Bad girl and bad boy

Capítulo 1

Estoy en el techo del edificio, el cual hace poco lo decoré a mi gusto. Ya que nadie sube hasta aquí.

Las personas que viven en los departamentos son gente mayor, o simplemente gente que le queda cerca su trabajó y por ende están aquí.

Ya me se de memoria las personas que se alojan en el edificio, básicamente por que me dedicó a observar a las personas y sus vidas, esto suele pasar cuando no tienes amigos, y a tu familia en otro país.

No tengo amigos, una vez tuve, y muchos, pero me di cuenta de que ellos solo estaban conmigo por interés, o por cosas absurdas.

Cuando me sentía triste y sola, nadie estaba ahí para consolarme, así que decidí ser como soy... mala.

Mi padre, el hombre el cual decidió regalarme un departamento e irse a otro país "por negocios", en poco tiempo me entere que mi padre se iba a casar, ¿Y adivinen a quién no invitó? Pues a mi, metió la excusa de que simplemente no podía pasar a buscarme o por que no quería que viajara sola. ¿Si vivo sola, por que el no podría dejar que viaje sola? Es absurdo, todo en él lo es.

Ahora mismo se estará revolcándose con una mujer insignificante que solo quiere su dinero, a mi madre nunca la amo. Por que si amas a alguien solo tus ojos se posan en esa persona, ¿No es así? Los demás no deberían de importarte. Pero, el no se cansó de ser le infiel.
Mi madre, una mujer guerrera, la cuál me crió hasta los 11 años, ya que ella tuvo una operación a corazón abierto, la operación salió bien, pero... un virus hospitalario afectó su organismo, llegando a su corazón.

Fue difícil el día en que ella murió, yo estaba viendo televisión. Hasta que me enteré por mi prima que mi mamá había muerto en esos instantes. Fue el peor día de mi vida, no sabía como enfrentaría la vida sin ella, sin su sonrisa, sin sus palabras y consejos, sin sus experiencia de vida... Envidio hoy en día a esas adolescentes que tienen a su madre y la aborrecen, o a esas mujeres que a pesar de que no son hijos suyos los educan y les ofrecen su amor sin nada a cambio. Pero la vida esta ahí, para jodernos y hacernos sentir incapaces y quitarnos a esa persona que tanto amamos.

Desde que mi madre murió, no hable de ella con nadie. Ni con mi padre.

Me encerré en mi mundo, me aleje de todos, excepto de Betaña, la niñera, vivo con ella desde que di mis primeros llantos en este mundo. Ahora de grande le propuse que se venga a vivir conmigo, le pagaría por limpiar, ella me enseñó a cocinar, limpiar, entre otras cosas, ya que después de que mi madre murió. Ella se encargo de ser ese rol paterno, sin que yo se lo diga.

Por eso la amo, la amo con todo mi corazón. Ella es la única que ve una sonrisa siempre que la veo, con ella puedo ser yo misma.

Betaña es divorciada, tenía un hijo, pero murió en un accidente, un auto lo choco cuando el volvía de trabajar tan solo teniendo 16 años.
Solo por intentar ayudar a su madre con dinero para su hogar.

Estoy tan alejada, de todo, mirando al cielo, y fumando un cigarrillo.
Muchas personas se preguntan de por que soy así, si algo anda mal conmigo. Lo único que les digo como respuesta es "vete al demonio".

Odio que me hagan preguntas, o que me miren, o simplemente que me dirijan la palabra. Lo odio.

Solo Betaña me comprende, es la única persona en este mundo que me ve llorar o reír.

Aveces me pregunto que pasaría si desaparezco, que haría el mundo.
La única persona que lloraría mi ausencia es Betaña.

¿Qué pasaría si me muero? Simple, el mundo seguiría su curso, solo sería un humano más que muere. Una simple e insignificante persona que falleció.