cinco

13 4 0
                                    

Dudando sobre si Pam había descubierto la verdad sobre sus dos misteriosas cartas de confesión llegue a mi casa. Entre con las llaves que mi madre me había dejado, tire la mochila a un costado y fui a la cocina para comer algo liviano debido a mi dificultad para ingerir alimentos pesados.

—Nate, cielo, ven un momento — oí la voz de mi madre en el living-comedor.

Ella se encontraba en el sillón con su habitual taza de té.

—Hay algo importante que debo charlar contigo, amor.

Me senté a su lado apoyando una pierna en el sofa y la otra colgando, la mire a los ojos esperando su comunicado.

—Tu padre estuvo en casa antes de que vinieras, vino a hablar un asunto conmigo. En un año tendras la mayoría de edad y podras hacer lo que tu quieras siempre y cuando quieras hacerlo, recuerda que siempre puedes quedarte en casa. De no der así, tu padre quiere que vayas a vivir con el él año próximo.

»Quizas no te agrade la idea, a mi tampoco me gusta mucho, pero deberías hacerlo por tu padre, se lo merece, es solo un año y luego podras irte o volver aquí, a casa.

Iba a protestar pero me hizo callar instantáneamente. No es que la idea me fascinara, pero no se si aceptaría ir a kilómetros alejado de mi madre. Tambien esta este nuevo logro, el de confesarme a Pam.

Cuando ya estoy avanzando mucho, algo me hace retroceder.

—Tienes tiempo para pensar, hijo. No te estamos pidiendo una respuesta inmediata, pero piensalo bien.

Con un gruñido fui a la cocina, agarre el puré de manzana que había sobrado del desayune y subí a mi habitación.

"Te hechare mucho de menos si decido irme. Extrañare esas miradas rápidas que me das, incluso cuando pasas por mi lado y me sonríes de manera inconciente. No se que decicion tomar, si irme y dejar este asunto de las cartas y admirador secreto en una pausa permanente o seguir con este juego que en algún momento llegara a la verdad de quien soy y te decepcionaras.

Pero esta carta es para ti, así qur algo tuyo debe decir. Fui a un debate en el cual participaste, fue hace 5 años, estaba sentado en la es primeras filas (lugar donde podía obtener una buena vista de ti discutiendo con alguien mas sobre el calentamiento global) también asistí a uno sobre la comida de la cafetería, ese fue  reciente, el año pasado, te dire que llevaba un buso verde oscuro.

Espero estas pistas sirvan de algo.

Tercera razón: cuando discutes te ves ardiente (¿notas como subí la intensidad esta vez?)"

Cinco Cartas, Cuatro Razones.Where stories live. Discover now