♡ 43 | Remordimiento ♡

1K 74 5
                                    


43



Acaso es posible arrepentirse cuando no hay alternativa...

-Julianne Moore




Narra Kate

No podía creer lo que acababa de hacer, Zedd yacía inconsciente encima de mí, respirando entrecortadamente, empuje un poco y él cayo a lado de mí, tenía que pensar en algo antes de que despertará y creyera que lo mejor era que yo estuviera muerta.

Sentía todo el cuerpo pesado, me dolían las piernas y los brazos, tenía moretones por todos lados. Quería gritar, pero no podía, una parte de mi decía hazlo, pero mis cuerdas bucales no cedían.

Escuche ruidos en la entrada, me sobresalte, tenía que ser una broma o Isabel había pensado en todo. Tomé el tubo con el cual había golpeado a Zedd y me dirigí sigilosamente al lugar donde procedían los ruidos.

- ¿Qué haces tú aquí? - pregunte a la recién llegada, la había visto una vez con Zedd, cuando me creía detective y me puse a seguirlo- Te llamas Levy, ¿verdad? - aún no estaba segura si iba a ayudarme o era el enemigo, necesitaba saber antes de que Zedd despertara-

- ¿Dónde están todos? - en su mirada pude ver la preocupación- ¿Dónde está Zedd? - cómo podía explicarle sin malos entendimiento que lo había golpeado- ellos me llamaron y...-

- ¿Te llamaron? - tal vez no era el enemigo después de todo, yo solté el tuvo y este sonó estruendosamente- ¿estas con ellos? -

-Claro que sí, son mis amigos y los amigos siempre deben cuidarse- tenía razón, pero algunas veces tenías que hacer lo mejor- dime donde están Kate-

- ¿Cómo sabes mi nombre? -

-Se que ya sabes la historia, puedo ver en tu mente... yo te conocía por Zedd, desde antes- no me sorprendía-

-Bueno, es que es una historia muy larga que contar- repase lo sucedido-...Isabel hizo algo que no creo que se pueda revertir- tenía unas inmensas ganas de llorar, Luke estaba perdido y Zedd quería matarme-

Pude ver en Levy esa mirada de preocupación, no sabía si lo que iba a decir a continuación le gustaría, esperaba mi respuesta con sus manos en la cadera.

Estaba completamente vestida de negro a excepción de sus botas, estas eran café obscuro, en realidad no la conocía y no sabía si debía confiar.

-Se que no confías- como siempre viendo dentro de mi-...pero ellos me llamaron, me dijeron que estabas en peligro y que yo era su plan b, tenía que venir a buscarlos, si algo salía mal, yo sería su única salida- se acercó a mí y me todo por el hombro amistosamente- como podría no ayudarlos, si por mi culpa condenaron a Zedd, le debo una-

-Te creo, pero no sé cómo explicarlo... algo les hizo Isabel, entro en sus mentes y planto información falsa, se llevó a Luke y le hizo creer que Zedd y yo teníamos algo- ella alzo una de sus cejas- y... también le hizo algo a Zedd-

- ¿Qué?- se cruzó de brazos-

-Le dijo que me matará... entonces tuve que golpearlo- me oculte el rostro con las manos- yo no quería- unas lágrimas rodaron por mis ojos- pero... iba a matarme sino hacia algo- ya no podía verla a los ojos- lo-lo siento-

-Tranquila, sé que no querías lastimarlo-

- ¿Lo sabes por qué lees mi mente? -

-No, porque sé que lo amas- pero él no era Luke, yo no lo podía amar- o por lo menos tu subconsciente lo sabe, tal vez no te lo conto Zedd pero los ángeles te borraron la memoria, y se cuanto lo querías...pero aún se puede hacer algo, si tú quieres-

En estos momentos solo quería que Zedd regresara, ella pregunto dónde estaba

-Está en la otra habitación- señale la puerta por la que había entrado- dime que puedes arreglarlo- ella no contesto, señal que me hizo pensar que tal vez no podía hacer nada-

Yo la seguí a la otra habitación, ahora Zedd parecía tan tranquilo, como dormido. Ella se acercó y le planto un beso en los labios, algo en mí se encendió.

- ¿Qué haces? - mis cejas se fruncieron-

-Creí que estabas con Luke- me relajé un poco-

-Estaba, a-además estas aquí pa-para ayudarlo- tartamudeaba un poco cuando estaba nerviosa- no para besarlo-





Narra Zedd

Jamás en la vida había sentido dolor como este, me sentía sumido en un sueño profundo, en el cual no era posible despertar.

Las personas dicen que los sueños son los deseos de tu subconsciente, pero tengo muy claro que en mi subconsciente no está el deseo de matar, y menos a alguien a quien quiero.

Me encontraba en el bosque, era tan helado, no podía sentirlo, pero se podía notaba cuando de mi emanaba el humo característico, frente a mí surgía una fila de casas de campaña, tres para ser exacto.

Aunque mi cuerpo no reaccionaba ante mí, si ante Isabel.

Ella me había mandado a destruir el campamento, muy tarde comprendí que ahí se encontraba Kate, Luke y Nicole, mis pies no respondían, y mucho menos mis puños.

No podía hacer nada, quería matarlos, aunque mi corazón me lo negará. Cuando las demandas de Isabel habían sido cumplidas, mis manos estaban manchadas de sangre, junto con mi ropa. Tenía que revivirlos, me arrodillaba ante Kate, la tomaba con mis brazos y la abrazaba con todas mis fuerzas, como había sido posible de matar a alguien a quien amaba, quería despertar del sueño, aunque dentro de este se sentía tan real, en lo más profundo sabía que era un sueño.

No sabía cómo despertar.

Otro sueño apareció en un cerrar de ojos.

Ahora tenía mis alas, pero estas estaban en mis manos, sin color ni vida. Alguien había llegado, con el rostro cubierto y me había dicho como revivirlas, como volver a usarlas.

-Tienes que matarla- la voz sonaba reconocida bajo esa capucha, pero no podía verlo- Mátala Zedd- el hombre se destapaba el rostro y aparecía Luke-

- ¿A quién? - daba todo por volver a sentir las alas en mi espalda-

-A Kate- se me helaba todo el cuerpo, no podía matarla, si por ella había perdido las alas, como era posible tan solo pensarlo. -

siempre la elegiría a ella.

Pero en este sueño mis deseos eran otros.

Yo la mataba con mis propias manos, era un asesino. 

El Chico Raro I - LUKEZELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora