Eres mía en cuerpo y alma ✓

Preparativos

-Te estaba buscando - dijo la morena- ya tenemos lista a la modista que te hará el kimono.

La pelinegra se detuvo al instante, de nuevo con los preparativos...

-Quería hablar de otra cosa - rió nerviosa.

-Igual el de Boru...

-No - negó - solo aconsejame que darle para su cumpleaños...

-Ah - tomó asiento y se tocó la barbilla -¿haz pensado en algo?

-Si, pero ya lo tiene todo y si algo le falta lo puede conseguir sin problemas

-ya veo - dijo y miró a la pelinegra - ¡ya se! Seguro le encantará...

-¿Qué? - preguntó  curiosa, por la expresión de su amiga, sabía que iba a ser perfecto.

La Akimichi se levantó y la rodeó mirándola de pies a cabeza - dime...Sarada ¿aún eres virgen?

-¡¿Qué?! - preguntó con un notable sonrojo.

-Lo sabía - se carcajeó - con la escena que encontramos aquel día es más que obvio...

-¡Callate¡ - diji avergonzada.

-El mejor regalo iba a ser tu virginidad, pero como ya la diste tendremos que recurrir a algo mejor- le sonrió con picardía.

Sarada al ver la mirada de su amiga pensó que lo mejor sería darle un reloj.

-¡No, eso si que no! - dijo poniéndose de pie al ver lo que su amiga dejo en el escritorio.

-Tu pediste ayuda - rodó los ojos.

-Pedí ayuda, pero esto.... - negó con la cabeza aún viendo esa lincería en su escritorio - desaste de el - cerró los ojos avergonzada.

-No seas amargada ¡le encantará!

-Yo soy la ho...

-Pero igual serás su esposa - miró la ropa - te quedará bien ¡no se de qué te quejas!

-No podré...

-Creí que nada era imposible para ti - miró sus uñas - que lastima - suspiró fingiendo - pobre Boruto se tendrá que conformar con un reloj...

-¡Chouchou!

Miraba rendida esa ropa, su amiga tenía razón por lo que lo aceptaría, miró curiosa la ropa mientras estaba frente al espejo. Se la pegó al cuerpo y no pudo evitar sonrojarse.

-Sarada ya...

-¡No! - le interrumpió la pelinegra lanzandole lo primero que vió. El control se estampó en la cara de amado ocasionando que se cayera.

-¿¡Qué demonios te pasa!? - gritó histérico con la marca del aparato en la cara. Ella guardó rápido la ropa y fue a verlo.

-Lo lamento tanto - susurró y lo pegó a su pecho - ¡me diste un susto!

-No era para tanto dattebasa

Ella no pudo evitar reir al ver la cara enojada de su pareja, mañana lo compensaría.

En la mañana fue la primera en despertar, miró el calendario feliz.

6 de Diciembre

Lo miró y seguía durmiendo, sin poder evitarlo le dio un beso en los labios - Buenos días - le susurró al sentir que se removía.

-¿Sarada? - la miró y la abrazo - quedáte un poco más - susurró aún adormilado.

Ella rió - nos vemos en la noche - lo beso de nuevo