Fantasía Prohibida - Luke Hemmings y Ashton Irwin

Treinta y Dos

______ se alisó una arruga de los vaqueros, se apartó el pelo por encima del hombro y luego llamó a la puerta.
Casi cinco años. Esos eran los años que habían pasado desde que había visto en persona a Harry Styles. Lo había visto en docenas de fotos. Habían hablado por teléfono, se habían escrito cientos de correos electrónicos. Habían compartido intimidades durante años, como lo que había supuesto para ______ crecer sin la influencia femenina tras la muerte de su madre, o lo duro que había sido para él haber alcanzado de repente la fama. Los difíciles estudios de ______. La agenda apretada de Harry. Los deseos de ella. Los sueños de él.
______ había planeado durante meses irse a vivir con él y de esa manera averiguar si podrían pasar juntos el resto de sus vidas.
Ahora, se encontraba ante su puerta llena de sentimientos encontrados, sin tener muy claro lo que le reservaba el futuro. Llevaba mucho tiempo queriendo estar con él.
Pero Luke, sus angustias y necesidades, su ansia y su rechazo, la habían cautivado.
______ sintió un nudo en el estómago. Intentó contenerlo, esperando volver al estado de entumecimiento en que había estado envuelta durante las últimas cuarenta y ocho horas.
«Deja la mente en blanco. Respira hondo. Tranquilízate. Pero ¿Sería eso suficiente alguna vez?».
______ había esperado, días después de que abandonase el oeste de Texas, que Luke la llamaría para disculparse, que le rogaría que regresase, que le diría lo mucho que lamentaba haberla humillado. Dios, se había pasado las horas llorando... Harry había sido lo último en lo que había pensado.
Pero Luke no se había puesto en contacto con ella. Sólo había habido un silencio infernal y absoluto. Ash sí había llamado para interesarse por ella, y había tratado de convencerla de que regresara. Incluso había llegado a implorar. Pero Luke no iba a rogarle que volviera. Según él, lo único que sentía por ella, era algo a nivel químico. ______ no se lo creía. Se habían acercado demasiado a nivel afectivo. Luke se comportaba de esa manera para intentar protegerla de algo que ______ no comprendía, al mismo tiempo que se protegía a sí mismo. Después de que él le hubiera arrojado a la cara el ofrecimiento de su virginidad, anunciando que bebía los vientos por una bailarina de striptease, había sido un verdadero infierno descubrir que, en realidad, ella le amaba.
Apartó a un lado esos pensamientos y el dolor que le oprimía el pecho, al oír pasos que se acercaban a la puerta. Volvió a inspirar profundamente. El bendito entumecimiento comenzó a invadirla de nuevo.
Luke esperaba que ella siguiera adelante. Y allí estaba ______, ante la puerta de Harry, decidida a llevar a cabo su plan. Aún adoraba a Ash, pero tenía que superar lo de Luke y labrarse un provenir. ¿Qué más podía hacer?
Se abrió la puerta de aquella habitación de hotel. Un desconocido con una sonrisa juvenil apareció ante ella. Pelo ondulado. Ojos azules. Habría sido un auténtico niño de papá si no fuera por el enorme tatuaje de calavera que cubría sus bíceps, del lápiz de ojos negro y del aro que colgaba de su nariz.
-Hola, vengo a ver a Harry.
El joven extendió la mano, pálida y elegante.
-Debes de ser ______. Yo soy Ryan. Soy el vocalista de apoyo y autor de algunas canciones.
Ella le estrechó la mano.
-Oh, sí. Harry te ha mencionado en muchas ocasiones. Es un placer conocerte. -La mirada de Ryan vagó sobre ella con una sutil apreciación.
-A ti también te ha mencionado. Decía que eras una chica muy guapa, pero veo que se equivocaba. Te has convertido en una mujer preciosa, se va a quedar sorprendido.
Brindándole una sonrisa nerviosa, ______ observó la estancia. Era una suite. Estaba decorada en tonos pastel con muy buen gusto, con una vista estupenda de Houston.
-Gracias, ¿Está Harry aquí?
-Está a punto de salir de la ducha. Me pidió que te recibiera, ya que salió un poco tarde de los ensayos y tuvo que acudir a una entrevista inesperada de la radio. -Ryan se encogió de hombros- Gajes del oficio.
-Por supuesto.
______ intentó no sentirse decepcionada, ni moverse con nerviosismo. Seguramente Harry la habría recibido personalmente si hubiera podido. Aún así, también era cierto que ella había estado esperando durante cinco años y que necesitaba con urgencia un amigo. ¿Acaso no podía esperar toda esa gente diez minutos?
-Pasa y siéntate -la invitó Ryan- ¿Te gustaría beber algo?
Señaló el mini-bar medio vacío. Había desaparecido la mayor parte de botellas de bebidas alcohólicas. El estante de refrescos estaba casi lleno.
______ negó con la cabeza mientras se dejó caer en el sofá de color chocolate.
Por un momento, se había sentido tentada de buscar consuelo en una copa de whisky, pero ya había seguido ese camino la semana pasada, y lo único que había conseguido con eso era una buena resaca.
-Nada, muchas gracias. -Ryan se sentó a su lado.
-Harry ha hablado tanto de ti que es casi como si te conociera. Siempre presume de lo amable y dulce que eres.
______ frunció el ceño. No era una santa. Sólo había que ver las cosas que hizo con Luke y Ashton. Mirándolo retrospectivamente, no sólo había estado con ellos para aprender para Harry. Ni para saber si le gustaba ser compartida. Al percatarse de que su falta de experiencia era un problema y que la solución la encontraría con Luke, ella había saltado literalmente para ir a verle. Para satisfacer una oscura fascinación que sentía por el duro soldado desde que era lo suficientemente mayor para comprenderla y demasiado joven para satisfacerla.
-Puede que Harry haya exagerado un poco.
-¿Quién? ¿Harry? Cuenta las cosas tal como son. Nunca prodiga alabanzas a alguien que no lo merezca.
-Ya veo. -Pero lo cierto es que no veía nada.
El Harry que había conocido aquel verano especial, había sido un joven optimista, que miraba el futuro con esperanza. Pero también era cierto que en los últimos años había parecido un poco más escéptico con las personas. Menos confiado. Puede que fuera una consecuencia de la fama o de tener que proteger su identidad y privacidad.
______ suponía que todas esas cosas acabarían por afectar a cualquiera.
-Me alegra conocer a uno de los amigos de Harry. Sé que son íntimos amigos. -le dijo, esperando descubrir exactamente que papel jugaba Ryan en la vida de Harry.
-Es probable que te dijera que he formado parte de la banda los últimos tres años. -Se inclinó hacia ella y clavó la mirada en sus ojos- Lo compartimos todo.
«Incluyendo a las mujeres». Así que era con él con quien Harry hacía los ménages. Los ojos azul claro de Ryan indicaron la importancia de la información sin decir palabra.
En lo que a Harry y a él respectaba, ______ no tenía ni idea de su acuerdo, pero ella comprendió el mensaje implícito del joven. Y por su mirada, sabía que él esperaba con ansia entrar en acción.
Era una idea inquietante. ¿Quería Harry que haga el amor con una persona que apenas conocía y que ni siquiera estaba segura de si le gustaba? Hizo una mueca.
¿Acaso ella no era diferente de las demás mujeres para Harry? ¿Más especial? Al menos eso era lo que le había dicho.
Pero eso no era su problema. En cambio Harry y Zayn... eran otra historia. La habían cautivado. Sí, pasar aquel tiempo con ellos, le había demostrado de primera mano lo excitante que era ser compartida. ______ tenía la certeza de que a Justin le gustaba la excitación y las emociones prohibidas. Y Dios sabía que, tras aquellos días con Zayn y Harry, ella lo comprendía mejor que nadie. Pero ahora, la idea de que otra persona la tocara le resultaba nauseabunda. Cuando Ryan la miró con una aire especulador ______ instintivamente se apartó y casi vomitó la comida.
Una parte de ella le gritaba que huyera. La parte más práctica, le recordaba que no tenía un futuro con Zayn y Harry. Tenía que seguir adelante.
Durante años había planeado estar con Justin. Estaba dispuesta a averiguar si aquella relación tenía futuro. Tal vez su primer amor pudiera ayudarla a recobrarse de ese último error.
-Sé a que te refieres. -Murmuró ella.
La sonrisa de Ryan se desvaneció, llevándose consigo la apariencia juvenil. Arqueó una ceja.
-¿En serio?
-Puede que la última imagen que Harry tenga de mí sea la de una chica inocente de diecisiete años, pero ya no soy tan inocente, te aseguro que he crecido.
-Y yo diría que estás más hermosa si cabe -Resonó una voz desde detrás de ella. ______ se volvió. «¿Harry?».
Desde donde ella estaba, podía ver que no había cambiado mucho. Alto, con el pelo castaño, de piel blanquecina, ojos color miel y un cuerpo de infarto tal como evidenciaban la camiseta negra y los vaqueros. Ése era Harry.
Ella saltó del sofá al mismo tiempo que él se movía hacia ella.
Cuando la envolvió en aquel enorme abrazo, con sus firmes y musculosos brazos, ella se hundió contra el... igual que había hecho aquél verano que habían pasado juntos. La cabeza de ______ ya no quedaba justo bajo su barbilla, pero la besó en los labios con la misma ternura de siempre. Ella esperó, pero... ¿Adonde había ido aquel temblor que siempre provocaban sus besos? La sonrisa que él le brindó, no parecía sincera.
Quizá sólo estaba cansado. Y distraído. Dios sabía lo preocupada que había estado ella desde que había abandonado a Luke y a Ashton. Y habían pasado cinco años desde la última vez que había visto a Harry. Las cosas habían cambiado. La gente cambiaba. Volverían a empezar de nuevo. Harry y ella conectarían.
Abrigar esperanzas de que Luke la llamara, se disculpara y que le pidiera que regresara con ellos era una estupidez.
-¡Dios! -Harry dio un paso atrás, sosteniéndola a una distancia prudencial y la miró fijamente- Estás guapísima.
-Tu también.
Él hizo un gesto con la mano para descartar el cumplido.
-Es fácil cuando tienes un estilista, un entrenador personal, un chef, bla, bla, bla. Pero siéntate. Es un placer volver a verte. -La empujó hacia el sofá y ella se sentó a su lado- Hace un par de semanas que no sé nada de ti. ¿Que tal tu padre?
-Ya conoces al coronel. Siempre está ocupado. Siempre corriendo de un lado para el otro. Anda recorriendo el mundo. Volverá a casa la semana que viene para unas mini vacaciones. Hace más de un año que no se toma unas.
Harry asintió con la cabeza. -Ese hombre nunca para. ¿Te acuerdas de aquella semana que pasamos en el lago cuando tuvo que protegerme durante todo el verano?

«¿Te acuerdas de...?». Era eso lo que había hecho que Harry y _________ se enamoraran y hubieran comenzado a hablar sobre la posibilidad de un futuro juntos. Nada había cambiado desde entonces. Y a la vez todo era distinto. Harry había acabado adoptando un estilo de vida salvaje según los periódicos sensacionalistas. Y ahora, era Luke quien ocupaba los pensamientos de ___________.

Era por él por lo que sentía un constante nudo de dolor en el estómago. Allí sentada al lado de Harry, con Ryan mirándolos, una pregunta irrumpió en su mente: ¿Incluso si lograra expulsar de su corazón a Lukey a Ashton, podría encajar en la vida de Hary?

Hasta AHIIII! NOS LEEMOS LUEGO <3