De persecuciones y hermanos celosos ✧ ym ➺ omegaverse

¡Cinco!: omegas presionados y alfas encantadores.

La gran mayoría de los alfas eran unos idiotas controladores llenos de testosterona que creían que por tener la capacidad de controlar a seres "inferiores" podían hacerlo cuando se les pegara la gana, su padre no era la excepción a la regla y agradece muchísimo conocer a uno como YoonGi que lo hacía pensar que el mundo no estaba tan jodido.

Casi como una señal, su teléfono celular empezó a sonar sobre la mesa y la foto de un YoonGi dormido con la papada en todo su esplendor apareció. Sonrió por la foto y presionó «contestar» para después colocar el altavoz.

—Hol...

—¡Me acaba de pasar la mejor cosa del mundo! —Nam frunció sus cejas y abrió la boca para responder pero fue nuevamente interrumpido—. Bueno, no me acaba de pasar así recién, digo, tuve que llegar a mi casa para tomar mi celular y llamarte. ¡Pero técnicamente sí acaba de pasarme!

—Yo estoy bien, gracias por preguntar —continuó comiendo.

—¡Eso no es lo importante ahora, NamJoon! —el omega se rió y tomó una porción de su comida, luego hizo una mueca porque le faltaba sal—. ¿Vas a adivinar?

—No lo sé —el peli-rosa se levantó y tomó un poco de sal, esparciéndola por el omelette y volviendo a sentarse—, ¿te conseguiste un boleto de lotería ganador? —metió una porción a su boca, ahora si sabía bien.

—¡No! ¡Mejor!

—¿Qué puede ser mejor que un boleto de lotería ganador? —nada, con eso se podría largar de Seúl hasta L.A y vivir feliz.

—¡Park JiMin! ¡Eso es mejor!

—Ah, creo que ya sé por dónde va esto —empezó a picar el omelette en trozos pequeños para comérselos luego—, ¿qué? ¿Lo viste más de cerca esta vez?

—Nop~ —canturreó—. Él se me acercó y me regaló un poco de agua, se disculpó por lo de ChanYeol y me dijo que quería conocerme y... yo estaba derritiéndome ahí mismo.

—Ya veo —asintió mientras comía.

—Sí, y luego hablamos y... y es tan lindo, la puta madre —se escuchó un lloriqueo.

—Entiendo. ¿Qué más? ¿No le confesaste tu efímero amor por él por accidente o algo así? Cuéntame algo para burlarme.

—Primero, mi amor por él no es efímero, nos vamos a casar en serio —Nam sonrió por lo tonto y tierno que había sonado eso—. Segundo, no, no lo hice. Y tercero, deja de reírte con mi sufrimiento.

—Dejar de burlarme de tu sufrimiento pasará cuando dejes de ser tan tonto, cosa que veo imposible —apartó su plato vacío y tomó el celular—. ¿Eso querías contarme?

—¡Sí! —contestó con orgullo—. Se lo iba a contar también a HoSeok pero su celular estaba apagado y mi mamá no es muy de escuchar mis historias amorosas, ya sabes, así que tú fuiste mi última opción.

—Auch —se rió mientras caminaba hacia su cuarto, el plato yacía en el fregadero y sus ganas de dormir aumentando por la reciente comida—. Ser la última opción de alguien es doloroso.

—No lo tomes a mal, tú tampoco eres amable cuando te hablo de JiMin —casi se pudo imaginar a su amigo hacer un puchero, estaba haciendo esa típica voz y por ende sus labios se estiraban aunque no se diese cuenta—, así que por eso eres mi última opción en casos como estos.

Nam se recostó en su cama con un suspiro cansado.

—No es divertido cuando sólo dices cosas referentes a lo perfecto omega que es o no sé qué más —se encogió de hombros—. Eres molesto, pero eres mi amigo así que te soporto igual.