Cap. 5

184 16 6
                                    


Desde el momento que Yami vio a Yugi no pudo dejar de pensar en cómo sería someterlo, que derramará lágrimas, que suplicará por su vida. Sin embargo, era algo que no podía hacer, no cuando aquel chico era propiedad de su jefe y camarada. Si quería su vida todavía no debía tocar a ese chico similar a él.

Pero una vez que se escapó dió inicio a su gran idea. Tráerlo de vuelta y en el proceso divertirse con él.
Estaría justificado, después de todo Niirg dejaría que le hiciera lo necesario por traerlo de vuelta a sus garras.

Daba gracias que su plan fuera ejecutado perfectamente, quién diría que cambiar la azúcar por la sal sería el detonante perfecto para que Niirg le diera pase libre al escape de su pequeña presa. El haber informado que se fue por la parte de la entrada de la mansión fue fácil, nadie dudaría de su palabra al ser la mano derecha de su jefe.

Pero lo que le fascinó más fue la destreza y desesperación del pobre idiota al querer salir de aquel lugar, sin saber que estaba firmando su pena de muerte.

Todo había salido de acuerdo al plan, que aún dudaba que fuera real y no un sueño del que despertaría en segundos.

El encontrarlo fue difícil, más al no conocer mucho de él, pero no fue una odisea o un verdadero reto. Sabía que no pudo ir lejos, no teniendo vidrios incrustados en sus pies y todo su cuerpo lastimado.

No sé preocupó cuando llegó a la casa de los Kaiba, sabía que era una posibilidad y debía ver si Yugi no había abierto la boca contando todo. Lastimosamente así fue, pero no importaba, eran guajes del oficio después de todo. Si atrapadan a Niirg él ya estaría muy lejos con su presa, no dudaría en cortarle la lengua y romperle los dedos a su camarada si veía que este lo podía acusar con la policía. Después de todo así era la vida de una persona como él.

Debía cuidarse siempre la espalda, no confiar al cien por ciento en las personas, menos en alguien como Niirg.

Pero estar siempre cuidando de su vida, no significaba que no pudiera divertirse de vez en cuando.

Por eso ahora se encontraba mirando detenidamente al dulce ser que se encontraba durmiendo en aquel cuarto de aquella mansión. Sé lamió los labios, no podía esperar a divertirse con él.

Sin dificultad se fue del lugar, debía jugar bien sus cartas, por mucho que quisiera llegar, matar a todos y llevarse a su lindo premio no podía hacerlo, no sí quería que el juego fuese divertido y más largo.

Sonrió para sí mismo, necesitaría ayuda si quería que todo lo que estaba planeando resultará a la perfección. La mañana sería muy movida para el, pero era lo que quería y por todo los diablos, el tendría su premio al terminar el juego.

Pero, sin que el lo supiera, otra persona tenía planes diferentes, planes que podrían perjudicar el final de su juego.

Continuará...

***********************

Bueno, corto, pero quería darle protagonismo a Yami ya que será vital para esta historia.
No sabía si seguirla o no, pero todos sus comentarios me ayudaron a completar este capítulo, muchas gracias por todo el apoyo y perdón por tan poco UnU.

Bueno, espero que les guste el capítulo y nos vemos luego.
Bye bye :3

Cadenas de deudas.Where stories live. Discover now