Lugar misterioso

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Narrado por Raquel

Llevamos bastante rato caminando, Stone nos mete por sitios muy estrechos y oscuros, por un momento pienso que es un asesino y en el momento más inesperado me sacará un cuchillo. Pongo toda mi confianza en él, aunque no se si hago bien.

-¿Cuánto falta para llegar?- se queja Glowen a mi lado como si fuese un niño pequeño.

-Para ya de quejarte, solo dos calles más y llegamos.- me río al pensar que esa frase la dijo hace 5 minutos, me miran raro pero paso de ellos olímpicamente.

Nos hace subir por una escalera de emergencia hasta llegar a lo más alto del edificio. Una vez arriba se observa todo Madrid desde aquí, es un simple tejado con unas vistas magnificas.

-¡Wow!- suelto involuntariamente.- Es precioso.- contemplaba un mar de edificios, unos más altos que otros, hoy era un día que hacia sol todo y que habían unas pequeñas nubes que decoraban el cielo azul.

-Lo descubrí el otro día, después de nuestra discusión.- explica el castaño mirando a su mejor amigo.- los mejores momentos son al atardecer, pero por la mañana no están nada mal.

-Es un buen lugar para sentarse y pensar.- hablo yo para intentar cambiar el tema, cosa que es imposible.

-Es lo que hacía yo.- responde Stone mirando al suelo.

-Gracias- suelta Glowen de la nada. Álex y yo nos miramos extrañados.- por ayudar al bobi con las magdalenas, creo que la hubiese liado en su casa.- en ese momento cojo aire, al parecer no respiraba desde hace rato.

-No hay de que, ha sido un placer juntaros otra vez.- le sonrío de forma tímida y él me devuelve el gesto.

Estuvimos un rato considerable hablando, sobretodo era Glowen el que me preguntaba cosas, la verdad es que se crea un espacio bastante cómodo cuando estas con ellos dos.

Todo el tiempo lo pasamos riendo, ellos dos son exactamente como en los vídeos. Yo pensaba que ponían un filtro a la hora de grabarse, no sabia que ellos mostraban 100% su personalidad.

 -Se va haciendo la hora de comer- dice Álex mirando el reloj del móvil.

-La verdad que me comería un jabalí entero.- comenta Glowen.

-Pero si no lo has probado.- le contradice su amigo. "Es un decir" responde él.- Será momento de irnos ¿Queréis comer en mi casa?- al acabar, veo que Glowen me mira de reojo y se que su mirada dice "¿Pero que haces tío?", disimulado no es.

Entiendo que no quiera que vaya a su casa es demasiado pronto, no me conocen lo suficiente para saber si soy una acosadora.

-No, me espera mi familia en mi casa pero gracias.- Stone me sonríe y se levanta del suelo dando señal de que nos vamos ya.

-Yo tampoco voy, he quedado con Sayoyyi, a la tarde grabaremos un vídeo.

De camino para el punto de salida, Stone me agarra del brazo para quedarnos atrás y me susurra.

-Si quieres puedes venir a mi casa, a mi no me importa.- me parece un acto muy tierno por su parte, pero no se que hacer.

-¿Por que confías en mí?- le susurro de vuelta, se que es una pregunta fea, por decirlo de una manera, pero es lo único que se me ocurre.

-¿Y por que no?- me responde él, no me esperaba esa respuesta sólo sonrío un poco y asiento a la vez que digo "Si que voy".

Continuamos todo el camino hablando de cosas varias, sobretodo de Breaking Bad; Glowen y yo tenemos pensamientos muy diferentes sobre los personajes cosa que hace que el tema de conversación se alargue. 

Una vez nos despedimos de Glowen le envío un mensaje a  mi madre diciendo que no voy a comer, le digo que voy a casa de un amigo, ella me responde con dos simples palabras "Ten cuidado". Mi madre siempre ha sido muy protectora, entiendo que lo sea ahora mismo, no lo conoce pero al menos confía en mí y sabe que no haría cosas de las que no estoy segura.

Stone vive cerca de mi casa, me la esperaba así la verdad, porque vi su house tour no por otra cosa, aunque tengo que decir que es más grande de lo que aparenta.

-¿Y que quieres comer?- me pregunta él entrando en la cocina. 

-Tu sabrás lo que tienes, a mi me gusta todo.

-¡Stoneeee! ¡Ya estas en casa!- se escucha una voz grave que parece venir de alguna habitación del fondo, ya se de quien se trata 

-¡Mickey, ahora no puedo, hay invitados!- le grita de vuelta.

En menos cinco segundos la voz de esos gritos se encuentra al lado mío, con una cara de sorprendido nos damos la mano. Yo intento aguantarme la risa que quiere salir de mí. Mickey esta en un pijama de Bob Esponja.

-Soy Mickey... pensaba que eras algunos de los chicos- dice el rascándose la nuca.- Este pijama me lo regalaron, no veo estos dibujos... me lo pongo por respeto...- se nota que esta nervioso por el tono de voz que tiene así que intento ayudarle.

-Raquel, encantada... No me tienes que explicar nada, yo hasta hace dos días como el que dice lo veía. No te avergüences.- Intento parecer lo más amable posible, la situación se ha vuelto muy incomoda.

-Hablamos luego Stone, pasarlo bien.- es lo último que dice antes de abandonar la sala. Justo en ese momento empezamos a reírnos a carcajadas, Mickey nos grita un "¡Os escucho!". lo ignoramos y nos reímos más fuerte.

-¿Y que quieres comer, por segunda vez?- madre mía que pesado, hasta que no responda no va a parar ¿verdad?

-¿Tienes pasta y tomate frito?- respondo yo dándome por vencida.

- Claro, ¿supongo?- dice el riéndose y contagiándome a la vez. Es imposible no reírse con él al lado.

En menos que canta un gallo me encuentro hirviendo el agua en la olla para preparar mi especialidad, la pasta; en verdad es estos o una "delicatessen de pann" como lo llamo yo, para el resto del mundo es un bocata de toda la vida.

- Que sepas que eres un privilegiado.- le digo con toda la confianza mientras miro el agua.

-Y eso ¿Por qué és?- Me responde él bastante inquieto.

- Nos conocemos de dos días y me tienes aquí haciéndote mi especialidad culinaria.

- Eso lo tendré que aprovar yo, una vez taste la pasta- al acabar eleva la barbilla dando simbolo de superioridad. Pensaba que ya me conocia.

- Mira si cuando quieres hablas culto y todo.- respondo yo, Álex solo rueda los ojos y se ríe de mi comentario.

Mientras hago los últimos retoques a los platos veo como Stone pone la mesa, no para de dar vueltas, le cuesta llevar más de dos cosas a la vez...

- Se que la habitación no es verde y esto no son macarrones, pero... estas conmigo y con él de fondo.- en ese instante puedo escuchar la melodía de A little too much, mi querido Shawn.

-¿Como sabias que esta era mi canción favorita? No recuerdo haberte lo dicho.

- En ocasiones leo mentes...- en ese momento empiezo a reír,  no se si fue por el tono misterioso que le ha dado a su voz, o simplemente porque es él.

-No puedes canviar la frase de El sexto sentido y ponerla a tu manera.- río aun más fuerte pero esta vez me acompaña.

¡Hola bobitos!

Ya tenéis otro capítulo, intentaré estar más activa. Últimamente me han venido bastantes ideas asi que las quiero escribir antes de que se me olviden. Me quiero poner como reto subir un capítulo a la semana. ¿Lo conseguiré?

Cada domingo una nueva parte

mRAQUELf

Stowen y yoKde žijí příběhy. Začni objevovat