Das asco.

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NARRA CAROLINE

Al fin salgo del maldito infierno y por fin me voy a mi casa. Abro la puerta de mi casa y veo a mi hermano con su "novia" de 12 años que tenia que ser Camino Edwards, ajam.. la hermana de Katelyn Edwards. Son "novios", por decirlo así, una fantasía infantil para mi, pero bueno mientras no suceda nada ni ella lastime a mi hermano de 14 años estará todo bien.  

-¡Hola Caroline!.- me dice Camino amistosamente.

-Hola..- dije con una pequeña sonrisa.

-Puedes irte arriba, si se te da la gana.- me dijo mi hermano.

-Por ahora no, gracias.- dije sarcásticamente.

-¿Y que vas a hacer?.- me pregunta mi hermano.

-Iré por un poco de comida.- le conteste.

Camino me miro muy mal, como si fuera ilegal comer en su casa, posiblemente sea así, pero no me importa , no me importa comer adelante de la gente y eso me gusta de mi. Que no me molesta lo que los demás digan de mi mientras como, luego si, pero mientras como no.

Fui hasta la cocina a buscar un buen huevo frito y subí a mi habitación. Prendí  la computadora y vi un mensaje que decía: "Tu puedes comer o no comer, como tu quieras pero recuerda que tu vida es tu vida y haces lo que tu quieres, los demás no importan". 

-¡Increible!.- me dije a mi misma. 

¿Quien me habría mandado esta carta?, dice Anónimo. Seguramente era Katelyn, era Katelyn, ¡¡¡como carajos me creí que una persona se hubiera interesado en mi!!!. Me siento humillada por dentro, es un broma de Katelyn. Levante de mi silla y me acosté en mi cama a leer mi nuevo libro "Luchando por mi vida". Se trata de una adolescente a la cual los papas le pegan y ella día a día trata de escapar de ese infierno, la encerraban en un armario, la maltrataban, le pegaban ¡todo!. Hasta que ella un día pudo escapar de esa casa y empezó a vivir aventuras junto a Kevin su mejor amigo hasta allí llegue, quiero saber que pasa después. De repente me quede dormida y me levanto con unos ruidos que se escuchaban desde la habitación de Camilo. Voy corriendo como puedo y no era nada, estaban muriendo de risa los dos. Pensé que les estaba pasando algo o estaban haciendo algo. Trate de dormirme un rato mas pero no pude, entonces abrí mis libros y empecé a hacer tarea. Es increíble que en matemática también existan letras, es un sufrimiento, pero algo se, se bastante. 20 minutos después termine mi tarea y estudie un poco de historia.

Ya tenia hambre, baje por un paquete de galletas o un taper algo para comer o unas papas en bolsa. Agarre unas papas y cuando estaba por subir las escaleras, escucho el timbre bajo lo que había subido y abro la puerta era.. era Katelyn y su padre. 

-¿Que tal?.- pregunte sin interés.

-Hola Melissa.- dijo el padre de Katelyn.

-Es Caroline..- le corregí.

-Am.. , claro, lo siento.- dijo el mirando a Katelyn mientras ella reía inocentemente.

-¿Que se les ofrece?.- pregunte.

-Venimos a buscar a Camino.- dijo su padre.

-Amm.. claro. -dije y agregue.- ¿como es su nombre?.- 

-Felipe, Felipe Edwards.- dijo 

-Claro.- dijo guiándolos hacia el cuarto de Camilo, mi hermano.

Toque la puerta y al segundo vino el a abrirla.

-Am.. hola- dijo agitado y despeinado.

-Hola.- dijo el Felipe un poco molesto. 

-¿Nos dejarían un minuto a solas con Camino?.- pregunto Felipe.

-Cla-Claro- dije mordiendo una papa.

-Tu también Katelyn.- dijo el mirando de reojo.

-¿Yo?, ¿pero porque yo?.- pregunto Katelyn.

-Baja por favor.- le dijo.

Bajamos todos las escaleras menos Felipe y Camino. Me senté en mi cocina y Katelyn por podía dejar de mirar mis papas y no me resistí a ofrecerle, no se si con la mirada quería hacer contacto visual o algo por el estilo.

-¿Quieres?.- pregunte alzando la bolsa de papas.

-Si.- dijo ella desesperada y agarrando el paquete como una loca y comiendo como una. La mire por un rato, no le dije nada. Se metía las papas como una desesperada en la boca hasta que se acabo el paquete.

-Am.., toma gorda.- me dijo.

-Si.. yo soy la gorda..- dije.

-Claro que tu eres la gorda.- me dijo mientras yo tiraba el paquete de papas al tacho de basura.

-Te comiste mis papas como una loca..- le dije tratando de hacerla entender.

-Si pero mira tu cuerpo, eres una gorda llena de grasa y comida.- dijo mirándome con asco.

-Físicamente soy una gorda en cambio tu eres una gorda mentalmente.- le dije y antes de que ella hablara agregue- Además prefiero ser esto antes que una adolescente con huesos y sin piel maso menos, una que tenga que usar talle de niñita o se tenga que hacer su propia ropa, porque no existen talles que ella usa.-

-Tu también te tienes que hacer la ropa, que no te ves, eres una bola.- me dijo.

-Claro, una bola de demolición , soy como una "Wrecking Ball", no?.- dije riendo y bromeando a la vez.

-Si eso eres.- me dijo ella despreciándome.

Asentí.

El padre de Katelyn bajo como un loco con los ojos llenos de lágrimas y rojos y grito:

-Katelyn nos vamos en este momento, ¡Nunca mas nadie entrara a esta casa!.- 

-Mejor para mi..- dijo dando un paso largo.

-Adiós "Wrecking Ball".- me dijo y luego ya en la puerta me grito.- No te pareces ni un poco a Miley Cyrus ella es flaca y linda tu eres gorda y fea.-

-Adiós huesos.- le grite y pude ver que su sonrisa se esfumo así que me arrepentí y agregue.- lo lamento.- pero creo que no me escucho.

Cerro la puerta de un portazo.

Me sentí muy mal al decirle eso. Me sentí muy mala persona, si ella me dijo eso y muchas cosas mas, pero me dio un poco de pena y eso no me gusta.

Lagrima† Libro #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora