O9;

605 41 15
                                    

Perdón por no actualizar. Aquí está otro capítulo. Feliz 2018 <3.

-------------

Marruecos. Una país lleno de historias y paisajes. Es realmente fascinante disfrutar de las cosas que te ofrece este lugar. El paisaje es hermoso así como también su vista desde lejos.

Even y yo habíamos pasado unas Navidades tranquilas, habíamos compartido con nuestros amigos hasta el amanecer. El Fin de Año fue incluso mejor. Pero sin duda alguna, la mejor parte fue cuando Even me sorprendió con un viaje a Marruecos para dos. No quería ser egoista con nuestros amigos y no invitarlos. Pero el quería un viaje para dos, romantico si se podía decir.

Y aquí estabamos, disfrutando de un hotel mientras mirabamos los pequeños cuadros que se colgaban en la pared de nuestro hotel en Marruecos. Todo era tan esteticamente limpio, ordenado y lindo. La combinación que poseía casa rincón de el hotel era muy acogedora. Era el lugar indicado para pasar unos días en paz sin preocupaciones ni remordimientos.

Entramos a nuestra correspondiente habitación y vi como él colocaba sus ojos en cada rincón de donde dormiriamos. Este lugar también estaba limpio, ordenado y con marcos de obras de arte extrañas.

Even me miró con una gran sonrisa en su cara, podía ver su felicidad al instante. Sentía que esto era lo que quería desde hace algún tiempo. Y estábamos aquí, al fin.

- Entonces... ¿que quieres hacer? --dijo mientras colocaba su reloj en la pequeña mesita del dormitorio.

- No sé, podemos ir a la piscina. Si quieres. --dije tratando de no sonar tan evidente, o incluso aburrido.

- ¿A la piscina? Genial. Entonces vamos. --se dirige hasta el baño sin antes depositar un pequeño beso en mi mejilla y cerrar luego la puerta detrás de él. 

Me quité la camisa y solo quedé en mis shorts. Había traído un conjunto ligero y sin necesidad de ropa pesada. Era un viaje, en un hotel. Donde veías sólo piscinas y algo de sol. No podía evitar extrañar el clima de Oslo y su constante frío. Era mi hogar.

Me senté en la pequeña esquina de la cama a revisar mi celular y encontré varios mensajes sin responder. En realidad me lamentaba no haberlo hecho, había dejado a mis amigos en el olvido. O algo así. En realidad Magnus, Jonas y Mahdi se habían acostumbrado a las fiestas junto al Balloon Squad (lo cual era bueno, porque ellos eran geniales) olvidando el pasado.

Me mantenía viendo mensajes viejos, hasta que uno (bastante viejo, de hecho) llamo mi atención.


"21 de Junio, 1999. 21:21. Desde ese instante te amé y te amaré por toda la eternidad."


No pude evitar sentir la felicidad por todas las extremidades de mi cuerpo.
Era un sentimiento tan puro y... verdadero. Esa era la palabra, verdadero. No había ni existían palabras que lo describieran. No pude evitar soltar una lágrima al recordar ese día, dónde me sentía completamente confundido, olvidado y roto. Y aun así, ese mensaje despertó algo muy extraño pero hermoso dentro de mí. Me sentía mal saber que tal vez mi mamá necesitaba ayuda, pero después de todo y aún así, todos la necesitamos.

Vi salir a Even del baño y al ver mi cara, se acercó a mi de forma preocupada, no pude ver mi cara, pero de seguro estaba rojiza.

- Amor, ¿te pasa algo? ¿Sientes algo? ¿Que pasa? --me dijo mientras pasaba su manos por mis mejillas, tratando de que lo mirara fijamente.

- No, nada. Solo me acordé de mi mamá, tengo tiempo sin charlar con ella. --Mentí, en realidad había charlado con ella hace muy poco. Y la verdad, la extrañaba todos los días. A pesar de sus tornillos sueltos.

- Oh, amor. No te preocupes. Pronto lo harás, te lo prometo. --dijo, para luego depositar un profundo beso en mis labios, no pude evitar presionar mis ojos mientras lo hacía. Era una manera de sentir más los labios de Even, los cuales eran fuertes y carnosos. Los labios tan provocativos que tenía. Y sin duda, mi obsesión.

---------

Even hacía pequeñas acrobacias mientras se sumergía en el agua, era realmente tierno cuando se reía mientras lo hacía. En realidad, Even tenía un lado tierno que nadie conocía.

En la piscina se encontraban un grupo de dos chicos y dos chicas, que se encontraban en la orilla de la piscina charlando alegremente. Una chica tenía el cabello corto y negro. Me hacía recordar a una actriz que a mi madre le encantaba. Y otra, poseía una melena rubia, mientras sostenía una copa de vino en su mano. Estábamos alejados de ellos, pero pude ver claramente como eran. Desvié mi mirada de ellos y la fijé en Even, que se encontraba al frente de mí.

- ¿Viste eso? --dijo pasando su mano por su cabello mojado.

- Sí, Even. Lo ví. Gran acrobacia. --dije riendo mientras rodaba los ojos.

- Estas celoso porque no sabes hacerlo. --me dijo, tratando de retarme.

- Claro que sé hacerlo, ¿que me crees? ¿Un tonto? --me reía, haciendome el ofendido.

- Entonces, hazlo. Que esperas. --dijo y sonrió.

- ¿Y que gano si lo hago, eh?

- Lo que tu quieras, bebé.

Bebé. Vaya, eso sonó precioso viniendo de él. Even nunca me había llamado así.

- ¿Lo que yo quiera? Genial. --dije para después sumergirme en el agua, tratando de hacer una acrobacia que no salió tan bien como esperaba.

- ¡Te dije que no lo harias! --Even soltó una carcajada de victoria.

- Sí si, ríete. --traté de no sonar lo menos avergonzado, pero fue imposible.

- No te enojes. --Even hizo un pequeño puchero en sus labios, y busco mi cara que se encontraba cabizbaja. - ¿Si? Bebé. Perdón. --pude sentir cuando sujetó mis caderas de bajo del agua e intentaba tenerme lo más cerca posible.

Comenzó a besar mi cuello de manera provocadora, se sentía sumamente bien el tacto de sus labios junto a mi piel. Lo hacía sumamente cuidadoso, como tratando de no lastimarme. Hasta que sentí cuando succionó la pequeña parte de mi cuello. Ahí entendí lo que intentaba hacer. Se dirigió directamente hacia mis labios, bensándolos con ganas y sin intención ninguna de parar. Yo hice lo mismo, le correspondí el beso de la manera que él quería.

- Te amo tanto, me haces tan bien. --dijo después de separarse tratando de recuperar la respiración que el beso le había quitado. Su mano se coloco en mi mejilla y la acarició suavemente.

- Eres arte, Isak. ¿Sabias? Puro arte. --me dijo, podía sentir mi sonrojo.

- Todo de ti, tus manos, tus ojos. Incluso tu pelo. --continuó hablando. No tenia intención de parar.

- Eres el amor de mi vida. Desde siempre, Isak. Desde el primer momento que te vi en Nissen lo supe. Fue inmediato, Isak. Fue algo instantáneo. No quiero que te vayas de mi lado. Nunca. Y se que suena cliché, pero nos casaremos. Y seremos felices, más felices de lo que crees. Te lo prometo.

Even hablaba como si estuviera por marcharse. Pero sin embargo, no pude sentir unas inmensas ganas de llorar. Todo lo que había dicho me hizo sentir completamente seguro de que lo que teníamos, era verdadero y puro. Y difícil de romper.

- Eso lo sé Even, yo también te amo, demasiado. No se que haría sin ti, eres mi todo. En serio. --dije para después abrazarlo, mientras pequeñas lágrimas se deslizaban por mis mejillas. Lo abracé hice lo más fuerte que pude. Para demostrarle que estaba allí. Para él.

- Perdoname, bebé. En serio, perdón. --me pareció sumamente extraño, pero me abrazó igual de fuerte. Incluso más.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Mar 08, 2018 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

I will never hate Even. [Evak]Where stories live. Discover now