Saqué mi celular y revisé los 3 mensajes que tenía.

"que se vayan, No me éstas haciendo caso querida, te lo estoy advirtiendo."

Abrí el segundo.

"que desobediente eres"

Abrí el tercero.

"pronto tendrás una visita mía cariño"

Bufe y guarde mi celular, todo el mes había estado mandándome mensajes que decían casi siempre lo mismo, estaba aburrida ya de eso.

—ya volví.

Sonreí y guarde el celular, vimos la televisión por un largo rato mientras él me acariciaba el cabello, aún habían muchas cosas que estaban inconclusas, yo no tenía idea de la vida pasada de Andrew, no sabía mucho de él y eso me frustraba.

— ¿Que pasa Ann?—preguntó preocupado.

—Nada, no importa. —sonreí y apoye mi cabeza en su pecho.

Luego de un rato decidí preguntarle lo que había estado tratando de preguntarle toda la semana, pero sin embargo tenía miedo.

— ¿Quién es Matt?—me volteé y lo mire directamente a los ojos

Su rostro palideció y yo lo noté, él día Martes mientras volvía a casa, un hombre se bajó de un auto y me amenazó, diciendo que me alejara de Andrew o sufriría las consecuencias, él me decía que Andrew escondía muchas cosas y que tenía que alejarme de su mundo, pero al fin y al cabo nuestros mundos son totalmente parecidos.

—N-nadie. —frunció el ceño y se levantó del sillón rápidamente. —Cariño, si te dicen algo de mí, no les creas por favor. —su voz sonó quebrada y me estaba empezando a preocupar.

—pero  dime ¿escondes algo? —lo miré con preocupación y el suspiro.

—te contaré, pero por favor no te vayas a alejar de mí. —asentí con temor y él se sentó de nuevo. —te lo diré porque no quiero perderte y no quiero que te enteres las cosas del pasado por boca de otros ¿Está bien? —asentí y el dio una gran bocanada de aire para luego hablar.

—Hace unos años, cuándo tenía Quince años, Mí padre se había metido en un problema, y como siempre no le importe y me mando a mí a solucionarlo, yo no entendía nada, era un ''adolescente'' —hizo comillas con sus dedos. — asustado, al llegar ese día, tres hombres me golpearon hasta dejarme inconsciente, desperté en una habitación, seguido de eso, me violaron. —sus músculos se tensaron. — los mismos hombres que me golpearon, me violaron.

<<A mí padre no le importo, y todos los días me llevaban a ese lugar a hacerme lo mismo, sentía tanta rabia e impotencia, que empecé a ir a los clubs de las prostitutas, allí me acostaba con cada mujer que se me cruzaba. Por despecho, enamoré a la hija de uno de los que me violaron, claro, es como toda una película. —Rio amargamente. — la enamoré y tuve sexo con ella, la utilice.

Cuando dijo eso mis ojos se aguaron de lágrimas, si Andrew había hecho eso, ¿era capaz de hacérmelo a mí? enseguida siguió.

«no quiero que pienses que yo te lo haré a tú, en ese entonces ya tenía 16 años y todo me importaba una mierda, estaba enojado con todos, sentía tanto rencor hacía mi padre. Me metí en las drogas y en el alcohol, era un alcohólico jodido. Y sé qué, como ahora yo te estoy contando esto que nunca se lo conté a nadie, tienes que saber que eres importante para mí y que nunca te haría daño, eres la primera mujer que se ha ganado mí corazón.»

Mi corazón dio un vuelco y me abalancé sobre él y lo abracé como nunca lo había abrazado en mi vida.

—pero Andrew... —solloza. — ¿C-como mierda te han podido hacer eso? —las lágrimas comenzaron a bajar con rapidez por mis mejillas.

Andrew estaba destrozado, lloraba sin parar, siempre se me rompía el corazón cuándo lo veía llorar, se veía tan indefenso, tan mal. Aún no lograba asimilar bien, lo habían violado tres hombres, por despecho enamoró a la hija de uno de ellos y tuvo sexo, luego supongo que la dejo, La vida de Andrew siempre había sido dura, ahora con la muerte de su padre, que, aunque nunca quiso a Andrew, él si lo quería, quizás un poco, y ahora él no tenía ningún familiar, y eso me lo había confirmado el unos días atrás. Ahora más que nunca tenía que estar junto a él y apoyarlo.

—Ya basta, no debo llorar. —dijo él.

—Tienes que desahogarte, llora, llorar no le hace mal a nadie, siempre estaré para ti. —me separé de él y le di un corto beso en los labios. — ¿Y algo más que tengas que decirme? —susurré.

—sí. —miro hacía bajo. —Hace tres años, mi padre tuvo un negocio, secuestraba mujeres y las vendía, yo estuve involucrado en eso. No fue porque yo quería, él me tenía amenazado con matarme y yo no dudaba en su palabra, ya que había visto miles de veces cómo el mataba, incluso, a sus amigos.

La sangre se me helo y no pude decir nada, la vida de Andrew había sido como la de una película de mafiosos, y lo peor de todo es que era real.

—No quiero que me dejes. —Susurró —no lo hagas, no soy una mala persona, ya no soy así. Ahora te necesito más que nunca. —me abrazo.

—Y no te dejaré Andrew, no puedo decir que te entiendo ya que no eh pasado por eso, pero me imagino lo horrible que debió ser para ti y todo lo hiciste por rencor y por obedecer a tú padre. —esto lo desea por lo de la chica y por lo de que él también estaba involucrado en vender a las mujeres, pero no me importaba porque eso ya pasó.

Le di un beso en los labios y me acurruqué con él en el sillón, estaba preocupada porque Matt ya sabía dónde encontrarme y sabe que yo estoy involucrada con Andrew.

—Andrew... —lo llamé despacio —entonces, ¿Quién es Matt? —susurré.

—Matt era por decirlo así, la mano derecha de mí padre, y él era el encargado de asesinar a todos los que se involucraban con él. —susurró despacio. 






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Mi profesor de Inglés. | Colton haynes | ©Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora