Cry (KrAy)

Parte I

Kris volvía a casa luego de un duro día de trabajo... Bah, no exactamente, porque antes había tenido una muy buena ronda de sexo con su puta favorita: Park Jimin. Al abrir la puerta no se encontró con nadie y eso causó que la furia hirbiera en su sangre, ¿Acaso esa maldita zorra se había acostado con otro hombre mientras él trabajaba? Oh no, eso arruinaría su reputación. Salió del lugar con el objetivo de buscar a su esposo, cuando vió de reojo por la ventana de su vecino (del frente) a la persona que buscaba. Oh si, Lay estaría en muchos problemas. Caminó con pasos largos y rápidos hacia el otro extremo de la calle y tocó el timbre de Suho, quién abrió la puerta con una radiante sonrisa, la cual Kris no correspondió.

- Señor Wú, buen día.- soltó alegremente.- ¿Qué desea?.

- ¿Está Lay?.- preguntó de forma brusca y descortés, algo que causó una mueca a Myeon.

- Si, espera un momento, ya lo llamo.- en sus labios volvió a formarse una sonrisa para luego dirigir su cabeza hacia la casa y gritar un "¡XìngXìng, te buscan!", poco después se escucharon pasos dirigiendose a la entrada. Cuando el susodicho vió quien lo esperaba allí casi da un brinco, miró el reloj de su mano derecha a lo que su miedo creció aún más: se había entretenido hablando con Suho demasiado tiempo y no le había preparado la comida a su "FanFan" (un apodo que lo decía en secreto, pues su esposo lo golpeaba cada vez que lo escuchaba). Otra razón para temer era que lo había encontrado con las manos el la masa; Kris no quería que hablara con alguien más que no fuera Jimin.

- K-Kris... Hola.- murmuró con el terror calándole los huesos, no saldría ileso de aquella situación.

- Vámonos.- el mayor ignoró el saludo temeroso del chico al que había jurado amor eterno, cosa que no le tenía, y lo tomó bruscamente de la muñeca llevándolo a rastras hacia el otro lado de la calle.

- ¡Adiós Myunnie!.- el menor le dirigió una sonrisa torcida a su amigo (una muy falsa para el gusto de Suho), mientras que el Wú gruñía por el estúpido mote.

Kris hizo el agarre a la muñeca de Lay más fuerte y en cuanto llegaron al infierno del menor (es decir, su casa) empujó el cuerpo de su esposo al sillón, donde Yì Xìng cayó acostado y fue acorralado por el activo de la relación cuando intentó sentarse.

- Hoy estaba de buen humor.- soltó furioso, quitando/rompiendo la camisa del menor.- Iba a llegar a casa, comer y luego dormir.- frunció el ceño jalando los cabellos del menor, quien contenía las lágrimas: sabía lo que venía.- ¡Pero claro! La regalada quería abrir aún más su ano ¿No?.- un puño impactó en la mejilla del peli-marrón al negar con la cabeza.- ¿Te atreves a contradecirme? ¿A mí?.

- FanFan...- soltó el mote involuntariamente.- Te le explicaré... No es como crees.

- ¿No?.- una mueca burlona se instaló en el rostro del susodicho.- No me importan tis explicaciones, me darás sexo; quieras o no.

- FanFan... Por favor.- explotó en lágrimas.- Te lo explicaré primero, luego puedes hacerme lo que quieras.

- No, pequeña puta.- Kris se quitó sus pantalones y ropa interior para luego meter su pene en la boca de la persona a la que había jurado no lastimar.- Lámelo.- soltó un gemido.- ¡ASÍ! ¡OH, JODER, LO HACES TAN BIEN! ¡QUÉ ZORRA ERES, DEMONIOS!.- empezó a embestir la boca del menor hasta correrse y obligar a tragar su semen.

- FanFan, para.- murmuró el menor sin fuerzas, sobresaltandosé al sentir como sus prendas inferiores eran quitadas.- Por favor...- no pudo decir más ya que sintió un fuerte dolor en su ano: Kris lo había penetrado.

- ¿"Por favor"?...- soltó un gemido.- Eres tan estrecho...- ¿Y qué esperaba? Hace meses que no tenía relaciones sexuales con alguien.

- ¡NO SEAS TAN CELOSO!.- sollozó el menor.- ¡SUHO Y YO SOLO SOMOS AMIGOS!.

