Relatos de una letrista. [Wheesa]

¿Roces?

Iba por la décima octava carrera cuando sonó su teléfono, un cliente la había solicitado.

Llevaba las ventanas abiertas, el cinturón puesto y su mejor cara para recibir a la persona que solicitaba el permiso, por primera vez en todo el día le tocaba una mujer.

Dio la vuelta por una avenida que se parecía a un barrio universitario y observó a la gente de los alrededores, parecía que su auto no podía correr peligro en ese lugar.

Finalmente vio el supermercado desde donde aparecía la ubicación de su pasajera, pero no la vio a ella, así que decidió llamarla.

Mientras marcaba vio a un tipo corriendo en su dirección y a una chica gritando "Mi teléfono" varios metros atrás. Entonces algo hizo click en su cabeza.

Sacó el gas pimienta bajo el asiento, abrió la puerta del auto y se lo roció al tipo en la cara.

Bueno, vamos a contar la parte corta de la historia.

Llegó la policía y se llevó al ladrón, quien no puso cargos porque las mejillas de Solar le recordaban demasiado a las de su madre (o algo así dijo entre la fuerte tos que le dejó todo el gas que respiró) y que nunca sería capaz de poner cargos contra su madre.

YongSun siguió con el protocolo de servicio. Le abrió la puerta a la clienta, cerró el maletero del auto y se subió.

En la primera cuadra ya había un silencio sepulcral dentro, Solar miró por el espejo retrovisor a su pasajera y se decidió a romper el hielo.

-MoonByul, ¿o no?.

La pasajera no respondió, así que decidió hacer un segundo intento.

-Estas cosas pasan, el país está así. ¡Pero oye!, tú lo recuperaste ¿No?.

Los esfuerzos de Solar por animar a MoonByul no fueron en vano, consiguió sacarle una sonrisa a través del espejo retrovisor.

-Gracias por ayudarme a recuperarlo, sin él no podría hacer nada más que limpiar pisos y llenar hojas- Respondió Byul- además de que el sinfín de números telefónicos que tengo se habría perdido.

Solar sonrió mirado al camino, feliz de haber logrado levantarle el ánimo a la chica.

-¿Tantos?, ¿A caso eres algún tipo de celebridad?- Solar la miró con más detenimiento- ¿Modelo, quizás?.

MoonByul rió en el asiento trasero.

-Estoy bastante lejos de eso, trabajo limpiando pisos y soy universitaria, así que tengo que tener los teléfonos de todos los idiotas de mi clase.

-Woow, supongo que son idiotas pero suertudos- Solar estaba decidida a hacerla olvidar el shock del robo- ¿Y qué estudias?.

MoonByul se sonrojó.

-Ingeniería.

Solar rió.

-Supongo que todos fuimos fetos alguna vez.

-¿Qué?.

-Nada, nada.

Al parecer MoonByul no frecuentaba las redes sociales. Un punto menos para Solar.

-Y... ¿Tú estudias?.

-Si... Teatro, en realidad.

MoonByul se hizo hacia adelante en el asiento para hablar más cómoda con Solar.

-He escuchado que es divertido pero que te tratan como un soldado.

Solar rió.

-No pudieron decirte algo más cierto.

Mientras hablaban tranquilamente, Solar llegó al destino que le indicaba la aplicación, pero en lugar de pedir el dinero se quedó en silencio.

-Llegamos -Dijo MoonByul, algo decepcionada- Fue realmente divertido hablar contigo... Gracias por todo.

¿Te ha pasado que conoces a un extraño por un evento absolutamente al azar y se te hace difícil despedirte de él?.

Solar no quiso hablar, sentía que en el momento en el que MoonByul saliera por esa puerta, algo increíble dejaría de pasar. Quería pensar en que podría seguir hablando con aquella chica que hizo su día interesante.

-Yo...-Dijo finalmente- te llamé antes de que le vaciara la lata de gas en la cara a ese tipo y... Si quieres hablar de lo que sea, tienes mi número.

MoonByul se sintió feliz y pensó "esto no puede ser más que una señal", le sonrió a Solar, pagó lo que debía y salió del auto.

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Los amo