ⓁⓊⒸⒾⒻⒺⓇ [ⒺⓃⓉⓇⒺ mⓄⓇⓉⒶⓁⒺⓈ] ≋#TaekookAwards2018

{♢}One:

De lejos dos enormes alas negra de plumas suaves se veían en vuelo con calma, ¿Quien era? Ni mas ni menos que Jeon Jungkook; apodado por Lucifer al ser el hijo del dios de todos los muertos debora almas en pena, si, asi tal como te digo.

Jeon nunca supo su nacimiento, solo sabe que tiene 221 años, raro pero real. Dejo caer sus pies en el suelo de piedras y demas minerales que se lograban encontrar en su hogar, ¿cual? El infierno, donde vivian las almas escoguidas por el segun su estadia en la tierra, no todos tenian alas, solo Jeon y su padre; las alas representaban la realeza en ese mundo alterno bajo tierra, ya que en el cielo todos tenian alas y una eurola.

Jungkook miro el temblo echo de obcsiliana de su padre y suspiro, lo que paso por su mente fue "¿que necesitara mi padre ahora?", con sus nudillos y su fuerza sobrenatural toco la puerta de piedra haciendola resonar en las paredes estables y frias; pero calientes por la lava del lugar que caia de ciertos lugares, unos cinco minutos pasaron y la enorme puerta fue abierta. Jeon ingreso en la enorme contruccion empezando a caminar por los pasillos viendo los esqueletos reales de adorno, retratos, etc. Su cabello negro como la ceniza, su piel palida como la nieve, sus ojos frios y grises con su mirada indiferente examinaban cada cosa en una caminata calmada, sus alas negras estaban doblas en su espalda con cuidado de no dañarse.

Se detuvo frente la oficina de su padre y sin tocar abrio la puerta, miro alrededor en busca de la figura inponente y aterradora de el dios de los muertos, ¿Hades? Puf, claro que no, sino que era Choi Lee Hyung, para ser mas especificos.

Padre ya llegue, ¿que necesitas? -su voz resono en eco en aquel lugar mientras cerraba la puerta, ninguna respuesta fue dicha- ¿Papá? -volvio a llamar, camino hacia el escritorio al oir ruidos raros, y ahi lo encontro deborando su sena, una alma en pena- ¡Ugh! Papá se mas educado para comer o algo dentro de tu oficina -dijo asqueado alejandose.

Perdon Hijo -comento Choi levantandose dejando su alimento a medias limpiando su boca sangrienta- me alegro que llegues rapido aqui -dijo seriamente sentandose en su silla al mismo tiempo que Jeon al frente de el.

Jeon rio amargadamente -si, como sea, Yugyeom me dijo que viniera por que me llamabas para decirme algo importante, ¿puedo saber que es? -pregunto cruzando sus brazos a su pecho fornido y su mandibula filoza totalmente derecha y tensa.

Bueno hijo, ademas de que tengas que ir a ver a Sun Hee al paraiso, necesito que hagas lo posible; Junto Yugyeom, de acabar con un descarado que anda secuestrando a menores -dijo con tranquilidad como si fuera normal...ah espera, lo era.

Uhm, ¿Por que debo ir cada dia a la misma hora a ver a esa mujer al paraiso?, tanta pureza terminara asesinandome -dijo en un bufido rodando los ojos.

Por que es un trabajo y una orden -dijo secamente Choi viendo a su unico hijo que logro tener.

¿Quien es Sun Hee? Una señora de cabellera castaña, un arcangel mano derecha de la diosa del paraiso; si diosa que tiene un hijo desconocido ni que los mismos dioses del olimpo conocerian al tenerlo oculto, piel palida, alas puras y blancas como las nubes de buen animo, una eurola que brillaba de inocencia y sus ojos avellanos.

Uhm, bien, ¿Hay almas para seleccionar? -pregunto levantandose de la silla estirando sus alas acalambradas mirando a su padre, este miro sus alas atentamente curioso sin responder- ¡CHOI LEE HYUNG! -grito con voz poderosa Jeon molesto por no obtener respuesta rapida.

Ah, no, hoy no -respondio su padre viendolo levantandose tambien- puedes retirarte -dijo volviendo a su primera accion antes de interrumpir, seguir deborando esa alma.

Jungkook rodo los ojos y volvio a doblar sus alas en le espalda saliendo de ahi, por el mismo recorrido salio de la cotruccion abriendo sus enormes alas empezando un vuelo hacia donde se encontraba Yugyeom siempre de guardia, miro a la gente caminar a pies descalzos sin alma ni vida, apreto los labios apurando su vuelo en el oscuro cielo...o algo asi.

Cuando llego a la entrada norte al infierno encontro a Yugyeom aburrido apoyado en su espada de metal puro y fuerte, se dejo caer a tierra doblando sus alas en la espalda, Yugyeom se sobresalto por la fuerte rafaga de viento que le habia llegado, sin saber el por que hasta ver a Jeon cruzado de brazos.

Hey, llegaste, ¿y? -pregunto quitando la espada enterrada en su mano como si fuera lo maz normal del mundo.

Pues, debemos ir a asesinar a alguien por sus pecados y yo debo ir donde Sun Hee como siempre -dijo no muy animado tomando la espada y colocandola en el cinturon especial que tenia puesto- ¿listo? -miro a su mejor amigo y compañero.

Yugyeom tomo otra espada asintiendo a la pregunta, abriendo la puerta norte entraron por esta llegando al instante al mundo mortal, miraron hacia arriba observando que era de noche, sus rasgos demoniacos habian desaparecido...bueno no mucho los de Jungkook, solo sus alas, pero de Yugyeom desaparecieron sus colmillos y ojos rojos.

Vamos, debe estar cerca -ordeno Jeon empezando a caminar por la acera, Yugyeom le siguio el paso atento.

¿donde te dijo que estaria? -pregunto viendo a su acompañante interesado.

No dijo, hay que buscarlo -bufo y miro un callejon, utilizo su vision demoniaca viendo una sombra negra- por aqui- susurro cruzando la calle en silencio seguido de Yugyeom por atras de guardaespaldas, entraron en el callejon y ahi vieron al hombre, Jungkook hizo unas señas con sus dedos y el con Yugyeom se separaron por ambos lados.

Contaron hasta tres al mismo tiempo con sus dedos y clavaron las espadas a la misma altura pero una mas atras que la otra, la espada de Jeon atraveso el corazon y la de Yugyeom los pulmones, se miraron y quitaron las armas del humano. El cuerpo sin vida cayo al suelo empezando a dejar un charco de sangre sucia e inpura. Jungkook tomo el cuerpo en el hombro mientras su acompañante llevaba las espadas con calma, los angeles se encargarian de los niños que estaban ahi.

Entraron en la puerta norte recuperando sus caracteriaticas demoniacas, Jeon se despidio de su amigo y prendio vuelo al templo de su padre con el cuerpo humano.

[...]