- ¿Celoso?.- soltó una mezcla entre un gemido y una risa.- Hacía ya tiempo que no te amo, me das asco.- salió de su enterior para volver a arremeter brutalmente, haciendo que algo de sangre y pre-semen salieran.- Maldición.- susurró para luego correrse. Al pararse observó asqueado el cuerpo desnudo, tembloroso y lleno de moretones que yacía en el sillón.- Me iré con Kristal, cuando vuelva quiero todo limpio y la cena.- soltó vistiendose.

- Bien.- asintió el menor con voz quebrada viendo como su FanFan se iba sin cerrar apropiadamente la puerta.

"- ¿Celoso?.- soltó una mezcla entre un gemido y una risa.- Hacía ya tiempo que no te amo, me das asco."

Lay se abrazó a si mismo reprimiendo un sollozo; había aguantado los golpes, violaciones, engaños e insultos por nada. Se dió una bofetada mental por ser tan estúpido, era demasiado poco para Kris, era obvio que se sentía asqueado por estar atado con un inútil, era obvio que no lo amaba. Pero aún así... Aún así había tenido una pequeña (muy, pero muy, pequeña) esperanza de que su FanFan lo quisiera. Pero era imposible: Wú era oro y Lay menos que basura. Se paró con mucho esfuerzo, sintiendo el semen y la sangre deslizarse por su pierna, a preparar la comida. Paró al frente de la estufa, que en la pared tenía unas herramientas para cocinar: cucharones, espátulas, cuchillos. "Cuchillos" se repitió mentalmente, una idea pasó por su mente...

[CUATRO HORAS DESPUÉS: HOSPITAL SANTA MARÍA](?)

Un lindo joven adulto despertó confundido en una camilla, tenía vendas en la muñeca derecha, recordatorio de lo que había hecho horas antes. Luego de unos segundos se dió cuenta de que estaba en un hospital, a lo que sonrió amargamente: era tan inútil que hasta falló en acabar con su vida. Sus pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de una puerta abrirse, donde se encontró con el cuerpo de FanFan y un doctor, el primero lo mataba con la mirada.

- Señor Wú.- habló el doctor al ver que su paciente había despertado.- ¿Qué sucedió? Su vecino, Kim Jun Myeon, lo encontró desangrandose en la cocina de su casa, tiene indicios de maltrato y violación.- el menor en ese momento entendió el por qué su esposo le miraba de esa forma: 1) había dejado un charco de sangre, y 2) Suho lo había encontrado, seguro estaba pensando cosas diferentes a las que pasaron en realidad.

- ... FanFan salió de casa pues tenía una cita de trabajo.- comenzó la mentira agachando la mirada.- Todo estaba bien hasta que llegó un ladrón a la casa, me violó y golpeó en varias partes.- levantó la mirada por un segundo viendo expresiones diferentes en cada rostro; en los dos una palpante sorpresa, pero la del doctor tenía mueca de preocupación mientras que Kris estaba complacido con la mentira. A Lay le pareció irónico que un desconocido se preocupara más por él que su esposo, con quien tenía 12 años de relación (3 de novios, cuando rompieron pasó 4 años para que volvieran, ese mismo año le pidió matrimonio, así que 5 años casados).- Me pegó un golpé en la cabeza así que fingí estar muerto y él huyó.- soltó un suspiro conteniendo las lágrimas: si tan solo supieran la verdad.- Cuándo me levanté me sentí muy mal e intenté suicidarme.

- Ya veo.- murmuró viendo a su paciente.- Mis condolencias, los dejaré para que hablen.- el doctor cerró la puerta tras de sí a lo que Kris se acercó a la camilla de su pareja.

- ¡Ja! Que bien te inventas las mentiras, ¿Cuantas me habrás dicho y yo te creí como un tonto?. Así que apenas me fui llamaste a tu "Myunnie" ¿No? No sabía que te gustaba el sadomasoquismo, ¿Eh? Putit...- antes de que el mayor dijera más cosas, el pelimarrón lo interrumpió con tres palabras que lo hicieron ensanchar su sonrisa.

- Quiero el divorcio.- dijo secamente.

- ¡Vaya! ¡Claro que si! Hace tiempo estaba pensando en pedírtelo, ya vuelvó con los papeles, seguro JungKook está desocupado.- y sin más palabras, dejó solo a Lay.

¡HOLA! ¿Les gustó el capítulo?... ¡ESPEREN! ¡¡CON LAS ANTORCHAS NO!! *sale corriendo*