Capítulo 3.-Arrepentimiento

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—¿Steven? —oigo una voz femenina.

Volteo, es una Lilligant, no puede ser, ¿O sí?

Tragué saliva y apreté mi puño.

—¿Lillie? —pregunto inseguro.

La Lilligant salta hacia a mí con los ojos llenos de lágrimas mientras sonreía.

—¡Realmente eres tú! —exclama—. Pero, ¿Siempre fuiste hembra?

—Bueno, es una larga historia, quizás —respondo.

En eso veo a otros cinco pokémon y....... a él.

[Aquí hay algo que no me gusta de esas últimas palabras y no logro identificar que es :/]

***

[Minutos después de la huida de Steven]

—¿U-Un humano? —musita Abbey cuando logra recuperarse.

Drake se mantiene observando al suelo y levanta un collar, al abrirlo observa una foto de una mujer humana.

Al ver bien, observa un pedazo de papel detrás de la foto.

"Lamento no poder estar a tú lado nunca más"

Fue todo, eso es lo que decía la carta. La lluvia no se detenía, Silvye observa sus "manos" mientras recuerda el rostro de Steven.

—¿Qué hice? —Se pregunta.

Esa noche, todos los conocidos de Steven se reunieron en el orfanato, todos menos Castia y Rose.

Drake mostró la carta y la leyó mientras todos entendían lo que quería decir.

También se dieron cuenta de algo, no sabían nada sobre Steven.

—¿Qué debería hacer? —Se pregunta la Lilligant—. ¡Ya sé! Mañana iré a buscarle.

—No —dice Castia entrando.

Todos le quedaron viendo fijamente.

—Con el simple hecho de haberlo revelado, Steven se ha convertido en un fugitivo —comenta la capitana—. Si alguno de ustedes lo ayuda serán declarados enemigos.

—¡Pero....! —La Lilligant tiene un semblante sombrío—. N-No quiero volver a perder un hijo.

La Lucario suspira.

—No se preocupen, iré yo —dice con una sonrisa—. Después de todo, no soy muy diferente de é-ella.

Todos le quedaron viendo.

—¿Tú también? —cuestiona Gianna.

Castia sonríe.

—Si lo haces también tendré que perseguirte ¿Eres consciente de ello? —pregunta Deus.

—Claro, porque.... Sé que es dolorosa estar solo en un mundo desconocido.

—Si lo encuentras —musita la Lilligant.

La capitana sonríe.

—¿Por qué no se los dice cuando lo traiga de regreso? Después de todo, ¿No es éste su hogar?

Todos asienten mientras ven a Castia marcharse.

Tras horas de buscar a los alrededores, escucha un sonido extraño y lo sigue.

La Lucario llega a un lago, dónde observa a Rose ligeramente decaída mientras lanza piedras al agua.

—¿Qué haces aquí? —pregunta la tipo acero/lucha.

Reencarnado en una Gardevoir.Where stories live. Discover now