Capitulo 4: Encuéntrame, si puedes...

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Con todo el miedo del mundo, tome mi teléfono, y abrí el mensaje... era Emma: -¿Porque tardas tanto?- decía el mensaje. Eso significaba que estaba en un lugar donde había señal, eso me decía que no se la habían llevado a las montañas o algo por el estilo, ¡Ja!, ya era un avance, pero al mismo tiempo, daba miedo. ¿A que se refería con que me estaba tardando mucho?Hasta qué momentos después me llegó otro mensaje, esta vez, no era escrito, era una foto...de Emma. Estaba atada a una silla con la boca cerrada a la fuerza en medio de la obscuridad, no se podía ver nada alrededor de ella con claridad.
Llegó otro mensaje detrás de la foto:
-Tu tiempo está corriendo, si no me entregas lo que quiero, ella muere. Tic toc querida.-decía ese mensaje. Eso me decía una cosa, Emma no era la que había estado mandando esos mensajes, todo este tiempo había sido otra persona, pero...¿Quien?...Era mi deber averiguarlo, y salvarla. Solo tenía tres días.

¿Que era lo que unknown (el nuevo apodo de la persona que había secuestrando a mi mejor amiga) quería? ¿Se habrá llevado a Emma por mi culpa?
-¡Maldición! ¿Que se supone que debo hacer? No sé lo que unknown quiere.-Me dije a mi misma. Después, recordé que tenía un amigo que tenía mucho talento hackeando aparatos, así que me pregunté: ¿Será que con el número que se quedó grabado en mi teléfono de unknown, él pueda hackearlo para saber desde donde mando los mensajes?
No lo sabía, era una posibilidad, aún así, tenía que intentarlo, mi tiempo estaba corriendo, y no podía desperdiciar ni el último segundo.

Subí al auto y me dirigí a la casa de Thomas Brown. Vivía en la calle "Wallstreet", unas calles más adelante de la calle "Fairytale", no vivía muy lejos de donde yo estaba, pero, como ya había dicho, el cielo se estaba tornando oscuro muy rápido, debía apresurar el paso.
Cuando llegué a casa de Thomas, toque su timbre, y no tardo en salir.
No había cambiado nada, se veía casi igual que hace 4 años, que era el tiempo sin vernos. (No se porque no nos habíamos reunido en tanto tiempo, si vivíamos muy cerca uno del otro, en fin.)
-¡Hayley, no puede ser, hola!- Me dijo muy emocionado.
-¡Thomas, cuánto tiempo sin vernos amigo!-le dije, dándole un fuerte abrazo, pues me había dado mucho gusto volver a verlo.
-¡Pero donde están mis modales! ¿Quieres pasar?-Me pregunto un poco apenado.
-¡Claro Thomas! ¡Gracias! Además, tengo mucho que contarte-le dije, con una cara de preocupación en mi rostro.

Cuánto me hubiera gustado haberle preguntado más acerca de cómo le había ido todos estos años, pero debía ser breve, estaba consiente de que me quedaba poco tiempo para recuperar a Emma, así que fui directamente al grano.
-Thomas, me gustaría tener más tiempo para hablar, pero tiempo es lo que en estos momentos no tengo, así que, vine aquí para hacerte una pregunta urgente: ¿Me ayudarías a hackear un número que quedó grabado en mi teléfono?- le pregunté preocupada y con una cara de angustia.
-Claro Hayley, con gusto lo haría por ti. Dame el aparato y déjamelo a mí.
Le di mi celular y le expliqué todo lo que estaba pasando, ahora éramos dos personas que sabíamos de la situación.
Thomas siempre fue un experto con todo este tema, y no tardó nada en hackearlo y en averiguar lo que buscábamos.
-Hayley, lo encontré, encontré la dirección de unknown.-Me gritó emocionado y orgulloso de su trabajo.
-¡Wow Thomas, no haz perdido tu don! Muchas gracias.-le dije emocionada, lo abracé y le di un beso en la mejilla. Después de ese beso, recordé que años atrás, él estaba enamorado de mí ¡Rayos! ¿Porque recordé eso? No me gustaba recordarlo, y no era porque lo odiaba, si no porque cada que lo recordaba, me sentía mal conmigo misma, ya que yo no estaba enamorada de él como él lo estaba de mí en ese entonces...ahora que a pasado el tiempo,¿Seguirá enamorado de mi? No lo sabía, pero con la mirada que me lanzo después de ese beso, empecé a sospechar. Se me acercó, lentamente, sin quitarme los ojos de encima, y sin darme cuenta, trato de besarme. Lo negué, puse mi mano sobre su hombro y lo aparte de mi.
-Thomas...no, esto no puede pasar, no es correcto. Ya tengo un novio ¿Okey? Deberías conseguirte una novia también-le dije, tratando de ser cortes con el, pero en ves de eso, soné un tanto grosera.
Me miro con una cara de desilusión, pero la verdad es que era muy guapo, no podía despegar mi mirada de sus ojos, eran hermosos. Pero eso debía parar, yo ya tenía un novio,Mike, y no podía hacerle esto, sería la peor novia del mundo. En fin, después de ese momento incómodo, volvimos a la realidad.
Me devolvió mi teléfono y me enseñó la ruta que debía tomar para llegar al escondite de unknown.
-Muchas gracias Thomas, fue... un gusto haberte visto de nuevo.-estreche su mano despidiéndome de él, y me dirigí a la puerta.
-¡Espera! Hayley...-gritó antes de que saliera.
-¿Si Thomas?-le pregunté.
-No puedes ir a ese lugar sola, es muy peligroso, ¿que pasará si unknown te hace algo?- Me dijo preocupado.
-Déjame ir contigo, Porfavor, puedo ayudarte a encontrar a Emma.- dijo.
-Esta bien, ven, sube al auto, debemos apresurarnos, nuestro tiempo se está acabando.- le dije, y segundos después, arrancamos.
-Bien, ¿Que ruta tomamos?-le pregunté.
-Okey, van a ser las ocho del a noche, tardaremos 20 minutos en llegar. Aunque no lo creas, Unknown mandó los mensajes desde la calle "Darkness"(una calle digna para realizar este tipo de casos) al norte del pueblo,no debemos tardar mucho en llegar, no estamos muy lejos.
-Bien, hay que apresurarnos-le dije, y aceleramos.

Al llegar, pudimos notar que había una casa que no era normal comparada con las otras. Más oscura, más destruida, no destruida por completo, pero estaba mucho más maltratada que las de
Alrededor, una vez más, una casa digna para realizar lo que unknown había hecho. Bajamos del auto, y nos dirigimos a aquella casa, decididos a darle fin a este misterio que me invadía de los pies a la cabeza. Pero al llegar, recibí otro mensaje de unknown: ¿Creíste que no iba a saber lo que ibas a hacer niña lista? Como si no te conociera bien. Nos vemos pronto...

¿Qué pasó con Emma?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora