Un viaje juntos

Me ganare tu amor

Aquellos compañeros de viaje llevaban caminando por más de una hora, lo que hizo que la pelirosa cuestionarse a mi misma -¿estuvo bien venir?¿y si mi presencia le estorba?¿esta enojado?¿cuanta soledad tuvo que pasar para que llegara a simplemente querer viajar sólo?- y para romper el silencio entre la obscura noche decide hacerle una pregunta, aún con el temor de que la ignorara. -¿no te has sentido solo todo este tiempo, Sasuke-kun?- dijo con las mejillas rojas y las manos en el pecho como esperando alguna respuesta grosera o cortante de parte del pelinegro.
-Tranquila ya vamos a llegar- dijo sin voltearla a ver, lo que sorprendió a la pelirosa pues aquel vengador de los Uchiha había contestando con amabilidad como si no fuese el mismo Sasuke, -¿llegar? ¿A donde?- le contestó la Haruno para no cortar la plática, sin embargo esta vez Sasuke ignoró la pregunta y contesto -entra- lo que desconcertó por completo a la ojijade pues delante de ella no habia más que una gran cascada que desembocaba a un río. Y con ojos de extrañeza voltea hacia atrás pues de estar concentrada en lo que había hecho, abandonar la aldea para ir con quien siempre ha amado, no sabia ni en que lugar estaba.
Lo que la maravillo aun más fue que se encontraba a un costado de una gran cascada con una hermosa vista a él bosque que se encontraba cruzando el río y con la luna enfrente de ella y con una voz de asombro -Sasuke-kun, ¡que hermoso!, ¿como conoces este lugar?-.
El Uchiha se limita a contestarle -ven sigueme-, la pelirosa con un brillo en los ojos corre detrás de Sasuke quien de dice - todo el tiempo que he estado fuera de Konoha he estado aquí, Sakura- tiernamente le toma la mano a la ojijade para ayudarla a entrar detrás de la cascada donde se encontraba una muy bien escondida cueva, algo acondicionada de manera que alguien pueda vivir en ella.

-Es un lugar presioso, Sasuke-kun , aunque algo solitario- comenta la pelirosa mientras baja su mochila, -era perfecto para mi en ese entonces- le dice el Uchiha acercándose a ella, -Sasuke-kun, ya no estas sólo- dijo con una voz tierna y con los ojos entrecerrados regalándole una tranquilizadora sonrisa.

El Uchiha cambia su rostro a uno de asombro al escuchar sus palabras y sin sentirlo se sonroja al ver la sutil sonrisa.
Rápidamente se voltea para que ella no note el sonrojo e intentando cambiar el tema, le pregunta - ¿tienes hambre?-, al escuchar la pregunta - Creo que si Sasuke-kun, ¿te gustaría que te prepare algo de cenar?-, -no esta noche me encargó yo-.

Y el Uchiha salé de la cueva y se dirige al bosque a buscar algo con lo que pueda preparar su cena.

Mientras tanto en la cueva Sakura enciende una fogata con algunos leños que se encontraban en la cueva y al conseguirlo de inmediato se dedica a acomodar el lugar donde ella dormiría, pues no quería quitarle nada de lo que Sasuke había conseguido.

Al cabo de un rato el Uchiha regresa dónde su compañera y antes de entrar pregunta -¿Sakura?-.
Pero la pelirosa no contesta, y un sentimiento confunde al pelinegro sentía temor, temor por que algo le pasase a Sakura, y sin pensarlo entra corriendo pronunciando su nombre con temor, para después sonreir sutilmente al verla dormida en una cama que observo y acababa de hacer.

El azabache deja lo que tenia en la mano cerca de la fogata y se acerca a donde se encontraba el cuerpo dormido de Sakura.

Tiernamente hace de lado un pequeño mechón de cabello que le tapaba la cara y al verla profundamente dormida le dice susurrando - Sakura, me molestas, me molesta no poderte ignorar más, jamás me di cuenta de lo hermosa que eres, jamás note lo bello de tu cabello ni el brillo de tus ojos al verme, ¿porque no puedo dejarte de ver?- y dirigiéndose a la fogata se susurra para si mismo -descansa Sakura ha sido un día muy largo para ambos...-

A la mañana siguiente el Uchiha como de costumbre se levanto de madrugada a tomar un baño antes de que Sakura despertara.
Después de ver que aun seguía dormida pues sabia que estaba realmente cansada, decide empezar a hacer su desayuno e ir a recoger más leños al bosque.

Mientras tanto la pelirosa despierta de su sueño y al no ver a Sasuke se asusto, decidió salir de la cueva lo mas tranquila que pudo, ese sentimiento se le quitó cuando levantó los ojos al bosque y vio al azabache y como si fuese una adolescente emocionada por ver a el chico que tanto ama grito con una gran sonrisa de alegría y entusiasmo - ¡Sasuke-kun! ¡Buenos días!- el ojinegro al escuchar resonar la delicada voz de Sakura voltea y sin poder evitar que se le salga una pequeña sonrisa al ver a la pelirosa recién levantada y con él pelo tiernamente despeinado y alborotado se dice a si mismo en sus pensamientos -es tan hermosa-, mientras seguía recogiendo algunos troncos la pelirosa se toca la cabeza con alegría, y al sentir su pelo despeinado y alborotado cambia la cara por una de vergüenza y pena, como su amado azabache la había visto así y corrió adentro a arreglarselo un poco antes de que Sasuke entrara de nuevo, al ver la reacción de la pelirosa el Uchiha eleva su sonrisa jamas pensó que estar con ella le alegraría los días de esa manera.

El Uchiha entró a la cueva y dejo los troncos a un costado de la fogata y le dijo -tienes hambre, hize...- a lo que la Haruno interrumpió -Seria un placer comer junto a ti, pero antes dame tu camisa para lavarla...- la ojijade alza la mirada clavándola con la de él provocando que ella se sonroje -te-te ensuciarste cuando traías lo-los leños- el Uchiha la veía completamente desconcertado  -no es necesario, yo mismo puedo...- la ojijade le toma la mano tiernamente -No, encerio quiero ayudar, dejame lavarla, porfavor- el pelinegro no pudo evitar decir que no al ver a Sakura mirándolo así. Asiente con la cabeza y empieza a quitarse la camisa dejando ver su bien marcado abdomen y sus músculos bastante formados.

La ojijade se sonrojo al verlo así, era la primera vez que lo veía sin camisa y apresurada toma la camisa y sale de la cueva para evitar seguir viéndolo así, mientras el azabache la mira desconcertado.

-Sasuke-kun es tan guapo, ¡juró que me ganare tu amor!- gritaba en su mente la pelirosa mientras sonreía sonrojada
-Sakura, estas bien- preguntaba el azabache, -Si ya voy- contesto alegre la ojijade.

Mientras entraba de nuevo a la cueva Sakura vio  sasuke sentado a un lado de la fogata -tienes hambre, quieres que...- Sakura se sentó enfrente de el y antes de que este acabará de hablar le dijo - Yo te sirvo-, tomo un tazón y con cuidado sirvió la comida.
-Ten Sasuke-kun, buen provecho- le dijo con una sonrisa.
Sasuke al tomar el tazón roza con la mano de Sakura mientras cruzaban miradas ambos se sonrojaron dejando un momento de silencio que parecía ser eterno para los dos.
-Sakura...-