「mi hogar」 「joerick」 「terminada」

Parte 27 - Final.

Llevaba dos meses saliendo todos los días en busca de un trabajo sin tener éxito y justo cuando estaba empezando a perder las esperanzas, pasó frente a la cafetería y vio el anuncio.

Joel sabía que Erick buscaba cualquier tipo de trabajo, pero se sentía explotar de felicidad al saber que su chico había logrado conseguir un trabajo haciendo lo que amaba.

El escritor debía admitir que estuvo apunto de ir a la cafetería para hablar al gerente y lograr de alguna manera que le diera el trabajo a Erick, pero nunca lo hizo porque sabía que su novio era capaz de conseguir todo lo que quisiera y además de que el ojiverde lo odiaría de por vida si hiciera algo así alguna vez.

"Sabía que lo lograrías, bonito." murmuró Joel pegando sus labios en la mejilla caliente del menor y dejó un beso.

Joel abrió los ojos y vio que Nora y su jefe se habían alejado unos cuantos pasos para darles privacidad.

"¿Quieres ir a cenar para celebrar?" preguntó Joel y picó un beso en los labios del menor tan pronto el chico sacó su cara del cuello del mayor.

"¿Y si mejor vamos a casa, pedimos express y nos echamos a ver películas con Pequeñín?"

Joel sonrió grande al escuchar las palabras del menor y lo volvió a atraer en un abrazo.

"Lo que tu quieras, bonito."

~

Tres películas después y una caja de pizza vacía sobre la mesita de la sala, se encontraban Joel y Erick acurrucados en el sofá con una cobija cubriendo sus piernas entrelazadas y los créditos de la última película rodando en la pantalla frente a ambos.

En el lugar solo se escuchaban las respiraciones tranquilas de ambos, los ronquidos de Pequeñín durmiendo sobre las pantuflas tiradas de Erick y la suave música de los créditos.

Erick se encontraba abrazando el torso de Joel y tenía su mejilla apoyada en el pecho del mayor.

Joel tenía sus brazos rodeando al menor y su naríz estaba hundida en el cabello negro de Erick, aspirando el aroma de su shampoo y aquel aroma único de Erick.

Con los ojos cerrados, Joel recordó lo que era su vida hace casi tres meses y lo mucho que había cambiado.

Como se habían cambiado sus tardes solas en el apartamento por tardes de películas con el amor de su vida entre sus brazos.

Como antes escribía frente a su computadora por horas hasta que el ardor en sus ojos lo obligara a detenerse, pero ahora lo que lo devolvía a la realidad eran masajes en sus tensos hombros y besos en su cuello.

Como su cocina pasó de ser un lugar inhabitado e impecable a un lugar lleno de risas, experimentos y desastres de comida.

Con un suspiro, Joel apretó su agarre en el menor y lo apretó a su pecho.

'Algún día me casaré contigo.' pensó Joel y suspiró una vez más.

"Eso espero." escuchó Joel a Erick decir y arrugó su frente.

"¿De qué hablas?" murmuró Joel sin abrir sus ojos.

"De que espero que sí nos casemos algún día." dijo Erick y Joel abrió los ojos de golpe, sentándose de un salto y atragantándose con su propia saliva.

"¿Qué—?"

"Parece que alguien pensó en voz alta." dijo Erick sonriendo y con sus mejillas sonrojadas. Joel solo lo miró con los ojos muy abiertos y su boca abierta en una pequeña 'o'. "Acabas de decir que algún día te casarás conmigo y yo te respondí que espero que así sea."

"Bonito, estás muy joven para hablar de esto—"

"¿Cuándo nos volvió a importar la edad en esta relación?"

"Erick—"

"No, amor." interrumpió Erick una vez más a Joel y se quitó la cobija de las piernas para arrodillarse en el suelo, entre las piernas del mayor. "Te amo."

"Sabes que también te amo bonito pero no—"

"Mi amor, ¿quieres casarte conmigo?" preguntó el ojiverde sin tapujos y Joel sintió su pecho apretarse.

"Erick qué—"

"Respóndeme, Joel."

"Por supuesto que quiero casarme contigo pero—"

"Y yo también quiero casarme contigo." interrumpió Erick y tomó las temblorosas manos del mayor entre las suyas. "Esta es la propuesta de matrimonio menos romántica de todas y ni siquiera tengo un anillo, pero quiero que seas mi prometido y que el mundo sepa que eres mío. Pase lo que pase en un futuro, yo solo quiero estar contigo por siempre. Quiero que pasemos la vida juntos y adoptar otro perrito. Quiero leer todo lo que tengas para escribir y que escuches todo lo que yo tenga para cantar." la voz de Erick se empezó a quebrar y Joel sintió como se formó un nudo en su garganta y sus ojos se aguaron. "Me viste cuando no era más que una basura para el mundo, me salvaste la vida y me enamoraste en cuestión de horas. Te ganaste mi corazón desde aquel momento en que te fuiste corriendo entre tropezones para comprarme un té y quiero seguirme ganando tu corazón durante toda mi vida."

Las lágrimas nublaron la vista de Joel y la parte sensata de su cerebro le gritó que debían esperar para comprometerse, que no llevaban ni medio año de conocerse y que Erick era demasiado joven.

Pero Joel sabía que había encontrado al amor de su vida, había encontrado su hogar, había encontrado a su persona y quería que el mundo lo supiera.

"No tienes que ganarte mi corazón." respondió Joel y sonrió grande mientras que por sus mejillas caían las lágrimas. "Mi corazón siempre ha sido tuyo. Por supuesto que me casaré contigo."

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Sé que les dije que habría un epílogo, pero estoy bastante segura de que con este final ya cierro por completo la historia.

Y lo siento, no hay smut porque la verdad no me gusta mucho escribirlo y apesto haciéndolo, lamento decepcionarles...

Nos leemos en otra historia amores ✨