sheets ↬kookmin [국민]

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—¿Cuándo preparaste todo esto? —preguntó JiMin con asombro sentado frente al banquete que había en la mesa.

—Jin me ayudó con todo —le sonrió JungKook.— cuando nos fuimos dejé la puerta trasera abierta para que él entrara y preparara todo.

A pesar de que todo se encontraba espectacular, sentía que olvidaba algo.

—¿Jin? Vaya, ¿TaeHyung está fuera de casa? Es raro que no hayas acudido a él —dijo JiMin tranquilamente sentándose.

JungKook casi pega un grito muy poco masculino al recordar lo que había hablado con TaeHyung.

Diablos, el regalo. Pensó.

—¿Te encuentras bien cariño? —preguntó JiMin viéndolo con geniuna preocupación.— te pusiste pálido.

—¿Pálido? ¿Yo? Pfft, somos Coreanos, todos tenemos tez clara —dijo intentando desviar su pregunta principal y con una sonrisa burlona agregó.— todos excepto NamJoon.

—¡JungKookie! —le reprochó JiMin aguantando la risa.

—¡Niegalo! —lo retó aguantando la risa también.

Ambos estallaron a carcajadas debido a la respuesta inexistente de JiMin.

—

Ahora sí JungKookie, ¿qué sucede? —preguntó JiMin poniéndose de pie y arrodillándose a su lado. JungKook tomó sus manos y suspiró para luego hablar.

—Quería darte un regalo por nuestro aniversario, pero olvidé comprarlo. Quería que fuera inolvidable y darte algo que fuera igual de valioso que tú, pero ni si quiera puedo hacer eso por mi cuenta —bajó la mirada apenado por confesar que dependía mucho del pelinegro.

—Pero JungKook… —JiMin levantó su mentón haciendo que lo mirara a los ojos.— no hace falta ningún regalo, tengo suficiente y de sobra con tenerte a mi lado. Eres todo lo que necesito para ser feliz —besó su nariz, luego su frente y sus mejillas, para finalizar en sus labios. JungKook acuñó su rostro con sus manos, acercándolo para profundizar el beso.— No te culpes por no haber comprado un regalo, tú eres el único regalo que quiero.

A ese punto JungKook tenía los ojos cristalizados y estaba haciendo lo posible por mantener sus hipidos al mínimo. Nadie que no fuera JiMin lo había tratado con tanto amor y cariño antes, adoraba demasiado a su novio.

—Eres un completo ángel JiMinnie, ¿qué hice para merecerte? —JungKook se arrodilló junto a él y se fundieron en un cálido abrazo por mucho tiempo, tanto que la comida recién preparada se enfrió, ya recibiría el sermón de SeokJin luego, ahora esstaba totalmente concentrado en lo bello que era JiMin con él.

Esa noche durmieron juntos, como siempre, abrazados. Se quedaron despiertos hasta tarde entre risas y mimos.

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