CAPÍTULO 2: MARCUS RAKE

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- Buenos días señora Torres - salude a la cocinera quien desayunaba junto a las demás chicas de servicio - o lo siento buen provecho - las empleadas se levantaron de inmediato al igual que la cocinera - por favor tomen asiento

- Buenos días señorita Gabrielle

- Sigan desayunando, yo solo vine por un jugo - me dirigí hacia el refrigerador y saque el jugo - ¿Dónde guardan los vasos?

- En este mueble señorita - la señora McGrean me tiende uno lo que agradezco con una sonrisa - ¿Desea algo de desayunar? ¿Quiere algo en especial?

- Miren quiero aclararles algunas cosas, primero tomen asiento - bebí un poco de mi jugo mientras obedecían - yo no soy como su jefe así que no quiero que me traten como a él, yo soy más sencilla, soy muy independiente y no me gusta que estén sirviéndome todo, por lo que desearía que me ignoraran

Las caras de sorpresa de todas las empleadas fueron épicas, incluso algunas trataban de no reír por lo que recién dije; al parecer todas creyeron que bromeaba, pero no era así yo quería una vida normal como la que llevaba con Patrick y los abuelos, esa donde todos desayunábamos en una mesa pequeña platicando de cualquier cosa, en donde mi abuela me regañaba si no tendía la cama o dejaba la ropa en el cesto indicado

- Señorita es usted muy bromista - la señora McGrean sonrío hacia mí

- No es broma, la verdad es que yo soy una mujer independiente y por eso pedí que me dieran la casa del jardín, por lo que deseo que no vayan a esta sin que se los pida, no me gusta estar dando molestias

Todas se quedan en silencio por lo que termino mi jugo yendo a lavar el vaso; abandono la cocina dirigiéndome a la habitación donde dormí para cambiar mi pijama, estando lista tomo mi cartera y mi celular metiéndolos a mi bolsa; en cuanto pongo un pie fuera de la puerta principal me topo con el cara dura del tipo que será mi guardaespaldas

- Señorita Jones a partir de hoy seré su guardaespaldas y la llevare a donde me indique

- Mira Saque, en primera no soy Jones soy Becker y segunda no te necesito así que ve a cuidar al idiota con cara de mierda

- Señorita, mi apellido es Rake y no puedo hacer lo segundo, es mi trabajo cuidarla y el señor me especifico que no podía salir de la casa sin mí, así que por favor

El grandulón abrió la puerta trasera de la camioneta, exhale con frustración ¿De verdad que mi infierno comenzaba tan rápido? Creí que por lo menos tendría un día a solas; resignada a mi tormento me adentro al auto en el asiento del copiloto ignorando a Rake, me coloco el cinturón mientras el guardaespaldas entraba en su lugar

- Señorita ¿A dónde la llevo?

- Al centro comercial - comencé a buscar mis audífonos y no los traía - diablos

- ¿Sucede algo señorita?

- Solo olvide mis audífonos, ¿Puedo prender la radio?

- Por supuesto, este es su auto señorita, el Señor lo mando a comprar para usted

- ¿De verdad? - Me asombro por sus palabras - hubiese preferido un Cadillac o un Camaro no esto

Rake no me contesta nada, el grandulón comienza a conducir mientras me dedico a buscar alguna estación buena, a estas horas muchas dan las noticias del trafico; el camino al centro comercial se alarga por unos 45 minutos, en los que me entretengo mandando mensajes a papá, como siempre se ponía intenso en mis horas de comida por lo que le mentí diciendo que había desayunado bien, Rake acomoda la camioneta en el estacionamiento subterráneo; bajo sin esperarlo pero en segundos lo tengo detrás de mí

Amar a alguien más. [COMPLETA ✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora