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Embarazo 02

New York, City.

—Elsa, igual Dios, Elsa ¿Por qué no me lo has dicho? -puso sus brazos alrededor de Elsa e hizo que apoyara su cabeza sobre su hombro.

—Yo –susurro- sabía que me dirías algo como "Te lo advertí". Y realmente no tengo ánimos para nada de eso.

—No te hubiera dicho nada de eso -Elsa le frunció el ceño- Está bien, tal vez lo hubiera hecho. Pero yo presentí que algo no iba bien ¿no es así? Te advertí sobre mi mal presentimiento. Y ahora tienes un problemita mayor que la estafa. –apuntó al estomago de su amiga.

—Kristoff no debió haberte llamado –gruñó.

—Sólo quería ayudar, Elsa. Está enfadado, preocupado y no sabe qué hacer. ¿Por qué estás tan enojada con él?

—No estoy enojada con él.

—¿Estás enojada conmigo? –preguntó la rubia.

—No, Punzy –murmuró frustrada- Estoy cansada, aun no comprendo todo, ha sido tan complicado.

—Lo sé.

—No. No lo sabes. –Suspiró-. Estoy enamorada de un hombre que no es mi esposo, pero que se hizo pasar por él... y mi verdadero esposo, Jackson, está en coma porque trató de huir con su novia que resulta ser la ex esposa de Jack. Es un revoltijo total. Ni siquiera estoy segura de entenderlo yo misma ¿cómo puedes entenderlo tú, entonces?

—Ok, tal vez no lo entiendo. Elsa ¿pero qué se supone que haga? Eres mi mejor amiga, no... no quiero verte así.

—Tengo hambre –dijo ella de repente cambiando radicalmente el tema, se frotó su panza.

—Debes de tenerla –acarició su espalda - ¿Qué se te antoja?

Se le antojaba estar con Jack y comer las cosas que él cocinaba, pero eso era imposible.

—No sé –se encogió de hombros- Chocolate.

Rapunzel froto las comisuras de sus labios.

—Creo que debes comer algo con más proteínas, estás muy delgada y bueno... estás embarazada.

—No necesito que me lo recuerdes.

—¿No quieres al bebé? Hace tiempo me dijiste que siempre habías soñado con ser mamá.

—Yo... quiero al bebé, es... es solo que no lo esperaba en esta situación. Estoy sola.

—¿Jack no se hará cargo?- inquirió la rubia. No se perdería ni un detalle de lo que ha pasado estas semanas.

—Jack no sabe nada.-respondió con melancolía.

Corona arrugó sus ojos, Elsa no era la clase de chica que ocultaba cosas -¿No planeas decírselo?

—No, tengo miedo.

—¿De qué?

—De que me diga que no me quiere, y que tampoco quiere al bebé.- agachó la cabeza reteniendo algunas lágrimas que amenazaban salir de sus ojos.

—Dijiste que creías en el amor.

—Sí, lo hago. Pero al parecer él no cree en mi.

—Yo creo que él al menos siente algo por ti, no te hubiera dicho la verdad si no lo hiciera.

—Me dijo la verdad porque lo obligué, porque rompí su guitarra en pedazos y porque lo amenacé con preguntárselo a Thoot.

—¿Thoot es la esposa?-inquirió.

El Impostor (Jelsa) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora