The Last Second©

Romantic

Poco a poco comenzaba a abrir los ojos y era más consciente de todo lo que sabría al recordar lo de anoche, mi cuerpo boca abajo le subía una pierna al otro que me acompañaba en la cama, con mis brazos lo rodeaba, y el por su parte me abrazaba por la cintura manteniéndome cerca, por lo tanto que sentía las sábanas sabía que estaba solo en ropa interior. Abrí los ojos y me encontré con Kyrie, mirando el techo y con su mano desocupada acariciando mi cabello.
-Buenos días -Le dije mirándolo como boba-
-Hola -Sonrío- No te tengo que recordar todo lo de anoche, verdad?
Me dijo cerca del oído y reí
-Si es con práctica a lo mejor y si -sonreí maliciosamente-
-¿En que quedamos? -Preguntó el-
Le volteé los ojos
-Esta bien
Me soltó y se sentó en la orilla de la cama dándome la espalda
-Alguien tiene que ir a su revisión médica -Me recordó-
Suspiré y giré para ver hacia el techo
-Pues ya que -dije indiferente-
El se levantó de la cama y caminó hacia la puerta
-Si lo haces sabes que todo saldrá bien
Apreté los labios porque sabía que tenía razón
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-¿Ha ingerido bebidas alcohólicas en estos últimos días? -Me interrogó el doctor mientras miraba su pizarra y esperaba mi respuesta para escribir-
Lo pensé
-Pueeeees, si, un poquito -Sonreí para mis adentros-
-¿Ha tenido sexo en estos últimos días? -Lo dijo con suma seriedad sin inmutarme y siquiera regresarme a ver-
Me desconcerté
-Creo que no -Dije mientras lo miraba-
Levantó la mirada y clavó sus ojos sobre los míos
-¿Si o no señorita Alaska?
Siendo sincera me intimidó mucho
-No - contesté sin rodeos-
-Le haremos una muestra de sangre y podrá irse, mañana también nos veremos aquí a primera hora, de acuerdo?
Solo di un si por respuesta.
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-Neta el doctor es un aburrido de lo peor -Le dije a Lia fastidiada mientras me sentaba en la banca de los vestidores solo con un top deportivo y mi licra.
-¿Está guapo? -preguntó mientras se cambiaba-
Lo pensé
-Para nada, tendrá unos 30 fácil -Dije mientras perdía la mirada en el suelo gris-
-Oye -Me dijo mientras se acercaba ya arreglada- ¿Tu y Kyrie?
Sonreí aún con la mirada perdida.
-¿Kyrie? Mmmmm, ay Kyrie -La regrese a ver sonriente- ¿Por que la pregunta?
Soltó una risa sarcástica
-¿como que por qué la pregunta?, nunca te había visto bailar así y mucho menos con un hombre.
Le iba a contestar pero comenzó a entrarle una llamada y contestó, yo por lo mientras me levanté y me puse mi ropa, que era un short flojo Nike color negro y una playera de manga larga gris algo ajustada, y por la flojera de no ponerme tenis use unas chanclas Nike también.
-Mañana dejamos el gimnasio y se retoman los entrenamientos -Me dijo Lia-
-Que bueno -Le dije mientras terminaba de arreglar mis cosas-
Escuché que alguien entró a los vestidores y vaya sorpresa, era Queralt.
Caminó y se acercó a mí para tomar sus cosas con una cara de preocupación.
-Ay que asco -Exalte sin pudor alguno viéndola con la peor cara del mundo-
Lia se rió y la otra por su parte dejó todo lo que estaba haciendo y se acercó hasta pararse enfrente de mi a manera de intimidarme.
-¿Algo que decir Alaska Black? -Me miraba a los ojos desafiante-
-Nada, no quiero arruinarte más tu día que parece que ya te va mal -sonreí hipócritamente-
-Lo arruinaste por estar aquí
-Júramelo
Ella me empujó por los hombros pero gracias a mis reflejos no alcanzo a moverme mucho.
-No te preocupes ya, no pierdas tu tiempo intentando ganarme en esto, ni golpeándome, insultándome o mucho menos jugando.
Soltó una carcajada.
-Creo que te hace falta aterrizar un poco y saber que en unos meses vas a estar muerta -Lo dijo enfadada como si de cualquier cosa se tratase-
-O festejando el campeonato con mi MVP de temporada regular y mi MVP de las finales, y tu que harás? Festejar tu anillito, cortesía de Alaska Black -La mire arrogante- Porque no se a donde piensas llegar con esos aires, 5 puntos por partido
Y se quedó callada
-Auch -Dijo Lia quien solo miraba-
Mire cómo se le volvía a notar el enfado y sin pensarlo ella dos veces se me fue encima haciendo que cayéramos al piso. En ese momento comenzó a intentar golpearme el rostro mientras me maldecía de una y mil formas; para esto yo no supe donde estaba Lia la buena amiga que salió corriendo por ayuda mientras me golpeaban, como pude la tome de los brazos y pasé a estar arriba de ella, no la golpeé y solo sujete sus brazos alrededor de su cabeza según inmovilizándola.
-Queralt, amor! -Se escuchó mientras abrían las puertas de par en par y entraban-
Obviamente era Ricky, lo regrese a ver pero miraba a su novia, que aún tenía ganas de golpearme. Y no desaprovecho, ya que como pudo me aventó haciendo que mi cabeza golpeara con una de las esquinas de la banca de fierro. Inmediatamente sentí como se me nublaba la vista y veía que intentaba irse encima de mi pero Ricky la sostenía por la cintura, vaya que estaba enfadada.
-¡Alaska!, qué pasa? -No se quien preguntó porque ya casi no distinguía nada-
Intente hablar pero no me salieron las palabras, más de una persona se paraba frente a mi y sentía que unos brazos me cargaban y me acostaban donde recientemente mi cabeza había golpeado. Y todo se volvía oscuridad para mi.
-Hey no Alaska, quédate aquí con nosotros -Dijo quien sabe quien mientras tomaba mi rostro-
Y sentí de repente como mi cara se mojaba al igual que gran parte de mi cuello y cuerpo, haciendo que mis 5 sentidos reaccionaran de manera agresiva, abrí los ojos y me senté.
-Dios -dije mientras tallaba mi cara con mis manos y me tranquilizaba-
-¿Que pasó? -Dijo alguien y regrese a ver ya mejor para darme cuenta de que era LeBron-
Lo mire incrédula.
-¿como que qué pasó? -Dije mientras me levantaba- Pasó que está loca llegó de la nada enojada con el mundo y pues se le atravesó quien le dijera el asco que es. No le pareció y creyó que con golpes me iba a ganar pero ni eso -Dije señalándola y acercándome con toda la intención de pelear más-
-Maneja mejor tu actitud de "Súper Estrella" -Dijo ella ya más relajada haciendo las comillas al aire- O como diré? Súper anémica.
Ese comentario si me hirió.
Y me acerqué más pero me sujetaron fuertemente unos brazos que no eran de LeBron.
-Ya es suficiente -Dijo LeBron- Llévatela de aquí
Creí que le había dicho a Ricky pero de repente quien me sujetaba, me soltó y fue por mis cosas a la banca, ahí noté que era Zach, me tomaba del brazo y me sacaba de ahí para llevarme a los vestidores de los hombres. Antes de salir hice contacto visual con Ricky y solo apretó los labios. Pero no era el único, estaban Lia y Andrew de espectadores.
-¿Qué rayos te pasa? -Le dije-
Me ignoró y dejó mis cosas en una banca.
-Ven, como te sientes? -Me dijo y me acerqué-
-Estoy bien -Me pare frente a él- Gracias por ayudarme
Me sonrió
-Para eso estamos
-Oye, y Kyrie? -Le pregunté-
Volteó los ojos y me reí
-Tu noviecito no vino a entrenar -Me percaté de que recorrió mi cuerpo con su mirada-
Y se tocó su pecho como que indicándome algo, no entendí hasta que vi el mío, y gracias a que estaba mojada se me remarcaban los pezones por el top deportivo. Inmediatamente me sonrojé y me giré tapándome.
-No se cual es tu pena Alaska -Se río-
Y yo también reí.
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Estaba a punto de salir del estacionamiento con mi jeep ya que había perdido tiempo cambiándome y en tontería y media más pero me entró una llamada de un número que no tenía registrado, lo pensé pero contesté.
-¿Hola? -Dije-
-¿Te gustaría tomar un café y ponernos al día?
No reconocí la voz
-¿Con quien hablo? -pregunté-
-Soy Ricky
-¿Tienes el cinismo de pedirme que te acompañe después de que tu novia me golpeó y casi me deja inconsciente?
-Ammm si -Soltó una risita- En 20 minutos nos vemos en Starbucks.
Y colgó dejándome más confundida que nada.
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Tenia más de 5 minutos en la Jeep pensando si bajarme o no, pero ya estaba ahí, así que solo dejé que las cosas fluyeran. Me bajé y caminé hacia donde me habían citado, que estaba a unos pocos pasos, me mire en el reflejo de la puerta para aprobar el como me veía, seguía con el short negro pero me había puesto una playera blanca súper equis y mi cabello lacio suelto hoy se veía mejor que otras veces, suspire y entre.
-Hola buenas tardes -Me dijo amablemente la chica del mostrador -
-Hola -Le sonreí-
Regrese a ver hacia las mesitas de la izquierda y no lo veía, pero al regresar a ver a la derecha me di cuenta de que ahí estaba, mirándome sin hablar.
Lo mire a los ojos y apreté los labios para acercarme a él, a lo cual se levantó.
-Hola -Sonrío mientras me tomaba del hombro y se acercaba para darme un beso en la mejilla-
-Hola Ricky
Me senté en la silla que estaba enfrente dejando las llaves junto con el teléfono en la mesa y él también se sentó.
-¿Como te sientes? -preguntó referente a lo que había pasado-
Lo mire confundida pero inconscientemente sonreí.
-Ya estoy bien -pensé lo que hice y mire mis manos apenada-
-¿Quieres algo? -Me preguntó mientras se levantaba- Si, ya se que quieres
Y se fue, dejándome con la respuesta en la boca. Mi teléfono vibró y lo tome para ver qué era, que con sorpresa se trataba de un mensaje de quien no se había aparecido en todo el día.
-Alaska bonita, hoy paso por ti a las 8:30 en tu casa, te tengo una sorpresa
Sonreí y le contesté.
-A esa hora nos vemos entonces ❤️
-Un frapuccino chip para la señorita -Lo dejó frente a mi- Y no podía faltar el pastel de chocolate
-Gracias -Sonreí y tome en vaso para mirar mi nombre, decía algo así como Alaska Bonita y tenía un corazón-
Preferí no hacer ningún comentario respecto a eso.
-¿Y de que querías hablar?
-De ti Alaska
Lo mire
-No tengo intención de ser grosera pero Ricky, tienes que dejar de buscar problemas aquí, tu novia tiene un temperamento horrible, notaste lo de hoy?
-Si Alaska, lo noté, pero ese no es el punto. Yo hace tiempo que tengo algo atorado y necesito decírtelo
-Te estoy escuchando
-Yo... -Comenzó a sonar su teléfono-
Y sin siquiera disculparse contestó.
-Hola amor, estoy tomando un café, que estás donde?!, voy corriendo para allá, aguanta, solo relájate, te amo
Era más que obvio de quien se trababa. Agache mi vista a la bebida y le tomé.
-Alaska yo tengo que irme, Queralt tuvo una emergencia. Te parece que tomemos el café después?
-Si, no tengo problema
Claro que si había.
-Cuídate mucho Alaska -se levantó, me dio un beso en la mejilla y se fue-
Y me quede ahí, sola. Solo suspire y le tome a mi café
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Eran apenas cuarto para las 8 y yo estaba en la regadera enjuagando mi cuerpo enjabonado, y entre el sonido de la música y el de las gotas alcancé a oír que tocaban la puerta, me queje y cerré el paso del agua para secar solo un poco mi cuerpo y ponerme una bata de baño muy bonita color negra, salí del baño y me puse unas pantuflas para evitar resbalarme y fui a paso rápido a la puerta, sin preguntar abrí imaginado que sería el correo o alguien de mantenimiento del edifico, pero no.
-Kyrie por Dios qué haces aquí? -Le dije apenada apenas lo veía por la manera en la cual yo vestía-
Él traía un traje color azul marino con una camisa por debajo blanca. Y un graaaan, pero de verdad un gran ramo de rosas rojas.
-Soy algo puntual -Sonrió- Hola por cierto
Me tomó del hombro y me saludó con un beso en la mejilla.
-45 minutos antes -Me burlé-
-Tenia que entregarle esto a la mujer más hermosa del mundo -Dijo mientras ponía su mano sobre mi cintura y me movía para poder pasar y cerrar la puerta tras el.
-No era necesario -sonreí como tonta mientras las tomaba-
Y sin notarlo el ya me grababa con una sonrisa de oreja a oreja.
-Kyrie estoy en bata, nooo -Intente taparme con las flores-
El reía muy feliz.
-No seas exagerada -dejó el teléfono del lado- Vamos a ponerlas en agua
Me tomó por la cintura y me llevó hasta la cocina.
-¿Que te trae por aquí tan temprano? -Pregunté-
-Las ganas de verte
Sonreí.
-Ve a arreglarte, si? Yo me encargo de esto -Me dijo mientras tomaba las rosas-
Solo asentí y salí de la cocina, no sin antes darle un último vistazo y sonreír ya que casualmente también me miraba.
Llegue a mi habitación y cerré la puerta, ya había definido que me llevaría y eso era un vestido color vino algo corto y completamente abierto de la espalda. Me lo puse junto con la ropa interior y un par de tacones negros un poco altos, intenté apurarme lo más posible y ya anticipando las cosas seque mi cabello con la secadora que anteriormente ya había sacado, me peine, me maquille un poco y salí de ahí, siendo completamente una Alaska distinta.
Al salir de primera no vi a Kyrie y supuse que estaría en la cocina, a la cual fui y el ahí estaba en la barra viendo hacia mi pero usando su teléfono. A lo qué sabía eran ya 8:20.
-¿como me veo? -le pregunte llamando su atención-
Alzó la mirada y quedó boquiabierto mirándome de pies a cabeza.
-¿Y tu quien eres? -Se me acercó y se puso de frente a mi, seguía siendo más alto- Alaska Black te ves hermosa.
Y me sonroje como nunca.
-¿Y a donde iremos señor sorpresas? -pregunté buscando el contacto visual-
-No te imaginas -rió y miró su reloj- vámonos anda
Mire que había puesto las rosas en un florero que quedaba en el centro de la barra.
Comencé a caminar hacia la salida solo con mi teléfono y mis llaves, yo estaba a punto de abrir pero él se me adelantó y me cedió el paso, caminamos hasta el elevador sin hablar y entramos, me recargue en una esquina y el se puso frente a mi mirándome.
-¿Que tanto miras? -Le pregunté-
Sonrió y con eso me dijo todo.
-¿Así que eres un hombre de pocas palabras?
Con una sonrisa maliciosa contestó
-Soy más de acciones
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Al parecer Kyrie estaba estrenando carro ya que no era el de siempre, era una camioneta BMW color negra, súper cómoda por dentro. El camino a nuestro destino fue largo, al parecer cenaríamos en el restaurante del hotel más lujoso de toda la ciudad, yo nunca había puesto un pie ahí y todo era nuevo, al llegar uno de los trabajadores abrió la puerta del auto para dejarme salir mientras Kyrie por su lado hablaba con él valet parking.
-Buenas noches señorita
-Buenas noches -contesté amable-
Camine hasta donde Kyrie ya me esperaba.
-¿Que tal el lugar? -Me preguntó mientras comenzábamos a caminar para adentro-
Pasamos las puertas eléctricas.
-Es hermoso -le dije mientras miraba a todos lados asombrada-
El con su mano buscó la mía y se entrelazaron.
Llegamos a la entrada del restaurante y sin tardarnos mucho nos pasaron a nuestra mesa.
Al ya estar sentados el mesero llegó rápido y nos llevó las cartas.
-Buenas noches, les ofrezco algo de tomar? -Preguntó-
El y Kyrie me miraron pero yo realmente no sabía que pedir.
-Ay no se -Reí- pide tu primero
-Una copa de vino tinto por favor -Se rio de mi-
-Ya se -Dije- quiero un Blue Lagoon
Me miraron con sorpresa
-En seguida los traemos
Y se retiró.
-Leve que te gusta el vodka -Dijo el mirándome de frente-
-Mi cosa favorita
El tiempo pasó, cenamos y la pasamos bien un rato, sin exagerar me tome unos 4 Blue Lagoon pero estaba estable, mientras que Kyrie no había pasado de una copa de vino. Comimos el postre y nos quedamos un rato más ahí.
-Todo fue muy lindo Kyrie, gracias -Dije mientras juntábamos las manos por encima de la mesa-
-¿Te gustó?
-Me encantó
-Pues aún te falta conocer la habitación
Sabía que arreglaríamos unas cuentas pendientes al parecer. Así que me puse en mi plan seductor.
-¿Cuando tendré ese gusto? -comencé a hacer círculos en el borde del vaso-
Él lo notó y sonrió del lado.
-Si gustas podemos irnos ahora
No dije nada y me levante de mi lugar, y lo esperé para caminar a la par. Mire mi reloj y era ya media noche.
Llegamos hasta el elevador y al pedirlo llegó en el momento, ya casi no había gente, entramos y el presiono un botón, que casualmente era uno de los últimos, y se quedó en la otra esquina mirándome de una manera tan intensa, yo no lo miraba y solo jugaba con mi cabello, pero no aguante.
-¿Que pasa entonces? -Dije mientras caminaba hacia él al compás del sonido de los tacones-
Me le paré enfrente, muy cerca.
-Ya sabrás -Puso su mano en mi hombro y con ella recorrió mi espalda hasta llegar a mi cintura-
Y sentí la necesidad enorme de besarlo pero me las guarde ya que el elevador se abrió.
-Adelante preciosa -Me soltó y yo salí-
Camine con toda la lentitud del mundo intentando resaltar cada curva de mi cuerpo, y era inevitable sentir como su mirada no se despegaba de mi.
-El 509 -Dijo el mientras caminaba hacia esa puerta y se recargaba en ella-
-¿Que esperamos? -le pregunté-
Sonrió
-Tienes que cerrar los ojos
-Ay nooo -Me miró frunciendo el ceño- esta bien pues, pero ayúdame
Sonrió y abrió la puerta un poco para pasar tras de mi y tapar mis ojos con sus manos, comencé a caminar y como pude entré; era evidente que la luz estaba apagada, y se sentía que la calefacción ya llevaba prendida un buen rato.
-¿Yaaaaa? -pregunté ansiosa-
Noté que encendió la luz.
-Ya
Y retiró sus manos.
Noté de primera instancia que estábamos en la suite del hotel, había unos grandes ventanales en el área de la sala que mostraban la gran ciudad, del lado izquierdo había una puerta muy grande de madera tallada que supuse yo que era de la habitación, al lado derecho había una cocina muy linda, y lo que más llamaba era el enorme oso de peluche que estaba en uno de los sillones frente a mi, con una gran caja de regalo bajo el y una tarjeta sobre el.
-Kyrie que es estooo -No se me borraba la sonrisa de la cara-
-Vamos, lee la carta
Camine hasta donde estaban las cosas y tome la tarjeta entre mis manos para abrirla y leerla, y por más de que era obvio, me sorprendí de lo que decía.
"¿Quieres ser mi novia?"
Lo mire a ver con mi cara de sorpresa.
-Kyrie seré novia de un osooo -bromeé-
Y él soltó una carcajada y se me acercó.
-Vamos a empezar otra vez entonces -tomó la tarjeta de mis manos-
-Me parece bien
-Alaska Black, quería saber si quería evitar el rollo de volver a leer esto -señaló la tarjeta y la dejó sobre el oso- y me pudiera conceder a mi el deseo de ser su novio
Sonreí y me sonrojé.
-Claro que si -y lo abracé fuerte-
Así nos quedamos un rato felices de la vida, pero noté que él se separaba un poco pero aún con sus manos en mi cintura, también me separé sin soltarlo y nos encaramos mirando nuestros labios, él sin ganas de esperar los unió de una manera romántica. Al principio fue solo un pequeño beso de pico, nos separamos, pero a quien engañábamos, queríamos más.
Volvimos a unir nuestros labios ya moviéndolos, rozándolos, no era la primera vez que lo hacíamos y como era evidente teníamos ganas de más, pero me separé.
-¿Así que oficialmente ya puedo hacer esto? -Dije refiriéndome al beso-
-Eso y todo -susurró con malicia-
Y sus palabras despertaron algo en mi. Sin pensarlo dos veces volví a besarlo ya apasionadamente, lo moví para ponerlo frente a uno de los sillones sin nada sobre el, sin separarnos me jaló haciendo que me sentará sobre sus piernas, dejándome caer sobre su entrepierna, le quite el traje dejándolo solo con la camisa, el con sus manos comenzó a jugar en mi espalda de arriba hacia abajo haciéndome estremecer, me movió todo el cabello hacia solo un lado y dejó mis labios para ir hacia mi cuello, el mismo que comenzó a besar con intensidad provocando que yo soltara leves jadeos. Comencé a desabrochar botón por botón su camisa, la cual desesperadamente saqué y tire lejos de donde estábamos, comencé a mover mi cadera de adelante hacia atrás lentamente con la intención de provocarlo aún más, y siendo más que obvio que no se quedaría quieto me tomó de la cintura y me acostó sobre el sillón mientras él se posicionaba sobre mis piernas y proseguía a besarme, rápidamente buscó los bordes de mi vestido y cuándo logró encontrarlos no lo dudó y me lo sacó de una, mirando detenidamente la gran parte de mi piel desnuda que ya era descubierta.
-Eres hermosa Alaska -Me susurró-
Y sonreí para tomarlo desprevenido y pasarlo para abajo de mi, y volver con el movimiento de cadera mientras lo besaba, y comenzaba a bajar por su cuello, mordiendo y dejando marcas, baje mis manos por su abdomen y con el tacto recordé que aún tenía el pantalón.
-¿Esto estorba demasiado, no crees? -Dije mientras comenzaba a sacarle el cinturón-
-Sácalo ya -se le escuchaba mega excitado-
Y decidí hacerlo sufrir quitándole el pantalón pero dejándole en bóxer, comencé a repartir besos sobre su torso muy bien trabajado, dejando marcas como en el cuello, hasta llegar a las proximidades de su entrepierna, con mi mano comencé a acariciar de arriba hacia abajo y vaya que era mucho que recorrer, mientras notaba como él gemía y echaba la cabeza para atrás, lo solté y sobre la tela del bóxer comencé a repartir besitos por toda su zona sensible.
-Ya no aguanto -Me pasó para abajo de él en un movimiento súper rápido y se levantó para tomarme y cargarme-
Se sentía su enorme erección en mi abdomen mientras me tomaba fuertemente por el trasero, y atacaba mi cuello pero no saciado con eso fue a mi pecho, besando la piel descubierta, pero él ya quería más, así que desocupó una de sus manos y mientras caminábamos hacia la habitación logró desabrochar mi bra para dejarlo caer en quien sabe donde, y siguió besándome para después darme cuenta que ya estábamos en la habitación. Él me dejó caer a la cama mientras miraba mis pechos con atención, para después ponerse sobre todo mi cuerpo y darme un beso corto en los labios.
-Alaska, estás segura de esto? -Me preguntó mientras me miraba a los ojos-
-Claro que si Kyrie
Sonrió y me dio un lindo beso en la frente, y pensé en que apartir de ese entonces mi vida cambiaría, todo sería más romántico, mucho más feliz...

n/a: holaaaaaaaaa, se que me matarán como siempre quieren hacerlo pero aquí está el siguiente capítulo, de verdad me cuesta mucho subir con frecuencia pero les prometo que lo intentaré, escribí una parte medio hot. Y me gustaría que me dieran su opinión respecto a si les parece que la escriba o prefieren que la salte, de verdad quiero su opinión mucho respecto a este capítulo, me ayudaría demasiado.
Nos vemos en el siguiente; verán que será más pronto de lo pensado.
Las quiere Sofía ❤️