La hija de supercorp

azul

-Parece que la piedra azul funciona después de todo -comentó Larissa- pero no es un gran momento para ser invisible. Si me disculpan, voy a llamar a Winn para avisarle de los resultados del experimento

Larissa se alejó a pasó lento de donde estaban sus dos amigas, escuchando como Harriet comenzaba a preguntar sobre dicho experimento a Danielle, la cual le pedía que bajara la voz y procedía a explicarle todo lo que sabía y le pedía perdón por no haberle dicho nada antes.
La rubia salió del salón tranquilamente, ya que nadie la vería, así que pasó por entre la multitud de personas que se encontraban en los pasillos, incluso por al lado de la oficina de la directora, y por último, se acercó a la puerta de la salida. Nadie la había visto en todo el trayecto, o al menos eso había parecido, ya que nadie le dijo nada, así que una vez fuera de la escuela, y luego de haber esperado que alguien la fuera a buscar, corrió hasta la DEO. Larissa vio a Winn sentado en su computadora, y por unos instantes pensó en asustarlos, pero de repente vio a Alex salir de la sala de armas, lo cual le llamó la atención a la rubia.

-¿Winn, hay noticias de Larissa? -preguntó la pelirroja-

-Aún nada -le respondió él sin despegar su mirada de su computadora-

-Si llegas a tener alguna noticia de ella mientras no estoy, le dices que venga a la DEO pero ambos esperan hasta que yo vuelva antes de hacer algo ¿Entendido?

-Afirmativo, ahora vete, que a J'onn no le gusta esperar -respondió Winn-

Larissa pensó en decirle a Alex y a Winn que estaba allí, pero por otro lado, pensó en la cantidad de veces que podría ir en una misión de la DEO y se dio cuenta que la cantidad de veces que ella estaría en una de esas misiones no eran muchas, sobre todo teníendo como madre a Supergirl y de tíos a Guardian, Reign y Alex Danvers.
Ese solo pensamiento fue el que bastó para que la pequeña de ojos verdes decidiera seguir a su tía a su misión. Seguir a Alex fue la parte fácil de todo, el problema fue que no esperaba que su madre y sus tíos estuvieran allí. Eran cinco alienígenas, dos de ellos tenían aspecto humano, mientras que otros tres tenían escamas verdes, tres ojos, dientes afilados como los de un tiburón y sus manos eran garras. Estos últimos parecían tener superfuerza, mientras los otros humanos no parecían ser una gran amenaza. Al menos cuando Larissa llegó.
Ella se acercó a uno de los tres alienígenas extraños a super velocidad mientras era golpeado por Guardian, y ella lo tiró al piso de un golpe a esa gran velocidad. Supergirl y Reign se encargaban de los otros dos, mientras que el grupo de la DEO, el cual era comandado por Alex, se encargaban de
los humanos, más bien de descubrir por qué ayudaban a los alienígenas. De repente, una gran nube se formó sobre el lugar y de esta salieron rayos, los cuales golpearon a todos los heroes, incluso a los de la DEO, menos a Larissa.
Uno de los humanos, la cual era una mujer, y se acercó a Supergirl, la cual se encontraba aún de pie junto a Reign.

-Es curioso como un poco de electricidad afecta a los humanos... Imagínate lo que puede pasar si la descarga eléctrica es mayor

-¿Que es lo que quieres? -preguntó Kara-

-Quiero a la heredera, nuestro pueblo lo necesita -respondió la mujer- Mi reina quiere a la heredera de nuevo

-No se de que hablas -le dijo Kara genuinamente-

-Yo creo que sí... Una cápsula cayó del cielo hace varios años, y logramos rastrear esa cápsula, la cual nos trajo aquí.

Tanto Larissa como Kara y Sam se dieron cuenta de quién hablaba. La cápsula de la que hablaba la mujer era la que había traído a la pequeña Danvers al mundo hacía ya muchos años atrás. Larissa era la heredera.

-No la llevarás a tú planeta, ella es tan parte del planeta tierra como cualquier otra persona -dijo Sam-

-Solamente sigo órdenes de mi reina -respondió la mujer-

-Y yo tengo la orden de proteger a todos los habitantes de National City, así que no dejaré que te vayas de aquí con ella -respondió Kara lista para pelear-

La mujer lanzó un rayo de sus manos hacia Supergirl, y está vez si le afectó.

-¿Por qué no la dejas decidir? Puede volver a Dhuskar y ser la princesa, o quedarse entre los humanos.

En ese momento, todos los agentes de la DEO la tenían rodeada y los otros dos hombres tenían esposas especiales. Lamentablemente, la superioridad numérica no afectó a la mujer, ya que creó una muro de electricidad, el cual no dejó pasar a nadie, al igual que no dejó salir a nadie.
Reign intentó golpear a la mujer, pero esta también le lanzó un rayo, el cual le dolió.

-Lo diré una vez más, y sólo una vez más... ¿Donde.Esta.La heredera?

Larissa se acercó a aquella mujer y la tomó del cuello, haciendo que la mujer dejara de torturar a las kryptonianas.

-No la busques, ella no irá contigo, ahora vete a tu planeta y no vuelvas

La rubia le dió un golpe con electricidad  en el corazón, lo cual desmayó a la mujer

-¿Quien está ahí? -preguntó Kara-

Alex se acercó a las mujeres y puso su mejor sonrisa de arrepentimiento y abrazó a Kara.

-Puede ser que Larissa fuera a la DEO en el almuerzo y la piedra azul la volviera invisible -respondió Alex algo nerviosa-

-¡¿Que Larissa qué?! -Exclamó Kara enojada-

-Y la seguí a Alex desde la DEO hasta aquí -respondió la chica de ojos verdes-

-Ya hablaremos de esto, ahora llevemos a todos estos a la base, no queremos dejar al muerto aquí

-No la maté, paralicé su corazón momentáneamente -respondió la pequeña Danvers a la defensiva-

-Entonces llevemos a la señora a una celda

...

La mujer despertó en la celda de la DEO, confundida y desesperada. Le habían dado una sola misión y había fracasado, si volvía el rey la mataría.
De repente las luces se encendieron y una chica de cabello rubio y ojos verdes entró en la sala.

-Es a mi a quien buscas -dijo ella- Mi nombre terrestre es Larissa Danvers Luthor

-Princesa -la mujer hizo una reverencia- Es necesario que vuelva

Larissa la observó y comenzó a caminar al rededor de la celda.

-Cuentame sobre Dhuskar y mi familia