Lagrima† Libro #1

Malditos sueños.

NARRA KATELYN:

¿Tan mierda es estar en un hospital?. Creo que si. Si.

Ya era de noche y no me podía dormir al día siguiente me pesaban y si estaba todo bien me podía ir. Solo vomite una vez, comparado con las veces que vomitaba antes no es nada. Odio estar enferma, odio los hospitales y sobre todo odio mi vida y mucho.

No lo se hay veces que solo quiero morir y nada mas, que todos me olviden de una puta vez y no ser mas noticia en ningún lado, que no me recuerden nunca mas ser olvidada por todo el mundo, no merezco esta vida, realmente no la merezco. Me rindo, siempre y nada podrá cambiar eso, al final de todo moriré y no habrá nada que pueda cambiar eso. Porque estaré muerta. Solo con decirlo me da miedo, me da miedo la muerte pero por otro lado quiero que 

Solo tengo un %00,1 de ganas de vivir y eso es solo porque siento que alguna vez en mi vida quise a mi vida. Solo una vez. Una vez.

Entro la enfermera y me pregunto si no tenia sueño. (Por cierto ya eras las 4 de la mañana). Le dije que no entonces me ofreció una pastilla, le dije que no. Pero insistio y la tuve que tomar. Dentro mio la deteste pero luego se me paso porque estaba dormida.

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-Katelyn.....- dijo una voz diabólica.- Es tu hora yaaa....- 

-¿¿¡¡¿Quien eres??!!?.- pregunte muy asustada.

-La muerte perra.- dijo y me tomo del cuello.- no mereces vivir. - y en la cabeza del diablo se formo un humo con la cara de Caroline.- ella si lo merece.- dijo y cuando estaba a punto de clavarme un palo en el estomago....

-Espera.- dije.

-¿Que hice para merecer morir?.- pregunte llorando.

-No valoras tu vida, no lo ves maldita.- me dijo el diablo.

-Pero.. yo..- dije llorando aun mas fuerte. ¿Habia muerto realmente?.- Yo si quiero vivir.- dije.

-Bien si eso es lo que quieres, trata bien a tu vida.- dijo mostrando sus dientes.

Cuando iba a contestar aparece Caroline concentrada en otra cosa y de repente nuestros ojos se conectaron.

-¿¿Que no mataste a esta perra?.- dijo mirando al diablo.

-Amm... no, aun no señora.- dijo el diablo.

!!¿¿Pero que mierda!!??. ¿Caroline controlaba al demonio?.

-Pues hazlo ahora o juro que te matare.- dijo amenazando.

-¿Que te hice?.- pregunte gritando y llorando.

-Es enserio, me lo preguntas de verdad.- afirmo de una forma rara.

Asentí.

-Perra hiciste mi vida imposible, ¿quieres que te diga todos mis apodos?, creo que estarías aquí un largo tiempo si es que eso quieres.- me grito. - esos días en los que ponías chocolate en mi casillero, me tirabas comida o la vez que pusiste una ave muerta en mi comida con una nota que decía "Para que no te quedes con hambre" o algo por el estilo. ¿Ahora quieres preguntar?- hazlo tengo tiempo.- dijo mirándome a los ojos fijamente.

-Arruinaste mi reputación.- dije

-Es enserio?- pregunto.

Ansentí.

-¿Y nunca te preguntaste porque te saque esa foto vomitando en el baño, nunca lo hiciste Katelyn?.- pregunto.

No dije nada.

-Eso pensé.- dijo y agrego.- Mátala de una puta vez.- 

El diablo Asistió y lo hizo. Me clavo ese grueso y largo palo en el medio del estom.....

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-¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!.- grite.

Escuche unos pasos muy rápidos como si una persona estuviera corriendo para la habitación.

-¡¡Katelyn!!. ¡¡Katelyn!!.- grito una voz.

Sentí que no podía abrir mis ojos. No lo podía hacer.

-Katel.....-

No escuche nada mas.

 Todo era negro.

-¿Katelyn siguies ahí?.- pregunto una voz de mujer.- pequeña si escuchas mueve solo un dedo.- dijo.

Moví el dedo.

-No lo esta moviendo.- dijo otra voz.

-Solo dale tiempo.- dijo la voz de mujer.

Si había movido el dedo. Lo moví otra vez.

Trate de gritar.

-Abrió la boca.- dijo una chica.

-Eso hizo..- dijo la misma voz que dijo que había movido el dedo. Era una voz de hombre grande.

-Escucho..- dije con todos mis esfuerzos para poder hablar. Lo dije suave y ronco, casi sin poder hablar.

-Escucha, ¡conecten los cables!.- dijo la chica.

-LISTOS. ¡UNO!, ¡DOS!, ¡TRES!.- 

Y nada mas se escucho, todo era aun mas negro que antes.

Bien creo que este es mi fin. Me dije a mi misma.

Desperté 4 horas después.

Mis ojos se abrían lentamente, muy lentamente. Y cuando al fin pude ver algo, lo primero que vi fue a Caroline.

-¿Qué haces aquí?- pregunte