en la comisaría... simplemente genial.

Este será el fin de todas...

Laurel, Amara y yo estábamos molestas con Karolina, ya que por su culpa estamos aquí... Y si pudiera, la mataría, pero soy muy joven para ser encarcelada.

—¿Por qué demonios lo golpeaste?—Le pregunté molesta.

—¡Que te valga!—creo que está enfadada.

Pero no más que yo.

- ¿¡Qué me valga?!,¿Ya viste en dónde demonios estamos, por tu culpa— Grité exasperada.

Pero ella solo comenzó a reír y todas la miraron confundidas.

Perfecto, ya se le botó la canica.

—Relajence, sé que esta es su primera vez aquí, para mí igual lo es, solo miren el lado bueno— Se encoge de hombros... ¡Con una maldita sonrisa!

—¡¿Lado bueno?! ¡¿Cuál es el maldito lado bueno de esto?!— gritó molesta Amara. Y admito que eso si que me dió miedito...

—Esta será la única vez que estarán aquí, además no me pueden negar que se sintieron genial al ser perseguidas—dijo divertida— Fue muy divertido y fue una adrenalina , que nunca había sentido—

— Mejor vete a la verga, Karolina.— Escupió Amara, hecha una furia.

Pero Tiene razón en eso, sin embargo no justifica lo que hizo...

***

Llevábamos un buen rato ahí dentro, esperando que alguno de los chicos llegara, pero nada, esto es un fastidio...

—Ya me aburrí— Murmuré.

—Yo igual—dijo Laurel con aburrimiento.

Pude escuchar unas risas muy familiares que se acercaban a la celda, y si, eran los chicos que venían con uno de los policías.

— Y yo pensaba que sería el primero detrás de una celda, Alicia—dijo divertido Ryan.

Yo solo rodé los ojos, para luego esperar a que el policía abriera y saliéramos todas de ahí...

—Gracias.—le dije a los chicos para luego abrazarlos, las chicas siguieron mi acción.

—Bueno es hora de alistarnos para la fiesta— dijo Antoni con una sonrisa.

Chaparras al Ataque Donde viven las historias. Descúbrelo ahora